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/Liz/

Mis dedos se enredan entre mi cabello mientras intento mantenerme despierta.

¿Cuánto ha pasado? ¿Por qué nadie viene a salvar a Kazki?

No puede seguir aquí, debe volver a su vida normal, debe ir a jugar a los héroes al parque e ir a la escuela, recién estaba comenzando a escribir y estaba feliz por eso, alguien debe venir para llevárselo y deben ponerlo a salvo. Él no está a salvo conmigo.

¿Cuánto falta?

Nunca creí que usaría tanto mi don con él, día tras día debo usarlo y ver como su mirada llena de enojo se pone sobre mi. Luego me ignora y no deja que me acerque.

Me odia.

No sólo porque asesiné a sus padres sino porque lo obligo a hacer cosas...pero es por su bien, debe seguir comiendo, incluso si no quiere mi parte debe comerla, debe beber agua y debe dormir también.

Todo fue mi culpa.

Merezco ser odiada, le quité a sus padres, le mentí y jugué con él y sus sentimientos, le di un lugar para vivir y luego hice que viera y escuchara morir a todos. No conforme con eso, lo arrastré a esta habitación y lo obligo a permanecer a mi lado contra su voluntad.

Todo fue mi culpa.

Por mi culpa ahora tiene un trauma.

Todo fue mi culpa.

Nunca volverá a ser el mismo.

Todo fue mi culpa.

Soy su peor pesadilla, su demonio propio, soy su infierno y el peor castigo por un pecado que no cometió. Soy su villana personal y no me canso de lastimarlo. Así que lo merezco, merezco su rechazo, su odio, merezco que no me hable y que sólo me desprecie.

Soy mala.

Siempre lo fui pero estuve jugando a ser la buena, estuve actuando un papel que no me quedaba, estuve fingiendo que dentro de mi puede haber algo bueno y olvidé lo que realmente soy, lo que siempre he sido...

La puerta se abre y no necesito levantar la vista, puedo ver que los zapatos rojos que se detienen en la puerta y apuntan a nuestra dirección.

*Vamos-dice Tomura.

Igual que las otras veces viene a sacarme de aquí para llevarme a hacer lo que me ordena, quiere verme lastimando a las personas, asustándolas, comportándome como lo que soy.

*Liz-dice dejando un leve tono de amenaza.

*No-susurro y levanto la vista. El simple movimiento de cabeza me marea y debo enterrar las uñas en mi palma abriendo la herida anterior para despertar.

No puedo dormir.

*Muévete o sabes lo que haré-apoyo mi cabeza en la muralla y de reojo veo al pequeño bulto bajo las mantas moverse despacio.

*No puedo irme-susurro como siempre-harás algo cuando no esté-suspira como cansado.

*No, iré contigo-aclara-aquí sólo quedarán dos personas y una de ellas es Kurogiri.

*Vas a lastimarlo si voy y si me quedo-aclaro.

*¿Cómo si se pudiera lastimarlo más?-suelta divertido y se pone frente a mi tomando mi mentón-descubrió que la persona que más fingía amarlo es en realidad una mentira y la asesina de sus padres-recalca-vamos o el daño será físico-tira de mi brazo para ponerme en pie.

Apenas puedo mantenerme de pie y caminar pero por suerte Tomura tira lo suficientemente fuerte de mi para guiarme por el lugar.

No sé cómo pero de pronto estamos sobre un enorme edificio, el frío de la noche me recibe helando mis huesos con violencia. Tomura pasa el cinturón por la cadera y cuelga la katana sobre mi.

Almas (Shota Aizawa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora