noche polar -#wattys2015

Suicidio

Bella, mi amor, te has ido, me has dejado solo, yo no puedo vivir sin ti, aun no entiendo como sobreviví antes de conocerte, o tal vez no estaba vivo hasta que te vi la primera vez, tus ojos revivieron cada célula de mi cuerpo y ahora que te has ido para siempre, no hay ningún sentido para mí.
Mi tiempo en la tierra había acabado, ahora debía dejar que las llamas del infierno consuman mi carne, maldita sea la hora en la que mi alma me abandono, si la tuviera la enviaría junto a ella, pero la esperanza de verla después de la muerte no existe, ella un ángel perfecto sin ni una mancha de seguro ya está disfrutando los placeres del paraíso, y yo un monstruo, un demonio de piedra, estoy condenado al infierno, a la eternidad sin ella.
Revoloteé rápidamente y me dirigí al Aeropuerto de Galeão, por suerte mis papeles no los había olvidado, solo estaban algo sucios y gastados, me dirigí hacia la azafata, que moría de miedo al verme, mi aspecto era monstruoso, a parte de los meses sin cazar, toda gota de humanidad se había extinguido, ahora solo era una roca, que por algún desliz del destino pronunciaba palabra.
Tan pronto, como confirmaron mi vuelo, subí al avión, tenía los minutos contados a estas alturas Alice ya tendrá una idea de mis planes, tal vez toda mi familia este saliendo a buscarme, tengo que llevarles ventaja, aunque sé que si me encontraran no me detendrían, no lo permitiría, en fin ya estoy muerto en vida, qué caso alargar lo inevitable.
Voy a extrañarlos a todos, sé que romperé sus corazones, pero ellos deben entender, en mi vida ya no existe una razón para luchar, una esperanza, ya no hay nada, por lo menos ellos se tienen a sí mismos, no soportaría ver el gran amor que se tienen, cuando en mi mente esa palabra murió con ella.
Alice, lástima que no pude agradecerte, estuviste en donde yo debí haber ayudado, sé que hizo lo posible, de no haber sido tan……. Imbécil, ella hubiera estado más pendiente y todo esto….
El avión arranco, demasiado lento, casi inerte, comencé a creer que el destino se estaba burlando de mí, y para mala suerte pusieron a una señora, de tez blanca, algo mayor junto a mí, estaba de los nervios, notaba que a mi lado algo malo le sucedería, pero la ignoré, al igual que todas las voces en mi cabeza, solo podía pensar en ella, en todo lo que vivimos juntos, en los besos, en las caricias, en su risa, en todo, ahora más que nunca me doy cuenta que fui un maldito estúpido al desperdiciar tanto tiempo lejos de ella, ahora ya no la tengo y nunca la tendré, si alguien alguna vez ha sentido el dolor de morir, aun no se comparaba con lo que yo estaba sintiendo.
Mire por la ventana, había un montón de nubes acompañándome, en ellas vi su rostro, el rostro de la perfección, el rostro que me había escoltado todos estos meses dentro de mis parpados, dentro de mí misma esencia, una mueca de agonía se marcó en mi cara,  la extraño, la amo, ni el infierno mismo se compara con este castigo.
El viaje se me hizo demasiado largo, cada minuto que pasaba sin ella me cortaba otro pedazo de mi corazón, lo hacía más trisas, y yo como un masoquista, seguía recordándola, revisaba en mi memoria, cada instante, como el día que la salve de ese salvaje Lonnie, o el día que la lleve a la graduación, todo había cambiado ahora no pude protegerla, idiota, la dejaste, imbécil la abandonaste, basura, basura, te mereces el dolor que estas sintiendo por no saber abrazar el amor cuando lo tienes en frente de tus narices.
Llegué al aeropuerto de Génova, aun pensando en que debía hacer, de seguro mis padres ya me pisan los talones, debo ser rápido, talvés lo haga aquí mismo, aún estoy lejos, pero no creo que tarde mucho en llegar los rumores de un asesino en serie chupasangre, sería perfecto de todas maneras el cielo se me negó desde mi nacimiento….
No, no, al menos mantén una de tus promesas, no puedes faltarle a si a Bella, si bien ella no me acompañara más se lo debo a su... memoria……… Sollocé
Maldita sea la hora en que de mí se secaron las lágrimas, necesito con desesperación llorarla, lavar con lágrimas de sangre si es posible, el dolor que cause.
Pero es mejor que espere llegar a Volterra, tal vez me evite tanto melodrama circense, y Aro me haga el favor si se lo pido.
A penas salí del aeropuerto corrí a toda velocidad a Volterra, aún recuerdo esa ciudad, creo que unas 2 veces pasé por ahí, pero no me quede demasiado, aunque apreciaba sus imponentes casas desgastadas por el tiempo, el color sepia y las grietas en la pared, un lugar libre de vampiros, o al menos eso creen las personas que viven ahí, que ironía, si ellos supieran que aquí se alberga la peor fuerza vampírica que ha existido.
Ahora bien, creo que al llegar no tendré mucho tiempo, será que Carlisle ya llegó, o alguien más, pues si escuchó alguien tendré que no se atacar a alguien, pero no matarle, o tal vez ir directo a la guardia Volturi, hace mucho tiempo que he querido darle unos dos que tres golpes a Félix o a Demetri, pero quien sabe no sea suficiente, tal vez deba mostrar fuerza sobrehumana, lanzar un auto por encima de varios testigos, en Volterra mostrar cualquier indicio de sobrenaturalidad sería imperdonable, pero me temo, que tal vez no sea suficiente, puede que Aro no me dé la pena de muerte, quien sabe y me considere como un aliado a su guardia, será mejor esperar, a hablar con él, aunque esperar me esté matando lentamente.
A lo lejos vía a Volterra exactamente como la recordada, ni una telaraña cambiada de lugar, casi anochecía
Creo que deberé actuar ahora mismo y acabar con este sufrimiento, un día más en el mundo sin ella, es inconcebible.
En la entrada había dos transeúntes, un chico y una mujer adulta, su madre tal vez, ella rodeo a su hijo, y lo alejo de mí, pensó:
O dios mío, seguro va a robarnos, espero que no pase nada.
Y lo medite por un segundo, visualicé la posibilidad de matarlos ahí y en el momento, dos segundos después ya estaría muerto, pero los deje ir, el asesinato no es algo que debo dejar que mi familia cargue por mi culpa, la decepción, la prepotencia, no la soportarían, en todo caso para ellos será difícil perderme, no les daré otro motivo para defraudarse.
Pasé de largo a las dos personas, que se sintieron aliviadas cuando me aleje de ellas, yo iba directamente hacia los Vulturis, pero entonces me planteé
Ahora bien que voy a decirles, no creo que entiendan mi dolor, Aro tal vez pueda verlo en mis pensamientos, pero ni así podrá medir el daño por el cual estoy pasando, tengo que tratar de razonar con ellos, aunque lo único que quisiera es acabar ahora mismo, tendré que pensar consiente por una última vez.
Aro era un lector de mentes como yo, pero con sus pros y contras, uno de los beneficios, era que podía leer cada pensamiento que haya tenido en toda mi vida, incluyendo a B...e...lla…. –me torcí de dolor- pero tenía un gran limitante a diferencia de mí que leía la mente de lejos, él tenía la obligación de tocar nuestra piel, algo riesgoso si no fuera que tiene su guardia tan pendiente de él, su don pueda que me sea útil, al ver que estoy tan decidido, sabrá que en mis pensamientos no hay vuelta atrás y que será mejor matarme antes de que los exponga.
Por otro lado a Cayo no creo que le interese, mis palabras me creerá todo un infantil, pero en el momento que se vea amenazado su incognito, responderá inmediatamente, el de todos es el más apasionado con sus reglas y castigos, cuando vea que puede torturarme con sus propias manos gustoso lo hará. Dos puntos para mí
Y Marco, creo y solo creo, porque nunca he podido entenderlo del todo, que el entenderá mi dolor, él es el único de los tres que ha sufrido una perdida, es el único que conoce el sufrimiento agonizante de perder al amor de tu vida, después de todo tras perder a su esposa, el quedó en un estado muy parecido al mío, aunque no puede haber comparación, se volvió como una roca, aburrido, con esperanza de morir, casi tanto como yo, aun no comprendo cómo es que aún sigue vivo, si yo ya no soporto otro segundo más.
Tres a mi favor…
Si logro razonar y entienden mi sufrimiento además del peligro en el que pondré a su modo de vida, creo que para mañana en la mañana ya no habrá más que cenizas de mí.
Seguramente Carlisle llegará a encontrar mis restos, rabiara un poco y no intentará nada, sabrá que lo que está hecho no puede remediarse y no se pondrá en peligro, eso espero….