Katsuki Bakugo era reconocido como uno de los magnates mas poderosos e importantes de Japón, un alfa que junto a su poder e inteligencia logro que muchas empresas salieran de la bancarrota, y de esta forma consiguió una gran cantidad de acciones.
Además era conocido por no perdonar a aquel que llegara a traicionarlo, se sabia que varias personas que quisieron jugar o hasta verle la cara, terminaron hospitalizados o en los peores de los casos desaparecidos. Nadie respiraba cuando el gran y musculoso rubio cenizo entro a la sala de juntas. Se lo notaba furioso,aquellos ojos rojos brillaban como nunca. El hombre era un dios griego para cualquier persona y eso no podía negarse, era alto y debajo de aquel traje azul oscuro se marcaban unos músculos muy bien trabajados.
Todos sus socios tanto hombres y mujeres, algunos alfas y la mayoría betas se preguntaban si alguien alguna vez iba a poder dominar a semejante bestia.-¡¡No puedo creer que nadie me aviso sobre esto!! -El sonido de su puño chocando con la gran mesa de madera se escucho en toda la sala,dejando como piedra a todos los presentes.
-lo-lo sentimos señor... lo supimos tarde... ya los periodistas lo averiguaron antes de nosotros...-un alfa valiente se animo a hablar,pero casi su presión se va a los suelos cuando recibió la mirada amenazante del alfa.
Al parecer alguien dentro de la empresa realizaba movimientos fraudulentos,y aquello se había filtrado, dando mala reputación a la empresa de Bakugo.
-Sin duda tenemos topos dentro bro...-el que hablaba era la mano derecha del Alfa, otro alfa de cabellos rojos llamado Kirishima Eijiro, ambos habían sido amigos desde que tenían memoria,una persona de verdadera confianza para Bakugo.
-Esa mierda va a ser encontrada! Y a todos lo que los ayudaron... no van a volver a ver la luz del día, rogaran ser llevados presos antes de verse conmigo...-el alfa soltaba bastantes feromonas amenazantes en el ambiente,todos trataban de respirar en aquel lugar y se preguntaban que milagro podía ocurrir para que puedan salir de esa sala con vida.
Pero en eso momento entro a la sala la secretaria del alfa rubio, una beta llamada Mina, también otra persona de confianza para el, con esa típica sonrisa que empeoraba el enojo del rubio.
-Señor tiene una visita muy importante esperándolo...- La beta de cabellos rosas se acerco aun sonriendo,sin intimidarse por el enojado alfa.
-¿Quien mierda es? ¡estoy con un asunto importante! -El alfa miraba con seriedad varios papeles sobre la mesa.
-Ya veo~ entonces le dire a su bonito esposo que vuelva mas tarde...-Aquello dejo al rubio de piedra,al igual que todos en la sala.
-¡¿Esposo?! -gritaron todos con tal revelación, pero al ver al rubio levantarse con una mirada seria todos quedaron en silencio nuevamente.
-¿Do-donde esta? -era la primera vez que podían escuchar al alfa titubear ,se lo notaba nervioso pero también ansioso.
-Esta detrás de la puerta... sabes que es igual de terco que tu...-Mina se acerco a la puerta y la abrió,dejando ver a un hermoso muchacho,
(seguramente omega) de cabellos verdes como los campos en primavera,unos ojos como dos grandes esmeraldas y una piel de porcelana cubierta de una constelación de pecas,no era para nada la clase de persona que esperaban ver, y para empeorar todo,el muchacho vestía un jardinero color azul dejando a la vista una abultada pancita.-oh dios... el jefe tiene un esposo!. Y esta embarazado! -hablaban algunos con bastante asombro.- ¿Como esa dulzura puede aguantar al jefe?.
-¡¡Silencio extras!! -grito Bakugo antes de caminar directo a su pecoso, lo siguiente que sucedió fue mas shockeante para todos,menos para Mina y Kirishima que veían la situación a diario.
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Bakugo y su Dulce Esposo
Fiksi PenggemarBakugo es un fuerte y poderoso alfa,que puede doblegar a cualquiera con solo una mirada. Pero por otro lado el alfa se vuelve un cachorro mimado cuando se trata de su esposo Izuku quien lleva a su hijo en su vientre. El hará de todo para proteger a...