Jin, conduce por las calles con dificultad, sus ojos yacen inundados por las lágrimas constantes que recorren su rostro, con dificultad limpia sus mejillas borrando todo rastro de llanto, hipa al recordar la manera en la que su padre lo ha echado de la casa, la forma en la que su madre reunió sus cosas e insistió que se marchara, y lo que más recorre su mente es la manera en la que su hermano lo miraba.
Detiene el auto de forma abrupta, tanto, que las llantas rechinan debido a la fricción que realizan contra el asfalto, baja del vehículo, toma su maleta y entra al edificio.
Camina hacia el elevador mientras arrastra la maleta con su mano derecha y con la izquierda limpia su rostro.
Las puertas del elevador se abren, espera unos segundos a que las personas salgan y luego entra junto a una pareja de ancianos, presiona el tercer nivel, la puerta se cierra y la máquina se pone en movimiento.
Baja del elevador y arrastra su maleta, empieza una caminata hasta los apartamentos de en medio.
Cuando está frente al número indicado de la puerta saca su celular y se da cuenta que no han correspondido sus mensajes, suspira, guarda el aparato electrónico nuevamente en uno de los bolsillos de su pantalón y se acerca un poco más a la puerta.
Alza un poco su brazo derecho, empuña su mano y da unos cuantos golpes sobre la madera, espera unos segundos y nadie atiende, golpea una vez más y espera una vez más.
- Jungkook, abre soy Jin - alza un poco su voz, mientras golpea la puerta ahora un poco más fuerte. - Jungkook - insiste.
El sonido de los botones al introducir el código se escuchan tras la madera, la puerta se abre dejando ver a Jeon, con cabello húmedo, su dorso desnudo y con un pantalón de pijama.
- Es noche, Jin - verbaliza Jungkook. - ¿Qué haces aquí? - inquiere.
Los ojos del hijo mayor de los Park, se cristalizan de inmediato, arrastra su maleta hacia el frente provocando que la mirada de Jeon se fije en el objeto color gris.
- Mis padres me echaron de casa - habla con dificultad, Jin.
- ¿Por? -
- Por ti, por nosotros - dice con voz quebrada el hermano de Jimin, causando que una mirada desconcertada y confundida lo vea.
- Jin, espera - le pide Jeon, al ver al rubio entrar a su apartamento sin que él se lo pida.
- Jimin, descubrió lo nuestro, no sé cómo, pero lo descubrió - habla de manera rápida Jin. - Lo acepte frente a mis padres y me echaron de la casa - culmina, mientras sorbe su nariz y limpia sus lágrimas.
- Lo descubrió por una estúpida hipnosis - suelta Jungkook, ganándose la completa atención de su amante.
- ¿Dijiste hipnosis? - fórmula incrédulo el rubio.
- Sí, y ya se que es algo difícil de creer, pero te juro que es cierto - le explica el pelinegro. - Jimin, ni siquiera me recuerda - agrega en tono de voz bajo, pero audible.
- ¿Y si no te recuerda como sabe de lo nuestro? - indaga alterado, Jin.
- Porque fui yo quien se lo confirmó - musita Jungkook.
- Jung... -
- Él insistia en que no me recordaba, creí que era una broma y fue ahí donde decidí confesarle todo, me dijo de nuevo que no sabía quién era yo, y que no tendría algo con una persona que lo ha engañado con su propio hermano - le comenta Jeon, luego de haber interrumpido al rubio.
- ¿Entonces él...? - pronuncia Jin.
- No me recuerda, esas fueron las indicaciones que el maldito le dijo - espeta molesto, Jeon.
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°𓂀°«[¿ʜɪᴘɴᴏꜱɪꜱ?]»°𓂀°
Fanfiction»Donde Jimin es hipnotizado y Jungkook, su pareja, paga para que Park no recuerde su infidelidad. Todos tenemos diversas maneras de afrontar la realidad, y Jimin, tenía muy en claro cómo afrontaría la suya.« 🥀Historia en colaboración con @Rivas9596...