omega particular, alfa curioso [Diluc/Scaramouche]

capítulo 23, omega sobreprotector

Diluc volvió a su lugar en el pecho del omega una vez que terminaron de comer, no recordaba la última vez que pasó un día tan tranquilo, sin pensar en nada respecto al trabajo, pudo notarlo cuando Scaramouche salió, no quería que dejara la cama, lo quería descansando, estaba seguro de que se dio cuenta de que el estrés de verlo en una posición de enfermedad tan delicada lo afecto más de lo debido.

Realmente le traía malos recuerdos ver a alguien en cama, sobre todo si era cercano, el recuerdo de su padre en el suelo luego de aquel incidente aún rondaba su cabeza, torturandolo ferozmente.

- Sea lo que sea que estés pensándolo olvidalo, ahora - exigió el omega, no porque deseara la atención del alfa, que también la quería, si no porque notaba como el cabello del pelirrojo comenzaba a quedarse en sus dedos a medida de que los pasaba para peinarlo con dulzura - Pareces un gato, el estrés está haciendo que sueltes muchos cabellos - mencionó besando dulcemente su frente.

- Lo siento - mencionó cerrando sus ojos, disfrutando de los mimos que le brindaba el heraldo - Solo... Me siento estresado - susurró desviando la mirada, no era muy natural en él hablar sobre sus emociones con otros, pero si el omega ha de volverse su pareja debía de compartirlos.

- Si es por mi salud relájate, ya me siento mejor - tomo las mejillas del más alto entre sus manos, comenzando a repartir besos a lo largo de su cara, repasando también el chupeton en su barbilla, aún estaba aunque ya había comenzado a borrarse - Si no es por eso, puedes compartirmelo si deseas - ofreció apoyo sin presionar, Diluc había sido tan amable y comprensivo con él, lo mínimo que podía hacer era devolver el favor.

Hubo un minuto de silencio, el alfa solo se escondió más en el pecho del omega, sus feromonas reflejaban el poco alegre estado de ánimo que poseía el pelirrojo.

- No me gusta ver a mis personas especiales enfermas... mucho menos en cama - susurró con cierta pena, abrazando con más fuerza la cintura del heraldo - me recuerdan... Me recuerdan a cuando papá murió - soltó suspirando con una pesadez gigante, dejando que lágrimas escaparan de sus ojos.

El omega suspiró, abrazándolo con fuerza, ofreciendo su hombro como consuelo mientras acariciaba con amor y delicadeza su cuero cabelludo.

- Hey está bien, estoy bien - meció delicadamente, intentando calmarlo, lo sabía, el incidente con el padre de Diluc, su muerte y la forma en que los caballeros de favonius ocultaron su acto heroico, destrozó y cambio todo en Diluc, llevándolo a dejar mondstadt y comenzar un viaje para reencontrarse - Sé que lo de tu padre es un tema complicado, pero estoy aquí para ti, mi alfa - con cariño poso sus labios en los del pelirrojo, robando un beso dulce de él.

Diluc no tuvo problemas en seguir el beso, permitiendo que algunas lágrimas más escaparan para así calmarse.

……....….

Luego de ese día tuvieron que volver al trabajo, Scaramouche apenas pudo salir de la oficina en el viñedo, esencialmente solo para recibir el papeleo que se le traía y algunas veces porque el alfa entraba, lo tomaba en sus brazos para así llevarlo a la cama, no importaba cuanto pataleara, el alfa no se quedaría contento hasta que durmiera por lo menos unas dos horas.

Las negociaciones terminaron por ser extendidas, los cuatro heraldos intentaban que la diosa Cryo no cayera en cuenta de el terrible fracaso que tenían, las cosas entre él y Dottore seguían tensas, pero con los caballeros de favonius vigilando cada acción de Fatui nada pudo hacer el científico, cosa que lo frustró enormemente, quería seguir jugando, quería seguir fastidiando al omega y el alfa, odiaba ver cómo Diluc venía cada día a recoger al omega, lo enfurecía ver como un beso dulce era obsequiado sin reproche por parte del heraldo al de visión pyro y como se retiraban de la sede con sus manos juntas con cariño.

Cada noche el científico golpeaba con rabia su escritorio, rompiendo las hojas de sus investigaciones y mandando a la mierda a Signora cada vez que intentaba calmarlo, para acabarlo de rematar la mirada juzgadora de tartaglia, que vigilaba hasta el suspiró más mínimo que daba lo había hecho estar a raya.

Había querido acercarse más de una vez al pelirrojo para "charlar amablemente" con él, pero un ataque electro siempre lo recibía por parte de   Scaramouche, quien terminaba por ser protegido por Tartaglia y los caballeros de favonius, evitando que pudiera contrarestar.

El omega se había vuelto demasiado protector con su alfa, aún tenían pequeñas discusiones por el dinero que el heraldo dio para las reparaciones, no importaba cuanto intentara el pelirrojo devolvérselo, él no lo aceptaría, su relación seguía caminando a un ritmo lento, aunque no pudieran hablar seguido por el trabajo extra que llevaba encima el omega, nunca faltaba al desayuno para compartir tiempo con el alfa, quién aprovechó esos días que el heraldo no pudiera tomarle mucha atención para así investigar el incidente de su viñedo el mismo, además de recolectar información de Dottore, había estado tentado de vigilar que Más hizo Scaramouche el día que se quedó en relajatetera, pero mantuvo sus manos quietas, esperaría a que él tomara la iniciativa de contarle.

Con eso para cuando llegó el domingo de aquella semana donde se suponía ya debían de irse los heraldos en un primer lugar antes de Dottore arruinará todo, Diluc y Scaramouche se encontraron en una cita romántica,  ambos vistiendo sus mejores ropas para poder maravillar la mirada del otro.

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uh creo que aquí se puede dar por finalizada la primera parte de este libro, me daré un pequeño descanso de tal vez una semana para pensar en cómo seguiré desarrollando está historia, quiero hacer algo mucho más dramático y profundo, pero no sé sí mi capacidad de escritora me de para tanto.

Anyways, espero les haya gustado estos capítulos y disfrutarán del desarrollo de esta pareja, si gustan pueden pasarse por el nuevo libro que iré publicando esta semana mientras descanso de este libro, también es de Scaramouche y Diluc, donde mi bello pelirrojo a de infiltrarse en Fatui para ganar la confianza de Scaramouche y sacarle información, ahora sí, me despido, bye bye.