Capítulo 5

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Capítulo 5: Un día lleno de sorpresas.

Al caminar con Senju a casa sentía un ambiente pesado de nuevo, como si esperará que yo le soltara unas cuantas palabras en el camino para hacerlo entretenido, la verdad es que no quería, pero, hoy mis ganas de no ser yo son muchas. (Porque yo soy demasiado tímida y, sin embargo, algo en mi interior quiere botar esa fachada a la basura, solo por ella y para ver sus ojos azules etéreos clavados en mi mirada).

- Sabes, yo suelo recorrer estas mismas calles todos los días, es agradable ir con alguien a casa - Dije, con un tono suave y despacioso.

- Lo sé, no pareces alguien que se escabulle después de sus clases a otros lados señorita seria, aunque estas calles son realmente iluminadas me parece que se vería solitario ver caminar a una jovencita por estas calles ella sola, hablando de caminar sola... tienes amigas, ¿no?, ¿Por qué no vuelves con ellas a casa? - Dijo Senju mientras seguía observando los alrededores y el como las calles que caminábamos parecían de festivales con sus puestos de comida en cada esquina y bien iluminados con letreros llamativos e incluso lo seguro que se veía caminar por aquí.

- Solo tengo una amiga y pues, su recorrido a casa queda opuesto del mío, así que no podemos volver juntas a casa por eso suelo volver sola todos los días. - Aunque antes solía volver con alguien a casa, ¿debería de contarle a Senju? Es algo muy personal, tal vez no le importe en lo absoluto.

- Yo, no suelo volver sola a casa. Tengo un hermano mayor que siempre quiere estarme cuidando y eso es un poco molesto, ya estoy bastante grandecita y además se cuidarme sola y de paso sé pelear muy bien, es un tanto incómodo, pero, contigo es diferente, volver contigo a casa se siente bien... Quiero decir, es reconfortante. No sé cómo explicarlo, disculpa. - Terminaba de decir sus últimas frases una apenada Senju, vaya que puede tener facetas tiernas. Verla desviar la vista para colocar un brazo sobre su cabeza y desordenar su pelo mientras sacude su cara en un intento de ocultar si sonrojo solo lo hace más notorio, esta imagen mental que guardaré de ella cuando está apenada es sin duda una de las mejores facetas de Senju que he visto hasta ahora. (Pero, que digo si todas sus facetas me dejan boba cuando la miro fijamente).

- En mi caso solía volver a casa con mi hermana mayor, su nombre era Darya, ella era una chica gentil y su presencia y cuidados eran de los más lindos, era mimosa y muy platicadora además era bonita por donde la viera y aunque a veces querían acosarla ella siempre se defendía ferozmente, también era buena peleando y le gustaba llevar una vida alocada sin darse cuenta ella hacía todo a su modo y las cosas casi siempre salían como ella quería, para mi era una persona alucinante y seguramente lo sigue siendo, solo que ahora ya no puedo volver a casa con ella... - Siento como si hubiera hablado demasiado, seguro lo hice, pero, lo que me llamó la atención fue ver que Senju desaceleró el paso que llevábamos y justo antes de cruzar la parada de autobuses por la que nos conocimos ayer se detuvo en seco para clavar su mirada en mí fijamente con un pestañeo recurrente como si estuviera nerviosa nuevamente, no entiendo porque la seriedad de su mirada y la busca de respuesta en sus ojos, sin necesidad de que me diga algo puedo notar que algo le inquieta.

- Darya, hace años no escuchaba ese nombre, dime gatita, ¿cómo se encuentra ella? - me quedé helada, Senju conoce a mi hermana o puede ser una equivocación, así que antes decidí plantearle una pregunta.

- ¿Cómo estás tan segura que conoces a mi hermana? ¿No te habrás confundido? -
Espera, ¡Que tonta soy! Senju no preguntaría algo sin sentido con esa mirada tan seria además es obvio que ya dedujo que la conoce tras analizar mi apellido y el nombre de mi hermana también de que mi hermana se parece un poco a mí (solo un poco, mi hermana es más bonita), si la conoce definitivamente no le quedan dudas de que hablamos de una misma Darya.

- Te pareces un poco a Darya incluso... - Dijo Senju mirándome tiernamente analizándome de pies a cabeza con tanta ternura que empecé a tener miedo de la situación, ya he vivido demasiadas coincidencias con la señorita Akashi en tan solo dos días de conocerla.

-Que va, Darya es mucho más bonita y somos totalmente contrarias en personalidad. Y respondiendo a tu pregunta de hace ratos, ella se encuentra bien solo que ya no vive conmigo desgraciadamente, aún así, quiero decir que ella está bien aunque han transcurrido años y no la haya vuelto a ver... - Esta vez fui yo la que apartó la mirada tras responderle, estamos entrando mucho en detalles, demasiado, no debería de ser así, si vamos a conocernos que sea un poco más despacio, por favor, me encanta que todo vaya despacio, a mi propio ritmo. No me gusta la velocidad que llevamos con los asuntos íntimos más cuando son cosas que aún me lastiman.

- Tienes razón, ella y tú son totalmente distintas, pero, por una extraña razón te miro y la veo reflejada a ella en tus ojos y en realidad se parecen mucho, lo único distinto que tienen es que Darya era mucho más alocada y feroz, siempre se hacía notar a donde fuera... No sé si deba seguir preguntando más de Darya, ¿sabes? Voy a contarte un secreto, no se lo digas a nadie por favor aún me da mucha pena y nostalgia, pero, Darya fue mi primer amor cuando la conocí, aunque por supuesto debió ser cosa de niños ella es 4 años mayor que yo y justo ahora debe de tener 20 años... Y aún así, yo la quería muchísimo, así que me alegro de que se encuentre bien, mi querida Darya. -

Después de Senju terminó sentí como mi corazón se estrujaba y se hacía pequeñito, que lo habían arrugado y luego solo lo habían recogido en un puño, ya no quería escuchar más. A pesar de que acabo de conocer a Senju y de que no somos amigas ni nada esto me dolió como cuando se mete una astilla pequeñita en tu uña del dedo meñique, es como si algo chiquito estuviera molestándome y sé lo que es, pensar que alguien como yo pueda creer en el amor a primera vista es una tontería y no quise pero, su último comentario sobre "su primer amor" me puso tan seria que ya no quise seguir hablando más porque en el fondo no quiero admitir lo que mi corazón siente por una desconocida preciosa mujer que ha cautivado mi corazón sin antes conocerla.

Continuamos el camino después de haber estado paradas en seco por un largo rato antes de cruzar la calle que nos llevaría a la parada de autobuses, una vez ahí yo seguí mi camino sola a casa ya que Senju esperaría el autobús justo en esa parada, a decir verdad quería que llegáramos hasta mi casa pero, ese solo era un deseo egoísta pues ella tenía que volver a casa por el camino que ella tenía que recorrer, la verdad es que estoy bastante sorprendida pero, al fin y al cabo Senju solo es una apenas conocida para mí que más da lo que sienta o lo que haya pensado.

Al llegar a casa vi a papá con su novia en el sofá de la sala, fue bastante molesto verlos haciendo cosas que podrían hacer fácilmente en un motel o ya de pérdida en el cuarto de papá. Me fui directo a mi cuarto, dejé mis cosas cuidadosamente en mi escritorio, me cambié el uniforme y enseguida me puse ropa cómoda para ir a cocinar porque no estaba ni mamá ni mi hermana mayor, me siento un poco sola aquí, ojalá la caminata con Senju se repita mañana, aunque tengamos que hablar de mi hermana, ya eso no me debe de importar porque me acabo de dar cuenta que lo que me importa por ahora es conocerla mejor y que la lluvia en mi interior pueda cesar.

La damisela de los paraguas-Senju Kawaragi x TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora