FIVE | +21 | En Proceso.

Capitulo 7: Que comience el juego.

Lo último que veo es el rostro desencajado de Preston cuando me cubren los ojos con una venda de color negro. No había visto a quien fuese el encargado de esto, pero por lo menos sus manos son increíblemente suaves a la hora de atar un nudo detrás de mi cabeza.

Intento percibir otro sonido, pero solo se escuchan las voces mezcladas de borrachos, gritos de chicas demasiado emocionadas por el juego y los parloteos del DJ con la gente de la fiesta.

–¡Bueno, bueno, parece que esta noche alguien tendrá mucha suerte! ¡Harley, haz girar la botella por favor! —nerviosa me mantengo en la espera. Luego escucho las fuertes pisadas de quien se conoce como Harley y el pequeño roce de la botella de algún licor caro ser dejada en la cerámica. Un profundo silencio se instala antes de que hagan girar la botella y esta gire con un sonido agudo hasta ir deteniéndose frente a la persona que se ha ganado el primer turno —Bien, señorita. Al parecer tienes tanta suerte hoy como para ser la primera en ir a la habitación que cambiará el curso de tu noche. Espero te sea de provecho.

Me remuevo un poco cuando el calor de la chica de mi lado izquierdo desaparece. Eso quiere decir que estuve a punto de ser elegida, un poco mas y sería yo la que estuviese en camino hacia esa habitación

–No me dejes caer.

–¡Si, Harley, cuida a la chica!

–Escalones —dijo alguien, suponiendo que no era nadie mas que Harley avisándole a la chica de su posición.

Con esa simple palabra ya yo estaría subiendo escalones como loca sin necesidad de esto, tenía tantas intenciones de disfrutar de esta actividad que haría lo imposible por adelantar el tiempo a la diversión. Necesitaba que esa maldita botella se detuviera en mi lugar o enloquecería.

En este tipo de juegos necesitas una enorme barra de paciencia, el hecho de tener que esperar mientras vives en la intriga de si serás la próxima afortunada, o si ser la última pieza del ajedrez te garantizará más privilegios que las primeras en moverse.

–No estés tan insegura, en el trayecto a esa habitación te darás cuenta de que no hay nada más seguro que la casa de nuestro anfitrión quién siempre velará por las comodidades de sus amigos —aflojé mi pesada respiración, eso eliminó un poco de la tensión que sentía en mi espalda baja, incluso la persona a mi lado liberó una pequeña risa y así entonces descubrí que era un chico.

Eso quiere decir que…

¿También había chicas arriba esperando por cualquiera de nosotros aquí o es gay?

No era imposible. Si tal vez me hubiese concentrado en algo mas que no fuera romper las alucinaciones de Preston había notado el chico en el grupo.

Probablemente, había chicas allí arriba o no.

Podría ser lo mas probable, o simplemente todo estaba demasiado bien planeado como para que hubiera otras novedades.

–¡Oh, mira eso!

–No puede estar pasando —murmuró alguien del público y dirigí mi cabeza al lugar de donde provenía la voz. Sentía la misma curiosidad por saber lo que era en realidad.

Me recordé a mi misma que no podía ver.

Tonta.

–¡Esto acaba de tomar un nivel de competencia invencible! —volvió a gritar el DJ y me sentía más abrumada que de costumbre —Habrá muchas mas personas interesadas en hacer trampa.

¿Y ahora de que se trataba el tanto alardear?

La espera se hizo aún peor, quería que se acabara aquella intriga solo con el chasquido de mis dedos.