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El primer beso que ambos se dieron fue bajo la lluvia, digna de una escena dramática para unos dramáticos como ellos.


Y de alguna manera, ambos estaban rememorando aquella ocasión. Besándose bajo el agua de la ducha luego de tanto tiempo.






Changmin sabía que debía empujar a Sunwoo, gritarlo y luego matarlo. Pero cuando el pelinegro comenzó golpeando sus labios con suavidad mezclándolos con los suyos en un dulce beso, el olvido lo que era actuar con razonamiento.

Sunwoo pegó sus fuertes manos a cada cada lado de la cabeza de Changmin y pegando el cuerpo del mayor contra la pared mientras se besaban con tanta desesperación sintiendo las gotas del agua caer en sus cuerpos.

Wonnu...— jadeó el castaño por inercia.
 

Y Sunwoo perdió totalmente su cordura. Llevo sus manos al trasero de Changmin y lo elevó haciendo que este soltara un gimoteo suave, que aunque tratando de ocultarlo o hacerlo sonar más grave, se escuchó más que delicado debido a la leve mordida que el menor había aplicado en su labio inferior, algo que de hecho alteró más a Sunwoo obligando a este último a obtener una dura erección bajo sus pantalones.


Y el pelinegro deseo volver a escucharlo, quería tener esa motivación tan lujuriosa por parte del mayor que no se limitó en introducir su lengua dentro de la boca ajena para que de ese modo ambas lenguas iniciasen un juego sucio y al mismo tiempo caliente.

Sunwoo elevó a Changmin hasta hacer que este enredara sus piernas en su cadera y pegará su mojada espalda a la pared.

Sus lenguas empezaron a golpearse entre sí, escurridizas y suaves, buscaban estratégicos choques entre ellas en medio de los ya acalorados gemidos por parte de ambos.




Luego de segundos se separaron, pero sorpresivamente fue Changmin el encargado de volver a unir sus labios y ya no en un beso suave, sino en uno demandante. El mayor colocó la punta de su lengua sobre el grueso labio de Sunwoo para saborearlo como tantas veces había hecho en el pasado, para deslizar aquella húmeda lengua ahí provocando una grata sensación en el menor.

Sunwoo distinguió un leve sabor a chocolate en la boca del bajo creyendo que por fin había alcanzado la locura al saciar su paladar con el exquisito sabor que tanto amaba.


Pasaron unos cuantos minutos así, besándose mientras sus cuerpos aún seguía mojándose debido a la ducha, ganando mucha más lujuria y excitación en sus mentes como también dureza para sus miembros y unas malditas ganas por querer comerse nuevamente pero la falta de oxígeno les jugó en contra y les hizo volver a realidad.





Al separarse, ambos pudieron notar por medio de los labios del contrario, la leve hinchazón causada por el beso además del rastro tentador de la saliva barnizándolos y un casi invisible hilo de saliva que sirvió como unión de sus labios que terminó por romperse como era debido.






—Y-yo...— inicia Changmin saliendo del trance inicial. — ¡No vuelvas hacer eso!

Sunwoo se asusto por el repentino grito y bajo lento a Changmin.

—¿Que mierda te pasa ahora? — pregunto confundido el menor, ya que segundo antes Changmin parecía estar bien mientras le succionaba la lengua.

—¡Que te importa! ¡No vuelvas a tocarme! ¡Ni a besarme! — Sunwoo no sabía si mirarlo divertido o preocupado por su bipolaridad. — Y...¡Le diré a tu madre que me manoseaste en el baño! — amenazó nervioso — ¡Y QUITATE DE MI CAMINO!

Sunwoo se hizo a un lado, mientras Changmin caminaba enojado saliendo del cubículo y el menor suspiro tranquilo.

"Al menos sigo con vida..."




























Adversarios 『Sunkyu』// The Boyz [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora