Mi reflejo muerto

La luz al final del túnel (Parte II)

Oscar, aunque con la excesiva perdida de sangre por el corte en su brazo se mantenía lúcido para seguir hablando con Vanessa. El quería salvarla, no quería, el necesitaba salvarla. Era su amiga.

–Vanessa, ¿estas convencida de tu decisión?, si ya esta fija no soy nadie para impedírtelo, pero si tu mueres voy a soltar el pañuelo en mis venas, y me voy a ir junto a ti, es todo o nada Nessa. Vivir juntos o morir juntos, no me importa que hagas, a donde vayas o si vives o mueres porque yo voy a ir junto a ti hasta el fin de los tiempos, seremos Oscar y Vanessa, Vitico y Nessa.

Vanessa y Oscar dejaron salir las lágrimas que estaban conteniendo, estaban muy sobrecargados de emociones tan fuertes y hablar de sus muertes no era algo que ayudaría a solucionarlo. Sus lágrimas se convirtieron el llanto, un llanto muy descontrolado y fuerte por la sensación de haber perdido a un amigo. Porque querían permanecer unidos. Y aunque no era verdad, sentían que  estaban muy lejos del otro.

–Vanessa – Oscar se ponía más pálido – baja a hablar con tu padre, el en serio quiere disculparse contigo – sentándose en el suelo – me estoy agotando mucho, y casi ya no puedo hablar. Quiero seguir viviendo, quiero que tu sigas viviendo. Quiero que seamos amigos hasta el fin.
–No seas tonto, no quiero dejarte muriendo aquí arriba.
–Voy a estar bien Vanessa, tu padre esta preocupado or ti. El esta muy arrepentido por haberte tratado así, el quiere disculparse contigo.

Vanessa tomó la decisión de bajar hasta el suelo para hablar con su papá y escuchar sus disculpas. Ella dejó a Oscar en su techo y aunque se sentía un poco preocupada por su amigo el aseguró que se mantendría consciente.

–Hola papá – toca el suelo – Oscar me convenció de bajar a escucharte pedirme disculpas, se que fuiste malo pero yo tampoco puse de mi parte en mejorar – centrifugando una lágrima – se que vas a disculparte, pero también tengo que disculparme también. No he sido la mejor de las hijas y tampoco he sido la más obediente. Quiero que nos queramos como cuando era una niñita, te amo papá y lo siento tanto.
–Hija – abrazando a Vanessa – lamento ser tan estricto contigo y ser tan severo con tus castigos, eres una jovencita en crecimiento y claro que quieres salir y divertirte con tus amigos. Supongo que todavía te veo como mi pequeña Vanessa, y ya has crecido mucho. Creo que no pude entenderlo.
–Te amo papá – entre llanto – lamento todo esto.
–Tambien te amo hija – acariciando su cabeza – yo tambien lo lamento.

Oscar estaba en el techo, y el desangramiento lo había hecho perder el control de su equilibrio. Se sentía tan débil que no podía decir ni una palabra, sentía que la fuerza que le restaba se escapaba como el agua en un colador.

Habían pasado al menos 20 minutos desde que cortó sus venas y casi había perdido mucha sangre, Vanessa había bajado al suelo a hablar con su padre y se había olvidado por completo que su amigo estaba herido.

–Maldición – llegó el recuerdo a Vanessa – papá hay que subir al techo rápido, Oscar está herido de gravedad y necesita ayuda urgentemente.
–Hay que apresurarnos – dijo abriendo la puerta de su casa – destraba la puerta del techo y ayuda a Oscar a mantenerse consciente, si se desmaya es muy probable que no sobreviva.

Al subir Vanessa vio a Oscar recostado en una de las rejas. Tan pálido como la nieve, siendo que su color habitual es una piel morena. Ella se apuró el paso pero no pudo creer lo que vio en ese momento.

–Lo siento Nessa – soltando la reja – no fui  lo suficientemente fuerte.
–Maldita sea va a caer – pensó corriendo hacia el – no, Oscar

Oscar cayó desde al menos casi 8 metros de altura, y aunque se mantuvo consciente mientras caía, vio algo que lo hiso pensar que estaba loco, era su hermano, Gabriel y Valentina estaban en el techo de Vanessa. Y mientras veían a Oscar caer lo despedían con la mano.

–Maldita sea – dijo Jesús – se cayó desde el techo.
–Papá hay que llevarlo al hospital rápido – dijo con llanto – sus heridas son graves. Apresurémonos a llevarlo hay que evitar . . . - haciendo una pausa larga – hay que evitar que muera.
Dentro de su mente Oscar batallaba por su vida, sus pensamientos iban y venían, y se preguntaba por la voz que escucho en el amanecer.

–Ja ja – riendo triste – resulta que no era Nessa, mi vida era la que corría peligro verdadero. Esa voz, ¿que era, y por que no me dijo sobre esto?. Mis piernas. . . - haciendo una pausa – están ambas rotas. Pero Vanessa esta viva, estoy tan contento por que arregló las cosas con su papá. Tengo mucho sueño, creo que – haciendo una pausa – voy a – con otra pausa – dormir un poco.

Fin de la Temporada 1.
La vida de Oscar corre peligro, su amistad con Vanessa
lo llevó a casi sacrificar su vida por ella. Su vida esta pendiendo de
un hilo. La temporada uno tuvo un final inesperado. Ojalá te guste y
espera a la segunda temporada. Hasta entonces.

Curiosidades:

1) Los nombres de los personajes son segundos nombres de mis conocidos.
2) Solo Vanessa y Oscar son nombres auténticos.
3) La cruz gigante si es una atracción real que esta en Anzoátegui, Venezuela.
4) No son mencionadas, pero Oscar y Vanessa tienes otras hermanas menores.
5) Nezuko Kamado e Itachi Uchiha son la wifu y el usbando de los escritores.
6) Sofia y Sarah son primas, esto no esta escrito en el libro.
7) Los padres de Vanessa y Oscar si están separados.
8) Vanessa apodó a Oscar “Vitico”, porque David y su primo le decían así.
9) El apodó a Vanessa “Nessa”, por la palabra en japones “nee-san” (hermana). Y por el obvio diminutivo de su nombre.
10 )Vanessa en serio detesta la educación física.
11) La inspiración de este libro es de una pesadilla de uno de los escritores.
12) Algunos destalles son basados en hechos reales, como los nombres, padres separados, hermanos y amigos.
13) Si, los escritores tambien son adoradores  del anime.

Estas son las curiosidades de la temporada 1 de “Mi reflejo muerto”.