-Veo que eres un hombre simple y pacifico, es bueno ver que la gente en este pueblo ha alcanzado la tranquilidad.
-Es de agrado oír eso, por esa misma razón amo vivir aquí, ya sabe, sin el ruido molesto de la ciudad y con vecinos que no dan problemas.
-Lugares como estos serían ideales para un viejo como yo...
-Bueno, siempre es bienvenido a Moriō-chō.
-Me alegra que la gente de aquí sea tan amable... Incluso el café es maravilloso, tengo que decirlo nuevamente, je... Pero dime, hombre joven, ¿a que te dedicas en este pueblo?
-Soy un oficinista asalariado, no es muy interesante a decir verdad, pero mi paga es buena para lo que hago y vivo cómodamente.
-¿Administración?
-Y logística, estar en una oficina con una computadora del año ayuda bastante, prefiero de todas formas el papel y la pluma.
-Puedo decir que Morioh ha avanzado mucho en los últimos años, en el tema de globalización.
-Si, ciertamente ha tenido sus avances, cada día encuentro este pueblo más modernizado que antes, no me incomoda porque hay más hospitales y centros educativos, eso ayuda bastante a la gente, solo temo que algún día este pueblo se industrialice tanto que ya no sea lo mismo caminar una tarde por el parque mientras disfrutas de un helado o un buen sándwich de aquella tienda tan concurrida.
-Comprendo tus preocupaciones, es algo que todo hombre extraña y con el paso del tiempo se olvida, aunque crecí en ciudades y lugares muy poblados, el tener que cambiar de hogar es doloroso, porque tienes que olvidar y volver a acostumbrarte.
-Lo entiende mejor que nadie... Es algo que nunca podría superar.
-Supongo que es inevitable, es parte de nuestra vida. Debido a situaciones especiales, a lo largo de mi vida me he tenido que mudar varias veces, mi hija actualmente reside en Japón y está casada con un hombre de la misma nacionalidad, pero no he podido visitarla mucho porque mis negocios yacen en América y por consecuencia tengo que vivir ahí.
-Me ha mencionado que tiene un nieto, ¿no?
-Si, si... Mi nieto ahora es todo un hombre, era muy rebelde en su juventud, pero...
Kira pudo notar que el rostro del hombre se ablandó y sus ojos se mostraron tristes.
-...
-Pero pasaron muchas cosas en su adolescencia, un viaje especial que cambió su vida para siempre, cambió todo de él.
-Noto que quizás debió ser algo impactante.
-Si te lo dijera, sería una historia muy estúpida, casi al borde de la ficción... Pero perdimos a personas especiales en aquel viaje, duró 50 días pero juro que fueron los más divertidos, tristes, amargos, ácidos y felices de toda mi vida, una mezcla de emociones que nunca olvidaré.
-Usted también estuvo en aquel viaje por como lo menciona, ¿no es así?
-Si... Tenía 69 años en aquel entonces, aunque no fue mucho tiempo, conocí y sentí nuevamente lo que era la verdadera amistad, en mi adolescencia también pude experimentar aquello, pero nunca debes esperar a que todos avancen contigo, no todos... Viven.
Sus ojos se encontraban perdidos, Kira pudo sentir una sensación en su pecho de calor, algo en este hombre hacía que se relajara y se pusiera cómodo, como si hablaras con un amigo de toda la vida y nunca quisieras parar de escucharlo, ¿era acaso esto empatía?
-He cometido muchos errores, pero pocos son de los que me arrepiento... Ojala pudiera volver a esos días dorados donde todo era emocionante, soy un viejo y no puedo hacer mucho, ya estoy en mis 81 pero todavía quiero correr y sentir el aire de una aventura, tengo tantos sabores que probar, tantas personas que quiero conocer, tantas risas que aún quiero soltar, pero no tengo las mismas fuerzas de antes.
-Su nieto... ¿También cree que sea igual a usted?
Esa pregunta pilló de sorpresa a Joseph.
-Es correcto, no en personalidad, pero ambos compartimos aquellas experiencias, mi nieto ha estado muy ocupado y casi no puede ver a su esposa, tampoco a su madre y su hija pequeña... Pronto me retiraré, faltan unos dos años para que pueda ceder todos mis negocios a mi nieto, confío en él, sé que he dicho que en su juventud era muy rebelde, y lo cierto es que también era muy grosero.
-Bueno, son cosas de la juventud, ¿no?
-Si, tu lo has dicho chico... Ahora es muy responsable y es más blando y abierto con la gente, ha pasado por mucho, quizás más que yo a este punto y eso que es muy joven, pero el dolor de perder a seres queridos y de enfrentar situaciones que siempre requieren su máximo esfuerzo lo ha convertido en una persona sabia y tranquila, aunque cuando se enoja, tiene el mismo temperamento de sus años rebeldes, ¡Ho!- Joseph lanzó una carcajada ruidosa, aunque eso le dolió un poco en su garganta.
-Es bueno saber que siempre ve la situación con humor... No muchos pueden aceptar los dolores de la vida con tal fuerza mental.
-Supongo... Siempre fui así, porque también en mis tiempos de juventud tenía mis momentos brillantes, era un delincuente y trickster de la calle, nunca pensé que en algún momento de mi vida aquellos conocimientos me salvarían de muchas situaciones.
-Todo es una herramienta, creo firmemente que hasta crecer en la calle puede tener sus ventajas.
-¡Tu si sabes! Es algo divertido para ser honesto, conoces a muchas personas que tiempo después, son totalmente distintas a quienes fueron, este amigo mío... Smokey Brown, en sus años adultos se hizo el primer abogado negro en la historia de Nueva York, ahora mismo esta retirado, pero fue legendario en su cargo y hoy en día que mantengo contacto con él, es un tipo bastante listo. Lo interesante de todo esto es que lo conocí cuando robó mi cartera, de ahí las cosas tomaron su rumbo y nos hicimos buenos amigos y aliados esenciales durante ciertos eventos.
-...La vida si que da sus giros, creo que me falta mucho más por vivir para poder entender estas cosas.
-No te preocupes, la vida sigue dando sorpresas, incluso un viejo senil como yo aún puede sorprenderse por la cosa más tonta a pesar de haber visto mucho, lo único que te puedo decir para la vida es... Solo recuerda el pasado y sus momentos felices y aparta los tristes pero nunca los olvides, ya que te ayudaran a recordar y a fortalecerte como humano y en carácter, centrate en el presente para disfrutarlo, en el proceso mejora, porque eso en un futuro se verá reflejado en ti.
Un consejo de un hombre sabio, era imposible despreciarlo.
-Muchas gracias por compartir su experiencia conmigo, tomaré en cuenta sus palabras.
-No, gracias a ti por escucharme... Es bueno hablar con alguien sobre estas cosas y que te pueda entender, es un alivio.
-Siempre será un placer, podemos reunirnos siempre en esta cafetería para hablar, disfruto pasar mi tiempo de esta forma... Por cierto, ya que anteriormente habíamos hablado de qué traje elegir para su nieto, ¿por qué no ir ahora mismo a escogerlo?
-Suena maravilloso, solo espero que cuando se lo dé no le ponga figuritas o cosas extrañas, aunque, tengo que admitir que yo también vestía muy diferente a lo estándar de aquellos tiempos.
-Bueno, de tal palo...
-Tal astilla.- Joseph sonrió divertidamente al completar la frase.
Kira nunca tuvo la oportunidad de hablar con un hombre como Joseph, se sentía calmado y en paz, como si pudiera confiar en aquel viejo con apariencia frágil, y aún así, con un aura cálida y tenaz.
Quizás... Era el destino que quiso hacer un encuentro tan raro y perfecto a la vez.
Dejémoslo en una casualidad.

ESTÁS LEYENDO
Retribución
FanfictionKira Yoshikage regresó, después de 2 años de vagar como un fantasma y aprender de sus errores, concluyendo que no fue una buena persona en su vida pasada, se le da una oportunidad de enmendar las cosas, finalmente pudiendo alcanzar una vida tranquil...