Revelación

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Jungkook sentía sus piernas arder de tanto que corría.

Aunque el dolor fuera demasiado sabía que no debía detenerse.

Corría con todas sus fuerzas, como jamás había corrido en su vida, como jamás pensó que llegaría a hacerlo.

Y por más que Jungkook corría...

La obscuridad estaba cada vez más cerca...

🥀

Jungkook despertó sobresaltado, su respiración estaba agitada, estaba sudando demasiado y sentía su cuerpo tenso.

Había tenido una pesadilla nuevamente, y ahora que lo pensaba mejor, luego de estar casi dos meses en esa casa, sentía que sus sueños eran alguna especie de mensajes.

Su estómago ardió y gruñó de repente, se quejó por el terrible dolor que había sentido.
Llevaba demasiado tiempo sin comer bien, había perdido la cuenta de cuantos días incluso, ¿1 mes?.

Se sentía muy triste y decaído, no tenía ánimos para siquiera levantarse de aquella cama, aunque se moría de hambre y sed no quería salir, no quería verlos, a ninguno de ellos.

Se levantó de su cama a duras penas, sus piernas ya casi no podían sostenerlo de pie, había perdido mucho peso, estaba muy delgado, ojeroso y demacrado.
Las primeras dos semanas había sobrevivido gracias a las galletas que Yoongi le había dado, comía una cada día, sin embargo, las últimas dos semanas se quedó sin galletas y se resignó a aguantar el hambre.

No había podido dejar de pensar en todo lo que Hoseok le había dicho, lo que vio en sus recuerdos, todo lo que vivía día a día.

Su vida no era más que una vil mentira.

Su madre biológica lo abandonó.

Su padre lo dejó con otra persona.

Su padre adoptivo lo abandonó.

Su iglesia lo ofreció como carnada.

Estaba solo...

Se sentía solo...

Emitió un gran suspiro de cansancio, estaba por entrar al baño para al menos tomarse una corta ducha cuando entonces algo interrumpió aquella acción.

–¡Oye conejo!...– Escuchó fuera de su habitación acompañado de unos golpes en su puerta.

Era Seokjin, desde que Jungkook se encerró en su habitación aquel chico iba por lo menos cinco veces al día a tocarle la puerta y pedirle que saliera, lo amenazaba, trataba de negociar, le insultaba, como solo Seokjin sabía.

Realmente no entendía por qué tanta preocupación, lo único que se respondía era porque quizá tenía hambre.

Sin embargo, Jungkook nunca respondía, solamente ignoraba, justo como en ese momento que lo ignoró y entró al baño a tomarse una ducha.

Mr. Sadistic -민에 (BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora