Jiang Cheng abrió sus ojos con mucho esfuerzo, todo estaba borroso y le daba vueltas hasta el alma, estaba seguro de ello.
Podía sentir sus ojos hinchados como nunca antes habían estado, ni cuando YunmengJiang fue diezmado o cuando vio a su hermano aventar su existencia por ese acantilado mientras creía que no era amado.
Seguramente no sería una buena opción salir en ese estado tan demacrado y roto, si su madre estuviera ahí lo más seguro es que le dijera algo como "¡Jiang Cheng, eres un líder de secta, no puedes permitirte llorar por alguien como Wei WuXian", mientras que el tonto de su hermano le diría en medio de sonrisas cálidas "A-Cheng, la señora Yu tiene razón, no deberías de llorar por alguien como yo, por alguien como yo tienes que festejar y vivir libremente". Podía imaginarlos perfectamente con las memorias de un pasado lleno de giros y buenos recuerdos, alegrías y risas de felicidad, tantas buenas memorias.
Pero ni su madre ni Wei WuXian estaban ahí para decirle algo. Ahora solo tenía a su hermana y pequeñas presencias a las cuales cuidar, Jiang WanYin estaba prácticamente solo.
Por mucho que quisiese negarlo, estaba solo... o al menos ya no estaba tan acompañado como antes, incluso había perdido gran parte de contacto con Nie HuaiSang.
Ahora vivía en un mundo en el que brillo estaba opacado.
Los días pasaron y Jiang Cheng, a pesar de estar mejor, seguía sintiendo un peso en su pecho, lo mismo sucedía con Lan XiChen. Ambos estaban con la pesadumbre recayendo fuertemente sobre ellos, incluso cuando intentaban hallar consuelo en el hecho de que no importaba lo que hicieran ahora, sus acciones pasadas no cambiarían por nada.
Las súplicas de auxilio que ignoraron, la poca ayuda que pudieron haber brindado, lo que pudieron haber hecho, todo eso estaba en el pasado.
Lo que decidieron elegir, lo que eligieron creer, las mentiras que se obligaron a creer, absolutamente todo eso quedaba en un tiempo lejano al que no podrían afectar. Un tiempo lejano del que solo podían arrepentirse en silencio.
Lan XiChen parpadeó en un intento de hacer que las gotas de agua salada desaparecieran de sus ojos. Lan QiRen solo observó con impotencia a su sobrino comprendiendo absolutamente el sentimiento que lo inundaba.
El líder Lan había optado por contarle a su tío lo que contenía aquel peculiar libro y todo lo que pudo observar a través de él así como también todo lo que le había dicho Tie Liudong aquella vez que se encontraron dentro de los recuerdos de la mujer. El Lan mayor no estaba seguro de cómo debería de reaccionar con toda la información recibida.
Su corazón estaba lleno de muchos sentimientos que le pesaban profundamente en el pecho, es decir, a quién no le harían una carga mayor el arrepentimiento, la decepción, traición y todo lo demás que le abrumaba pero que no era capaz de nombrar.
Ya sea por curiosidad o un vil intento de redimirse, Lan QiRen también quiso ver de qué trataba exactamente todo aquello.
De esa manera, los dos Lan se adentraron en el libro peculiar y de aspecto desgastado. El cómo lo hicieron fue algo que debían de agradecer a las notas que Lan WangJi amablemente había dejado para ellos.
Hermano:
Probablemente ya le hayas contado al tío acerca de la existencia de este libro y todo lo que has visto, espero que los dos hayan estado bien.
Supongo que si están leyendo esta nota, fue porque se sintieron culpables, aunque realmente no deberían de hacerlo, fue mi error el hecho de dejar que ustedes me mantuvieran en silencio y me tratan como alguien ignorante que no sabía lo que decía.
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𝘛𝘩𝘦 𝘔𝘦𝘮𝘰𝘳𝘪𝘦𝘴 𝘖𝘧 𝘠𝘪𝘭𝘪𝘯𝘨
FanfictionDespués de visitar el salón ancestral de YilingWei, el joven líder Jiang regresa a su hogar echo un desastre y decide buscar la caja que dejó su hermano, al que maldijo durante tiempo y que ahora extraña con demasía. ¿Qué es lo que hay dentro de aqu...