Mr. Sadistic -민에 (BTS)

Primeras gotas

Jungkook corría y corría y corría.

Corría con todas sus fuerzas, y por más que lo hacía, no avanzaba ni un centímetro.

Su respiración estaba demasiado agitada , sus pulmones estaban a punto de colapsar.

Sin embargo, no fue lo suficientemente veloz...

Un mar de sangre lo alcanzó, por más que quiso seguir luchando para salvarse, no podía.

El mar rojo lo iba devorando cada vez más, sus pataletas eran inútiles, su intento por respirar era inútil también.

Se hundía lentamente...

Hasta que de pronto todo se volvió oscuridad.

🥀

Jungkook despertó bastante alterado, su respiración estaba agitada, tocó su pecho y pudo sentir a su corazón latiendo como loco.

Tomó asiento en su cama, sintió un terrible dolor de cabeza que lo hizo quejarse, se sentía mareado y desorientado.

No supo en qué momento había perdido la consciencia, le dolía la cabeza, se sentía desorientado, como si hubiese bebido demasiado alcohol la noche anterior.

Lo gracioso era que Jungkook jamás había bebido en su vida.

Pero sabía que se sentía de la mierda...

–Solo fue una pesadilla...– Se dijo frotando su rostro con sus manos para apartar su larga cabellera de él.

Volvió a emitir un gran suspiro mientras tallaba sus ojos.

Se acomodó mejor en la cama, y frunció el ceño en confusión cuando sus ojos comenzaron a analizar dónde estaba.

Estaba en una habitación la cuál no conocía, era muy grande, mucho más grande de la que tenía en Busan cuando vivía con su padre.

Ah... Su padre...

–Adoptado...– Dijo suspirando.

Aún no se lo podía creer.

Vaya manera de enterarse además, se sentía devastado, su padre le había mentido toda su vida, eso explicaba por qué siempre desviaba el tema cuando se mencionaba a su madre.

Dios, Jungkook quería llorar, estaba triste, jamás se imaginó que algo así podría suceder, y menos de la persona que más amaba en el mundo.

Sintió sus lágrimas llegar a sus ojos, y prefirió limpiarlas, antes de que salieran, con la manga de su pijama.

Esperen...

¿Su pijama?.

Sus ojos se abrieron de par en par cuando notó que tenía puesta una pijama, su rostro comenzó a sonrojarse de tan solo pensar que alguno de los 6, si no es que los 6, lo habían desnudado y vestido ellos mismos.

De verdad deseaba que no hubiese sido el caso.

Y es que no recordaba nada de lo que sucedió después de que Seokjin lo tomó del cuello, rápidamente llevó sus manos a su cuello, suspiró de alivio al no sentir ninguna marca de mordida.