omega particular, alfa curioso [Diluc/Scaramouche]

capítulo 11, omega caprichoso

Scaramouche miró con incredulidad al pelirrojo, aunque sin darse cuenta su cabeza de manera traicionera asintió ante aquella pregunta que le dejo perplejo, como si su corazón no necesitará permiso directo de su mente para darle órdenes a su cuerpo para comenzar y permitir un dulce baile que con cada vuelta lo enamoraba más, pero de una forma tan adictiva que le impedía presentar el más mínimo quejido al repentino momento.

Dio un giro, tal vez dos, no lo sabía y tampoco le importaba, no mientras aquellas manos cubiertas por esos guantes lo sostuvieran tan bien como lo hacían en ese momento, sus ojos no se podían apartar en ese momento del par de rubíes que le observaban como el regalo más precioso que un arconte pudiera haberle dado a un mortal, por lo que tuvo que encargarle al alfa guiar cada uno de sus pasos durante la pieza melódica que los envolvía sin temor alguno en un aura romántica.

Sonrió con delicadeza, sin darse cuenta que estaba dederramando lágrimas de felicidad ante el puro momento de alegría que en ese instante lo llenaba, dejo que los segundos corrieran como el viento libre que abundaba en aquella capital mientras la música sonaba, el pelirrojo dudó, antes de sostenerlo por la cadera, dándole una suave elevación luego de un apretón, que más que de coqueteo era para pedir permiso, llevándolo así por el aire con un giro lleno de gracia, permitiendo que su cuerpo inspirado por la música con un estilo de baile capaz de enamorar, de pasos sencillos y muy elegantes, con los que se pueden apreciar cada uno de los movimientos como si fueran una obra de arte muy delicada, forjada por el más alto artista por la forma tan perfecta en la que ambos cuerpos se dejan llevar, donde cada giro era acompañado de una suave violín junto a la perfecta voz que entonaba la canción, y como si las notas de las partituras vida pudieran cobrar se adherían a ellos, emborrachando los con la música, permitiendo que la confianza lo llenará y pasos más atrevidos llegarán, llenándolos de una emoción reconfortante y repleta de adrenalina, más al sentir de nuevo varias miradas expectantes, que seguían los cuerpos que ahora sin dudar se estiraban, giraban, e incluso se alejaban, con movimientos de cadera coquetos por parte del omega que se unían con las fuertes pisadas del alfa, que apenas atrapar las manos del contrario volvía a atraerlo a su cuerpo con choques seguros, marcando sin pena alguna el ritmo con suaves tarareos, gozando del momento y la sensualidad que ambos desprendían.

Hubieran seguido así de no haber notado una copa en dirección a la cabeza del alfa que hizo a Scaramouche dar un giro apresurado con tal de preservar la integridad del que consideraba ahora el capricho que ni viento, tierra y agua podrían quitarle, el alfa sería suyo, junto a cada parte de él y con decisión reinicio más seguro que nunca la pieza de baile.

- Nos despegues tus ojos de mi amenos de que sean dirigidos a mi escote - gruñó al alfa apenas acabar la canción, tomando su mano con fuerza, mirando directamente al responsable de que aquella copa casi impactará contra su futuro alfa.

Con una mirada retadora miró al científico que aún posaba al lado de una dama rubia, que gruñía cada vez más a medida de que los pasos de Scaramouche se adentraban hasta llegar al centro de toda la multitud.

- Si él quiere armar un berrinche porque conseguí alguien mejor, entonces le seguiré el juego - dijo entrelazando su mano con la de Diluc, que aún lucia visiblemente confundido, luego de que una copa casi se estrellara con su cabeza.

- Scaramouche, ¿Qué está sucediendo?- cuestionó dudoso, aunque sabía que debía alistarse para un nuevo baile, cuando el omega obligó a una de sus subordinadas a pedir una canción en específico.

- Mi nombre es Kunikuzushi - aclaró dándole un privilegio que nunca antes le dio a alguien en su vida, le abrió una puerta a su pasado que se había negado a abrir antes, pero no hubo tiempo de arrepentimientos, antes de que el propio omega ahora diera inicio a la nueva pieza de baile.

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¿Sabían que dependiendo de mi emoción escribo el capítulo?, ¿No?, Pues ahora lo saben.

Vengo demasiado enrabiada de leer "liveta" y necesitaba descargar mi odio en algún lado, por suerte decidí terminar de desarrollar la mala relación de Scaramouche y Dottore y no la de Scara y Diluc, hoy la pareja principal corrió suerte.

¡PERO JURAITO QUE SI ESTE PELADO NO ACABA MUERTO EN ESTE LIBRO CORREN LÁGRIMAS! -inserte autora enojada que se desquita con sus personajes -

En otras noticias casi me vuelvo a desquiciar por no poder encontrar la canción del inicio, y puedo apostar toda mi colección de dibujos a que Diluc invitaría a bailar con él esa canción a alguien importante, así que sí, él y scara están bailando está canción.

El capítulo por cierto se ha divido en dos partes, por eso es más corte que de costumbre.