RED DEVIL

18.2K 1.2K 441
                                    

Entre al club llenando mis oídos de música, mi nariz de un olor entre alcohol y sudor (es raro, mas no desagradable), mis ojos captaron a las personas que eran levemente iluminadas por una luz rojiza.

Es como el infierno y como todo infierno necesita un diablo y tú acabas de llegar.

Hoy como que estás un poco cuerda, me agrada.

No había pasado ni un minuto desde que entré cuando un chico de tez bronceada, alto, un poco corpulento y una típica actitud de "Todas mueren por mi".

—¿De qué nube caíste, ángel? — fruncí el ceño ante su "halago"— una bebida para un hermoso ángel.

Mire la bebida y rodee los ojos, no tengo duda que esta bebida tiene gammahidroxibutirato.

—La próxima vez elige a quien drogar— alce la bebida hasta la altura de mi rostro.

—¿De qué hablas?

Hay cosita, es tan tierno que le quiero partir la cara.

Pero porque tanta agresividad, sabes lo que podemos hacer, solo necesitamos enviar un simple mensaje.

—No es el color original de la bebida, tiene un color caramelo, lo que me indica que contiene el químico 4-metilimidazol— moví el vaso— y por lo menos hubieras esperado que desaparecieran las burbujas.

Estaba paralizado, con un tono pálido y los ojos abiertos de gran manera.

—Puedes comprobar que los años que he estudiado bioquímica no sirven un carajo, tomando lo que hay en el vaso— le entregue la bebida.

—Yo no voy a tomar nada.

—Lo supuse— vacíe el líquido en su cuerpo.

Me aleje de él mientras enviaba un corto pero eficaz mensaje.

Llegué a la barra obteniendo la mirada de varios, me senté al lado de una pareja muy apasionada.

Se están comiendo.

—¿Cuál es la especialidad?— pregunte al bartender.

—Red Ambrosi.

No tengo ni la menor idea de lo que traiga, pero quiero diez.

—Deme uno por favor.

La chica se alejo por lo que iba a necesitar para mi trago, lo que me gustó de este lugar es que las bebidas las preparan frente a ti.

Mi vista inspecciona a fondo el lugar en busca de mi objetivo. Lo encontré en el segundo piso tomando lo que creo que es whisky, mientras asentía a lo que decían las personas que estaban en la misma mesa que él.

—Hola.

Aparte la vista de Nicolás para ver a la persona que me había hablado.

—Hola— conteste por educación.

—¿Sola nena?

—Si.

La bartender me entregó mi bebida, esta es de un rojo intenso.

—Una chica linda como tu no tiene que estar sola, nena.

Sonreí mientras tomaba un poco de mi trago.

—Mejor sola que mal acompañada— cite un dicho.

—Lily— la chica me extendió la mano.

—Luciana.

Comencé a hablar con la pelinegra, esta y su novio (son la pareja que se estaban comiendo a besos) eran muy divertidos y buenos acompañantes.

—Entonces eres bisexual— asentí—. Eres perfecta nena.

Mi pequeña obsesión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora