𝐂𝐨𝐧𝐬𝐢𝐠𝐥𝐢𝐞𝐫𝐞 | ᴷᵒᵒᵏⱽ [+18]

«Capítulo 16»

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Apenas el pelinegro salió de su oficina Kim gruñó internamente queriendo patear lo primero que se le cruzara, ¿Era acaso una estúpida broma?
En la cabeza del modelo no lograba entrar el como a alguien que sabía de su posición como jefe además de su estatus como una celebridad se le había ocurrido ir a gritar casi a los cuatro vientos su nombre, estaba furioso sin duda y vaya que deseaba con todas sus fuerzas romper el cuello de aquel idiota.

-Señor Kim, aquí está la persona que desea hablar con usted-Musitó su secretaria haciéndose a un lado para que el hombre castaño que estaba a su lado entrara, volviendo rápidamente a su puesto de trabajo junto a Ye-won al notar el aura rabiosa que el moreno desprendía.

-Hey, ¿Qué tal, Tae?-Sin dejar terminar al ojimarrón Taehyung se abalanzó sobre él haciéndolo sentir el gélido suelo golpear su cabeza y un tacto metálico enterrarse en su cuello, causándole un pequeño escalofrío que el moreno no notó.

Sin que el mayor se percatara, Taehyung había cerrado la puerta con seguro y había tomado disimuladamente su hermosa pluma de color dorado que tenía una punta muy afilada, una punta que en ese momento amenazaba con encajarse hasta el fondo del cuello del hombre sobre el que estaba sentado.

-¿Se puede saber que mierda crees que estás haciendo, Jung? No eres mi amigo ni mucho menos alguien en quien confíe como para que vengas a molestarme con tu presencia o simplemente a fastidiar mis planes revelándole mi identidad a todos mis trabajadores-Siseó el rubio con furia, enterrando más y más la pluma en el cuello del castaño, que de pronto sintió como una gota de sangre comenzaba a correr por su piel, dejando un rastro color escarlata a su paso.-Estoy harto de ti, ¿Me dirás de nuevo que no tienes idea de lo que ocurre?¿Acaso te golpeaste la cabeza o algo así?-Inquirió quitando el arma del cuello del mayor levantándose luego con rapidez, dejando salir un bufido disconforme en el proceso.

-J-JiMin dijo que como no tenía un puesto asignado le podría servir como mensajero, por eso vine-Respondió el mayor con una evidente sensación de terror y angustia, después de todo Taehyung había estado a punto de matarlo en ese preciso instante.-Me pidió que te trajera esto, dijo que solo debía llegar y preguntar por ti-Susurró levantándose y dejando una pequeña caja de terciopelo negro sobre el escritorio del ojiverde, alejándose rapidamente en cuanto el menor le dirigió una mirada cargada de odio, que no tardó mucho en suavizarse ya que si bien se enojaba con mucha facilidad, con la misma facilidad se relajaba si la situación no era tan grave.

Cerrando los ojos en busca de algo de calma el rubio se sentó estirando sus brazos hacia arriba, escuchando detalladamente cómo sus huesos se acomodaban con aquel movimiento, dirigiéndose luego a Hoseok, que parecía observarlo embobado desde atrás del escritorio.