Creo que desde pequeña sentí atracción por la pintura al igual que por las mariposas, ambas me parecían la definición de libertad, por eso me gustaba unirlas. Sin embargo, ese lunes de junio te pinté a ti, mi hermoso chico mariposa, sin saber que serías mi pintura favorita y sin saber que sería la única vez que serías mi musa.
Ya habían pasado un par de días de las preguntas y respuestas. En ese par de días estuve viviendo una resaca horrible, porque nos bebimos toda la botella mientras nos comíamos los dulces, una mala idea.
—¿Cómo te sientes hoy, mariposa? ¿Sigues sintiéndote mal? —dijo acariciando mi rostro con preocupación.
Estábamos recostados en el sofá, o más bien yo estaba sentada sobre él. Habíamos estado toda la mañana allí viendo una película llamada "Yo antes de ti". Me encantó demasiado, pero el final fue... doloroso, muy doloroso. Estuve llorando desde entonces.
Así como nuestro final.
—Es que no tiene nada que ver con la resaca. Solo... él no la amaba.
—Por supuesto que la amaba, mariposa, pero, él estaba sufriendo.
—Pero ella lo hacía feliz, además la dejaría sola.
—Sí la amaba, hermosa, y ella también lo amaba, por eso lo dejo ir. No merecía sufrir para estar con ella. Así como tú no mereces sufrir para estar conmigo.
—Yo no sufro por estar contigo, Trist, tú... me haces más feliz que nada.
Me abrazó por la cintura atrayéndome a él, mi espalda y su pecho estaban unidos, a pesar de que él era más corpulento y yo delgada encajábamos perfectamente. Incluso podía sentir el latido de su corazón.
—Y te haré más daño que nada, mariposa, eso es inevitable.
No quería preguntar el por qué, me dolían esas respuestas, además él no me diría nada en concreto.
—Cuando lo sepas, Andy, sé que... te destrozará el alma, aunque también sé que querrás que vuelva, sé que me perdonarías pero el propósito de que yo esté aquí, de que haya decidido estar frente a ti es porque estabas sufriendo, todo mundo te engañaba y... tú querías arrebatar tu vida, y no estaba dispuesto a permitirlo.
»Yo solo vengo a enseñarte que puedes ser feliz, a adorarte como nadie lo hará. Claro —rió bajo—, en mis planes no estaba enamorarme más de ti.
Como todo con Tristán, allí sentí todas las mariposas recorrer mi estómago y sonreí inconscientemente, enamorada completamente de él, olvidando todo lo demás que decía.
—Mariposa, me dolerá dejarte, pero me duele más engañarte. Te dejaré porque te amo y esa será mi muestra de amor más grande.
[***]
Luego de llorar de nuevo, pero esta vez por Tristán y sus palabras, me dijo que fuéramos juntos a un museo de pintura donde se reúne un grupo a pintar y al que siempre había querido ir pero nunca quise ir sola.
—¿Ya sabes que pintar? —preguntó Tristán sonriendo mientras me guiñaba el ojo.
—Nunca he pintado algo que no sea una mariposa, Trist. Así que no te dibujaré.
Abrió la boca con asombro y luego sonrió de nuevo.
—¿No quieres que yo sea tu primera vez?
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Mi perdida salvación (Un mundo de mariposas) CORRIGIENDO
Teen Fiction¿Puedes confiar en alguien realmente? ¿Puedes si quiera confiar en ti mismo? No. Te engañas. Cómo él me engañó, como yo me engañé. Antes solía confiar en alguien, o por lo menos solía confiar en mí. Él sólo me mintió, yo también me mentí. Él me ab...