M A N I A C > [Scarzzie]

"No fue tu culpa, sino la mía."

- No tenías derecho a arruinar el polvo de esta manera...

- Bien, solo me coloc-

Intenté estirar el brazo en busca de mi blusa, pero Scarlett me lo impidió sujetando mi cintura.

Ella ha quedado helada ante mis palabras. Puedo notar en sus ojos, en su voz, y en sus movimientos que está muerta de nervios, pero parece que es muy buena tratando de ocultar sus verdaderas emociones.

- ¿De dónde carajo escuchaste lo que acabas de decir?

- Se cayeron camino al baño, así es como descubrí tus documentos falsos.

- ¿Mi hermano, de donde sacaste que soy hija de-? Olvídalo, es Tony Stark... no creo que sea tan difícil saber algo así.

Baje la mirada ignorando sus palabras.

- ¿Esto no ha significado nada para ti? Sé honesta, honesta de verdad...

Es ahora ella quien se estira para tomar nuestras playeras, y una vez que se coloca la suya, y yo la mía, ella rodea mi cintura con sus brazos, y me mantiene cerca sin decir nada.

- Creo que ha significado algo, y me aterra... Me aterra no conocer a la persona que me hace suspirar cada que la atrapó observándome al final del pasillo...

-Me pasa también, yo... Me gustas, ¿sabes? Lo diré, no importa si piensas que estoy loca, no me importa nada... Scarlett, yo, estoy enamorada de ti, llevo tanto tiempo enamorada de ti que ni siquiera es sano... Así que ámame de vuelta, no sé qué haré si no.

Scarlett me miró con una sonrisa y los ojos brillosos... Tomó mi rostro con delicadeza y unió nuestros labios de una manera distinta a todas las veces anteriores, lo hizo con amor, lo hizo con el deseo de que se repitiera una y otra vez.

No sé si en otra ocasión seré capaz de sentir algo similar.

- Eres realmente la cosa más aleatoria que me ha sucedido en la vida, Lizzie... pero por muy hermosa y terriblemente atractiva que seas, no te metas en mis asuntos.

- No, no me hagas eso, no me hables de esa forma.

- ¡BIEN! Me asustas, no sé quién eres, no sé cómo sabes tanto de mí, y te diré, mi vida no es una cosa interesante ni genial, es un conflicto político en el que no debes involucrarte o saldrás jodida.

- No me importa... eso, no me importa salir jodida.

Scarlett unió nuestros labios dejando una leve mordida y suspiró.

- No tienes más de 21, ¿verdad?

- ¿Me estás tratando de llamar imbécil, o algo parecido?

Scarlett me miró asustada.

- No, no, no, yo... solo creí que me habías mentido.

"Ella es inteligente, Lizzie, no podrás querer ganar siempre"

- Tu eres la que me ha mentido.

- Chris es un imbécil, no me gusta, estamos juntos por cosas que tú no serías capaz de entender, ¿ya? Mi padre organizó el evento porque sabe que disfruto escribir y es su manera de pedir disculpas, es todo.

- No se ve como que lo hayas disculpado.

- No lo hice, ni lo haré... pero supongo que algo bueno salió de entre todo.

- ¿Y los pasaportes?, ¿Por qué tantos?

Scarlett carraspeo levantándose del mueble. Mantuvo mi cuerpo pegado al suyo de camino hasta la puerta.

- ¡Vayamos a una habitación nueva, y pasemos un buen rato!

- Acabamos de-

- No para tener sexo, dios, ¿me crees una especie de ninfómana?

"A veces."

- Si, a veces.

- Espero que aún no hayas encontrado pareja para el proyecto de historias cortas.

Scarlett y yo nos colocamos los pantalones y salimos ahí entre risas, y miradas robadas.

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(-1)

Es el día 19, hoy por la noche harían los anuncios importantes, como quienes podrían firmar con editoriales, el dúo que escribiría una historia nueva, historias que irían a la pantalla grande... toda esa clase de cosas geniales que uno solo es capaz de soñar hasta que un millonario estúpido decide volverlas realidad.

Scarlett y yo habíamos estado viéndonos a escondidas. Pero esta vez de una manera más sana, sin tanto sexo de por medio, por las noches leíamos sus historias favoritas, o nos tomábamos el tiempo para crear tramas espectaculares de historias que probablemente jamás publicaremos.

He descubierto a una nueva Scarlett pero al mismo tiempo cada que la escucho reír es como si no la conociera en lo absoluto.

- Mi madre está muerta, tu padre está muerto... Creo que es por eso que me agradas, creo que ambas entendemos la sensación de partirnos a llorar en medio de cualquier día porque recordamos la manera en que solían hablar, o cuál era su desayuno favorito.

Sé que es así, sé que nunca antes nadie me había entendido ni descifrado de la manera en que ella lo hace.

Pero sé que miente, sé que miente mucho... sé que es una maestra mintiendo porque yo también lo hago. Se que hay miles de cosas que no dice, y no tiene la obligación de decirlas. Pero yo necesito saberlas, creo que es uno de mis problemas, siempre necesito algo.

Su novio puede ser bastante pegadizo... Siempre está sobre Scarlett y por lo general no parece un mal tipo, pero ella no lo tolera en lo absoluto.

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- Luces hermosa con ese vestido... tendrás todas las miradas encima.

La rubia sonríe a través del espejo y camina hacia mí, sentándose en mi regazo.

- Tu tendrás la mía, y yo solo quiero la tuya...

Unimos nuestros labios y antes de que todo pueda pasar a más, el teléfono de Scarlett suena.

- Mierda, es Chris... debo ir, o, comenzará a buscarme y no qui-

- No quieres que me ubique, si, lo entiendo, lo sé de memoria...

Tome mi bolso triste, y Scarlett se acercó a sostener mi barbilla.

- ¿Qué pasa, Lizzard...?

- Mañana acaba todo, Scar, para bien o para mal... mañana acaba todo, regresamos a casa, cada una a distintas partes... y no sé qué tan normal volverá a ser todo, pero ahora que conozco tu rostro, y que he sentido tu alma de cerca no sé cómo soportar el tener que volver a quererte a través de una pantalla.

Una lágrima recorre el rostro de Scar al igual que el mío, desarrollamos algo especial... en tan solo días, puedo apostar a que ninguna se ha sentido así alguna vez antes.

Estábamos perdiendo la razón, y no nos importaba. Lo único que queríamos era no perdernos.

- Pero ella te mintió, lo sé, sé que esa es tu siguiente frase... "Pero ella mentía."

- Déjala contarlo... se pierde la emoción.

- Podremos volver a vernos, alguna vez... Digo, tenemos el dinero, somos adultas... Creo que podremos solucionarlo, ¿no es así?

Scarlett dio un par de caricias a mi barbilla y se marchó de la habitación apurada.

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