CAPITULO 23 (CORREGIDO)

39 8 0
                                    

Mirra Hills:

-Se enteraron Thomas se fue del país. – Gian llego hacia nosotros en la mesa de la cafetería donde estábamos.

- Pues bien por el, así deja de molestar a Mirra. – Aria tomo un poco del jugo de piña que pidió.

- Pues si, el intento de ken por fin la dejara en paz a nuestra querida mimi– asentimos en su dirección.

La verdad me ponía más tranquila no tenerlo cerca en especial por todo lo que me había contado Bleck.

Y por lo que habia dicho en el estacionamiento aquel dia.

Dejamos la cafetería para ir a nuestras respectivas casas, en cuanto entre en el departamento vi que Bleck hacia malabares en la cocina tratando de preparar algo.

- Te ayudo gatito. – pregunte poniendo mis manos en su cintura, la comisura de sus labios se curveó en una pequeña sonrisa. Sabía que trataba de no sonreír siempre lo hacía cuando quería ser serio, pero no podía.

- No, no está bien ya casi termino siéntate ya va estar listo. – me senté como pidió y lo vi terminar de hacer la comida.

Me la puso en frente cuando termino, había cocinado pasta con una crema media rara, al principio dudaba si comerla ya que la crema no me convencía para nada, en cuanto la probe no pude dejar de comerla estaba deliciosa, le pedí otro plato en cuanto termino lo cual hizo muy sonriente.

- Sabía que te gustaría Mimi.

- Esta muy bueno donde lo aprendiste. – pregunte curiosa.

- Mi madre me lo enseño. – y se encogió de hombros restándole importancia.

- Pues esta exquisito.

Después de la comida lave los trastes, Bleck estaba un poco ocupado con la universidad así que se fue hacer sus deberes.

Me encontraba ordenando cuando llamaron a la puerta fui a abrir encontrándome con Amelia.

- Esta Bleck. –

- Si está en la habitación haciendo unos trabajos, esta todo bien Amelia -pregunte preocupada.

- No pasa nada, no te preocupes cariño, iré a hablar con él. – asentí como respuesta, viéndola dirigirse hacia la habitación que compartíamos.

Supuse que era mejor dejarlos solos, fui a comprar cosas que faltaban en casa el super estaba cerca así que solo demoraría unos minutos.

Regresé a casa después de comprar todo lo que nos faltaba, estaba en la puerta cuando esta se abrió y vi a una Amelia con los ojos llorosos. Se despidió rápidamente marchándose.

Entre, deje las cosas en la encimera de la cocina y me dirigi a la habitacion. Bleck se encontraba sentado en la cama con sus manos en la cabeza y su respiración acelerada tratando de calmarse.

- Que paso. 

- Ella quiere que hable con él. – sabia a que se refería.

- Tú quieres hacerlo.

- No lo sé Mirra.

- Bleck creo que deberías hacerlo solo escúchalo es tu familia.

- Tu eres mi familia el no.

- Bleck solo escúchalo, no puedes guardarle rencor toda la vida, solo escúchalo y después toma tu decisión. Sabes que yo siempre te apoyare y estaré contigo.

- Lo se Mimi, pero no se si pueda.

- Si quieres puedo acompañarte.

- No hace falta.

- Solo escuchalo bleck, nada pierdes con jacerlo.

- Por eso y más te amo. – dejo un beso en mi nariz.

- Yo también lo hago gatito. – deje un beso en sus labios.

...

Me encontraba con Eva que me había pedido que le ayude a elegir un vestido para una cena con Travis, me alegraba tanto que ella fuera feliz con la persona que amaba.

Aunque me hubiera gustado acompañar a Bleck a hablar con su padre, parecía un poco incomodo de ir, aunque también nervioso, dijo que después de hablar con su padre tenía algo importante que decirme cosa que me moría por saber.

Estaba ansiosa.

Al terminar la ayude a Eva maquillarse se veía realmente hermosa.

- Como me veo. – dijo viéndose en el espejo.

- Te ves estupendamente bella Eva.

- Enserio crees que le guste a Travis, vaya esto es vergonzoso parezco una adolescente hormonal.

- A Travis le gustara. – hable riendo. – sabes me alegra mucho que lo tengas, él te hace ser más feliz.

- Si lo se. Igual que tu Mirra

- Pase lo que pase quiero que seas feliz con el sí, te mereces lo mejor Eva y sé que él te ama demasiado, tú también lo haces lo sé, eres la mejor hermana que pude haber pedido, si cometes errores y eres una cabexa dura, pero quien no, me alegra mucho que seas mi hermana. – la abrase muy fuerte.

- Te pasa algo Mirra. – pregunto preocupada cuando deje de abrazarla.

- Si, solo estoy un poco emotiva nada mas no me hagas caso. – y era verdad estaba emotiva y por alguna razon queria que ella supiera eso.

- Ven aquí Mirra que también me entro el sentimentalismo.

Nos abrazamos hasta que oímos que llamaban a la puerta, sabíamos quién era, Evan salió de su departamento junto a Travis, se veían muy bien juntos.

Sali del edificio no sin antes pasar a ver a mi amigo un momento, no estaba en su departamento y decidí irme hacia casa.

Se se tia bien llamarlo asi, casa.

Llegue hacia el estacionamiento dirigiéndome a la salida, sentí a alguien detrás mío y voltee para ver quien era, pero no había nadie me gire nuevamente para seguir mi camino y lo vi un tipo vestido totalmente de negro con algo en su mano.

No tuve tiempo para esquivarlo.

Llevo su mano a mi nariz, traté de zafarme de él, pero era muy fuerte, segundos después ya no sentía mi cuerpo quedándome y mi vista cada vez pesaba más hasta que no pude más, cayendo en la oscuridad.        

EN MI OTRA VIDA |  ( Nacieron Destinados )✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora