America is here

I X

Una agradable risa se escuchó en los pasillos de aquella gran casa, Risa que por alguna razón Incomodaba a los otros pequeños infantes que vivían en esa casa.

— Ya pare señor gato ! — Dijo entre risas el pequeño albino que tenía a su lado a un sonriente Acadia.

— Jsjsjs es suficiente señor gato — Dijo para alzar al gato y alejarlo de su amigo.

— Fue su castigo por tramposo — Rechinto en gato que se soltó de los brazos del niño para volver a su lugar.

— Frezaquie no es un tramposo! — Defendió mientras se acomodaba en su lugar.

— Si claro — Dijo con un tono arrogante mientras empezaba a lamerse la pata.

Acadia le saco la lengua al gato mientras que sintió un como su amigo posaba una mano en su hombro.

— No importa, solo eran arañazos — Dijo con una sonrisa mientras pasaba su otra mano por las heridas que sangraban un poco.

Un pequeño y débil golpe a la puerta llamo la atención de los presentes.

— Adelante — Dijo para ver cómo alguien abría la puerta con delicadeza, su padre se asomo.

— Acadia puedes cambiarte por favor?— dijo con una débil voz y una cara demacrada.

— ¿Puedo no ir? Quiero quedarme a jugar con mis amigos — Señaló a los seres a su lado.

Uk entro a la habitación del niño para jalarlo de la muñeca y llevarlo a lado de su cama donde estaba un traje elegante negro.

— Acadia no éstoy para soportar ahora tus tonterías, ¡cámbiate ahora! — Solto al niño para salir de la habitación — ¡Bajas en 10 minutos! — Grito mientras bajaba para ver a sus otros hijos.

Acadia trago en seco, sus pequeños ojos se cristalizaron, no le gustaba que su papá le levanté la voz, bueno ¿A qué niño le gusta?, Tomo la ropa que posaba en la cama y empezó a cambiarse mientras pequeñas gotas cristalinas bajaban por sus ojos.

Mientras abotonada su camisa sintió un pequeño pesó en su hombro, por instinto giró su cabeza para ver lo causante, soltó una pequeña risa al verla.

— 19 — Dijo mientras le regaló una sonrisa.

El ave le miro con tristeza, levanto una de sus alas la cual acero al rostro del niño para secar sus lágrimas, el menor solo bajó la mirada mientras agarraba el saco para ponérselo.

— Oye. . . —

— ¡Acadia! —

Se escuchó un fuerte grito que asustó tanto al niño como a la ave.

— !Si papá ahora bajo! — Grito con la voz más fuerte que podía hacer miestras hacía lo posible para ponerse rápido los zapatos.

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Silencio. . . Esto es muy incómodo, quiero irme a casa. . .

Pensó un pequeño Inglés que jugueteaba con sus manitas, todo a su alrededor era muy callado, le incómodo mucho el echo de que haya muchas personas y todas esten calladas, bueno no todas.

¿Por qué sólo el puede hablar? ¿Por qué todos están tan callados? Con Trece no sería así de incómodo.

Hizo un pequeño puchero para luego levantar la mirada, se encontraba en un "jardín" sin flores solo pasto, era un día un tanto nublado.

¿Por qué todos parecen tristes? ¿Y por qué el tío españa está llorando?

Miraba a todos lados, sus conocidos estaban allí y algunas personas que no conocía.

Giró levemente la cabeza para ver a la persona detrás de el.

¿ Por qué papá está llorando ?