Capítulo 29

538 45 6
                                    

Llegaron las doce semanas clavadas y eso solo significó algo, era el gran momento de la primera ecografía, estuve nerviosa todo el día, más que nada ansiosa, comí boludeces todo el tiempo, eso hizo que me sintiera mal y termine con nauseas, pero igualmente no cancelé el turno.
-Mariana Espósito de Lanzani-me llamaron así y me sorprendí-¿o solo Mariana Espósito?-dudo el médico- me parece que me confundí
-Está bien, ese es mi nombre completo-terminé asintiendo con la cabeza, cuando volteé a mirar a Peter también lo noté sorprendido.
-La Mariana feminista del principio estaría chocándose la cara contra una pared en este momento-se burló de mí y le di un golpecito en el brazo.
Entré al consultorio y me hicieron un par de preguntas de rutina, lo único raro en mi eran las malditas nauseas y mis ganas de comer mucho ciertos días.
Levanté mi remera dejando la panza al descubierto y me pusieron gel, me pasaron el aparatito, Peter me tomó de la mano.
Nos quedamos mirando la pantalla y no entendía nada de nada, ¿qué se supone que tenía que mirar?
-Acá están..-el médico señaló la pantalla.
¿Están?
Peter me miró, él tampoco entendía nada.
-¿Son dos?-me atreví a preguntar empezando a entrar en pánico.
El médico asintió con la cabeza, me sonrió y me señaló nuevamente la pantalla.
-Son mellizos.. No podemos saber que son obviamente, pero podes hacerte otros estudios para averiguarlo-el tipo hablaba tan tranquilo, mientras por mi cabeza se me pasaban miles de pensamientos.
Me puse a llorar entrando en pánico, Peter se dio cuenta de eso y besó reiteradas veces mis mejillas.
-Ey, no pasa nada La-me sonrió tratando de que yo vuelva a tener calma-¿te olvidas? Ahora somos un equipo...-asintió con la cabeza- vamos a poder..
Besó tiernamente mi frente y asentí con la cabeza.
Nos quedamos un rato más mirando la pantalla, era increíble que pudiéramos verlo tan claramente, por suerte todo estaba bien, eso me hizo que me sintiera algo más aliviada.
Cuando salimos de la clínica Peter me dio un abrazo, me sacó de la cara las lágrimas que nuevamente se me estaban cayendo.
-No me llores Lali-esbozó una pequeña sonrisa- no es una tragedia.. Están sanitos.. Vos estás bien, eso es lo que importa-asintió con la cabeza.
Me sentí una tonta por estar pensando esa clase de cosas, estaba preocupada.
-Sólo me tomó por sorpresa, no me hice la idea de uno y son dos..-me reí tratando de ponerle humor al asunto-¿tanto trabajamos en el temita?-elevé mis cejas y él me sonrió.
Agarró mi cara entre sus manos y nos besamos.
-Vamos a comer algo-me guiñó un ojo y caminamos hasta el auto.
Peter manejó hasta llevarme a una cafetería estilo americano, estaba todo ambientado, pedí pancakes.
-No sé si es una buena idea que comas esto-me llamó la atención- estuviste sintiéndote algo mal
-Como un poquito y vos el resto-lo convencí mirándolo a los ojos y besando su mejilla.
Últimamente estaba muy cargosa, muy mimosa.
Peter me abrió las puertas a su corazón, me dejó entrar a su vida, no quería decepcionarlo nunca más, él no lo merecía, había sufrido mucho.
Él después se tuvo que ir a trabajar, cada semana que pasaba Miguel Angel le hacía la vida más imposible, eso me calentaba, quería matarlo con mis propias manos.

Cité a mi prima Emilia, mis amigas María, Eugenia y Candela para hacer un nuevo comunicado.
-Voy a tener mellizos-solté sin anestesia.
-¡Que hija de puta! ¡Yo quería ser la primera en ser en madre, vos ni lo querías y vas a tener dos! Se ve que mal no lo pasas por casa..-Eugenia elevó sus cejas molestándome, todas se rieron.
Ellas se acercaron y me abrazaron cálidamente.
-¿Cómo pensas hacer? Dos es mucho trabajo..-Candela se quedó pensativa.
-¡No necesito que me asustes más boluda! ¡Ya estoy asustada!-solté un suspiro.
-Vas a poder Lali-Emilia me sonrió- siempre fuiste una superchica, pudiste con todo, y vas a poder enfrentarte a esta nueva etapa
-Es que es todo tan nuevo... ¡Todo es nuevo! El haber conocido más a fondo a Peter.. El haberme animado a estar con él a pesar de todo lo que pasó.. Haberle correspondido.. Eso también me sorprende hoy en día, en mi mundo jamás creí que iba a enamorarme, y justo de él-hice una pausa y después se me formó una sonrisa- fui cambiando varias ideas que tenía antes acerca de la vida.. Y cambiar ciertas cosas me está haciendo crecer
Asentí con la cabeza.
-Yo te noto distinta-María me sonrió- pero distinto no siempre es malo, en este caso es bueno
Mis amigas eran amigas de oro, de esas que siempre están para escucharte y apoyarte.
Tomamos mate y comimos facturas, hablando de distintas cosas, Candela nos contó que su novio Andres venía hablando de que quería hacer un viaje junto a ella, mi amiga sospechaba que su novio quería proponerle matrimonio y no sabía como hacerlo, ellos eran novios desde los once años, nunca vi un amor tan fuerte y consolidado.
Me quedé sola cuando se fueron, lo esperé a Peter y no volvía, tenía un mal presentimiento, es por eso que hice lo que nunca había hecho, lo visité a su trabajo, a las oficinas, lo escuché hablando con su primo, estaba enfrentándolo.
-¿Qué más queres? En el pasado me sacaste lo que más me importaba, ahora me corriste de mi puesto de trabajo, ¿que te pasa conmigo? Ya sé.. Siempre me tuviste envidia, tu papá siempre me quiso como a un hijo..-lo vi a Peter mirarlo a los ojos.
-¿Yo? ¡¿Envidiarte?! Si tengo todo lo que quiero-Miguel se rió- Delfi-la llamó y ella entró, Peter se sorprendió, se hizo un silencio- ella no me abandonó como creías, sigue enamorada de mi
-¿Y? Para mi ya es pasado-Peter suspiró- entonces, ¿porqué seguís jodiéndome tanto?
-No creo que no te haya pasado nada al verla.. ¿Te acordás? Imaginaban una vida juntos.. Amor de adolescentes-Miguel se rió- ella me eligió antes que a vos, no fuiste suficiente, nunca vas a ser suficiente para las mujeres Peter Lanzani
Esa fue la gota que rebalsó el vaso para que saltara y me metiera en la discusión.
-No te atrevas a hablarle así-señalé con el dedo a Miguel Angel sintiendo asco- él es una persona con un corazón hermoso, amoroso, dulce, bueno, inteligente y la historia no va a volver a repetirse-elevé mis cejas mirándolo- porque no lo pienso soltar... Él es mi otra mitad, mi compañero de vida.. Y estoy feliz de poder compartir todo con él-esbocé una pequeña sonrisa mirándolo ahora a Peter, sus ojos se llenaron de lágrimas de la emoción.
-Estas eligiendo muy mal...-Miguel soltó un suspiro.
-Ya tenes una novia, una que no mereces, sos un ser desagradable-le hablé mirándolo firmemente a los ojos- no me queres realmente a mi, me queres por orgullo, por ego, porque te rechacé y porque amas robarle las cosas importantes a Peter, sos codicioso, manipulador-no me guardé nada, llegué al límite de mi paciencia- y vamos a poder vivir sin estar en el negocio familiar
Peter asintió con la cabeza y me tomó de la mano.
-Así que vos no me despedís, yo renuncio-mi esposo se rió y me abrazó frente a la cara de su primo, quién estaba muda era su ex-no vale la pena que sigas con él... Sos una buena mujer, ya lo hablamos
-¿Realmente me perdonaste?-ella lo miró apenada.
Peter asintió con la cabeza.
-Muchas veces las cosas son por algo..-suspiró- ¡buena vida a los dos!
No nos soltamos, nos fuimos de la empresa y nos subimos al auto, Peter me sonrió y lo besé varias veces, nos reímos, habíamos mandado todo al diablo.
-Estuviste brillante-Peter me miró orgulloso- sí que sos salvaje eh
-Soy brava... Sobre todo cuando se meten con alguien que me importa..-elevé mis cejas sonriéndole y después escondí mi cara debajo de su cuello.
Peter manejó para volver a nuestra casa, me cumplió el antojo y me hizo pochoclos con caramelo, le sonreí haciéndole una caricia en la cara.
-¿Sos feliz conmigo?-otra vez dudó.
-Peter, lo que pasó en el pasado es pasado, yo no soy tu ex, yo no pienso separarme de vos.. Yo también pienso luchar para que nunca nada ni nadie nos separe-elevé mis cejas mirándolo firmemente a los ojos-yo... Estoy sintiendo muchas cosas al mismo tiempo, estoy descubriéndome nuevamente, me desconozco porque... Estoy muy enamorada de vos Pit-levanté su cara con mi mano- y estar con vos me da seguridad, me siento bien, me da igual que me llamen con tu apellido, me gusta escuchar que soy tu esposa.. Estoy orgullosa de vos, mi marido..-asentí con la cabeza y rocé mi nariz con la suya, no pude evitar emocionarme- mi compañero de aventuras nuevas
Peter me sonrió, me sonrió con una sonrisa hermosa, sincera, relajada y llena de amor.
-Te amo-me lo susurró sobre mi boca y me la besó, me acarició la cara.
-Yo a vos bobo-lo abracé fuertemente y me reí- estoy tragándome todas las palabras malas con las que te describía.. Todo lo malo que pensé que ibas a ser, tenía una idea muy mala de vos.. Perdón
Sus ojitos se achinaron al sonreírme.
-Estamos a mano eh-dejó un besito sobre mi frente y le acaricié el pelo.
Nos metimos en la cama para ver Friends, comiendo pochoclos y haciéndonos caricias, no necesitaba más que esto, nada más que estos momentos de paz y amor, porque sí, lo que siento por Peter es amor.
Sintiéndome a gusto fui cerrando mis ojos sin separarme de su cuerpo.

Indeseado despertarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora