𝗥𝗔𝗠𝗘 | 𝗣.𝗝 𝗠𝗢𝗩𝗜𝗘𝗦

𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 16

Dánae soltó un quejido cuando vio todos los esqueletos de Sátiro. 

—Grover tenía razón al no querer venir—opino pateando un cráneo.

—Bueno, al menos sabemos que ninguno de los esqueletos es suyo—dijo Nate. 

Todos vieron una gran piedra. 

—Debe ser la que uso Polifemo para atrapar a Odiseo cuando regreso de la guerra de Troya.

La información que Clarisse brindo se ganó una mirada sorprendida por parte de todos.

—Si sé cosas y la sorpresa me ofende 

Uno por uno empezaron a entrar a la cueva, Danae paso a lado de Annabeth y frunció el ceño.

—Hules eso—le dijo a Nate —huele a colonia barata y desesperación. Oh, solo es el perfume de Annabeth. 

—Púdrete Lefay—gruño la rubia. 

Danae y Nate rieron. Sus risas pararon cuando una caja de madera salió volando y se estrelló en una roca. 

—¡Ya pasaron dos días!—grito una voz gruesa y horrible. 

—¡Por favor calma!—dijo una mala imitación de voz de mujer, seguro era Grover.

—No he tenido una comida decente desde esos semidioses que trajiste, se supone que este vellocino atrae sátiros, ¿Vez algún sátiro por aquí? 

Danae se tapó la boca con la mano para no reír cuando vio a Grover vestido de mujer. 

—El hambre me está empeorando la vista — dijo Polifemo — te devoraría, si no fueras un cíclope.

Grover tenía de cíclope, lo que Danae de mal gusto.  Todos vieron al enorme cíclope dar la vuelta. 

—¡Hey, señorita! — exclamó en voz baja Danae, Grover volteo a verlos con sorpresa y se encaminó a ellos. 

—Danae, Percy — dijo él con alegría — ¿Nate? 

—Lindo vestido Grover —dijo con burla 

—He tenido un muy mal día — dijo Grover 

—El blanco es tu color — dijo Danae mientras Clarisse sacaba una foto.

—¡Oye! ¡Oye!— dijo señalándola — ¡No quiero ver eso en Internet!

—Lo siento, es que los demás no me creerán sin una foto — dijo Clarisse 

—Esto es un disfraz —dijo él — es supervivencia. 

—Sí, el de la película de damas de honor al ataque — dijo Nate. 

—Amo esa película — dijo Danae 

—El tipo esta medio ciego cree que soy una sirvienta cíclope. 

—No con esas piernas tan velludas —comentó Clarisse y Danae río