Error en la Matrix (Keanu Reeves/Neo y Tú)

Capítulo 4.

Tn.

8 horas antes del ataque.

Era aún muy tarde, pero yo seguía terminado de ordenar todas las cosas que habíamos estado haciendo y limpiando también las herramientas, desengrasándola. A pesar de que, hacia un poco de frío, yo estaba sudando y tenía calor, así que con el dorso de mi mano limpie el sudor de mi frente. Necesitaba una ducha con urgencia ya que estaba llena de grasa de motor. Caminaba hacia las duchas, pero entonces vi, que en el monitor que siempre estaba encendido había alguien frente a este.

—¿Cypher?

—¡Dios mío! — exclamó sobresaltado y sobresaltándome a mí también, levante las manos en alto en señal de paz y el llevo una de sus manos al pecho— Vas a provocarme un infarto un día de estos.

—¿Qué haces aquí?

—Eso debería preguntar yo— rodé los ojos y levante el pedazo de trapo que estaba utilizando para limpiar mis manos sucias.

—Me ofrecí a limpiar ultimas piezas— el levanto las cejas comprendiendo— ¿Y tú?

—Hago guardia, hoy es mi día.

—Por supuesto — dije recordando y haciendo una mueca— ¿Cómo pude olvidarlo?

—Tal vez porque siempre andas en las nubes, sobre todo desde que Neo llego— por suerte estaba muy oscuro el lugar y las luces verdes podían ocultar el sonrojo que de pronto de formo en mis mejillas.

—¿De qué hablas? — pregunté fingiendo desinterés e ignorancia, el soltó una risa sarcástica y negó.

—¡Oh! Vamos Tn, no finjas, tanto tu como Trinity han estado como locas enamoradas desde que llegó — abrí mi boca sorprendida e indignada.

—¡¿Yo?!, ¡¿Enamorada?!— el asintió y yo negué repetidas veces.

—Si, has estado tan deprimida desde que te mando al diablo...

—Escucha, Neo es mi mejor amigo desde la infancia tengo derecho de sentirme una mierda cuando lo traje a que...— dejé la frase antes de que alguien me escuchara, Neo sabia la verdad, pero no quería tampoco que la recordara— No importa, ya, es lo único que me queda de mi vida anterior— susurré dejándome caer pesadamente en un taburete.

—Debe ser difícil para ti, lo siento.

—Dije que ya no importa...— el silencio se formó alrededor nuestros mientras me cubría el rostro con una mano, escuché algunos metales chocar y finalmente algo moverse.

—¿Un trago? — Forcé una sonrisa y asentí, él me paso un vaso que lleno del líquido y luego hizo chocar el recipiente que lo contenía con este— ¡Salud!

—Salud...— tome un trago grande, me quemo la garganta y me hizo arrugar la nariz por el sabor horrible que tenía, pero el licor cumplía bastante bien la función de emborracharse.

— ¿Crees que en verdad sea el elegido?

—Lo es, no lo dudes— me dio una mirada incrédula — ¿Qué?

—¿Quién nos garantiza que Morfeo no se haya equivocado de nuevo? Después de todo... sabes muy bien que...— le di una mirada amenazante.

—Eso quedo en el pasado, Cypher, prometimos no volver a mencionarlo...— le interrumpí —Estas pisando terreno peligroso, no sigas.

—Sé que es difícil para ti y lo lamento, pero estoy seguro de que no soy el único que hace comparaciones, Neo no parece ser nadie especial...— le di otro trago al vaso y lo señalé con mi dedo índice