Me estaba quedando dormida después de la peli, pero dos toques en mi puerta me interumpieron.
-Chanta , ¿Estás despierta querida? - mire a Arblet, se había quedado dormido. Salí sigilosamente del cuarto y la encontré junto a la puerta.
-¡Oh querida, lamento la...!
-Chist --- me puse el índice en los labios.
-¿Qué pasa? - me pregunta en tono más bajo .
-Arblet está dormido.
-Pero si tiene instituto mañana - se queja mamá - ¿Cómo diablos se queda aquí?
-No lo sé - admití.
-¿Y el uniforme?
-¿Crees que deba despertarlo? - ufff, que diga que no.
-Es lo debido. --- informa asintiendo
-Ni madres, creerá que le estoy echando --- mentirosa.
-Es no es cierto - niega mi madre pasándose una mano por su pelo - no tengo problema con que él duerma aquí, pero, ¿que le diré a su madre?
"Qué a su hijo no le dio la puta gana de llegar a casa " murmure.
-Chantal, te oí - me regaño mamá - estoy cansada.
El pensamiento de que no cociné nada para mi madre me cayó como un balde de agua fría. Oh, mierda, ¿cómo soy tan mala hija?
-Mamá no eh cocinado nada.
-No te gusta la cocina - me reprocha - creo que veré que haz dejado en la nevera.
-¿Quieres una ensalada de frutas?
-No. Me encargaré de llamar a María, tal vez consigamos su uniforme.
Mamá se dio vuelta y desapareció de mi vista. Me quedé observando lo normal que se toma las cosas. Mi madre no es una madre normal, es muy comprensiva y actualizada, cuando está en casa le puedes oír cantar alguna canción moderna o a la moda. Incluso, su corte le da una visión lésbica, pero mamá es totalmente heterosexual.
Entro a mi habitación y observo que Arblet está sentado en el mueble:
-Tu madre es un ángel - dice mientras cojo el teléfono - creo tenerte envidia.
-Mierda...- me quejó haciéndome la ofendida - estabas escuchando - lo acusé.
-El tema era yo - comenta y se para a encender la bombilla - creo que no estaba metiendo mis narices en nada que no debía saber.
-Solo tienes una nariz - moleste.
-No comiences.
-¡Te haré una demanda!, ¿Y si mi madre y yo hablamos de algo privado?
-Aconsejale que hable bajo --- se encogió de hombros --- además, ¿Qué podéis hablar? ¿Menstruaciones? No es como un tema prohibido ni nada que yo no sepa - el mueve su cabeza en negación - menudo tema privado.
-¿Tienes frío? - pregunto para cambiar el tema y buscarle un sábana más gruesa - creo que...
-¿Te ah llamado Ariel? - Ariel es mi novio.
-70 veces- digo y dejo el cell .
-¿Y por qué no contestas?
-Son las 11 de la noche, ¿entiendes?
-Está enamorado.
-Abogado.
-Vaya, vaya. Y me lo dices tú qué tienes las licenciatura.
Intenté ocultar mi sonrisa, enserio, pero fue imposible sabiendo que mi madre no pierde una conversación y pues...uno aprende lo que ve.
-¿Se enojaría tu novio de saber que dormiré aquí?
-Sabe lo que eres --- respondí con simpleza.
-¿Qué no ves porno? ¿Esos tíos gay que se acuestan con sus amigas? - conecté mi teléfono mientras lo miraba por el rabillo del ojo. ¿Qué estaría maquinando su mentesita?
-¿Quieres dormir ya? - le pregunté irritada - voy a darme un baño.
-Claro, claro y yo voy a dormir en tu cama - dice sarcástico.
-¿Es la primera vez que me baño tarde?
-Solo digo que quiero dormir en tu cama.
-A el mueble - le ordeno.
-Me encanta tu inocencia.
Tan inocente como una virgen.
Me reí de mi propia ocurrencia.
-Yo también quiero una ducha
-Te ofrezco el baño de mi madre.
-Uhum uhum , nada de bragas de 5 metros de anchos, me gustan los finos... lencería.
-¿Olvidas quien es mi madre? - él no responde pero se que sabe a lo que me refiero, mi madre viste mejor que yo. Y eso es mucho decir por qué, verdaderamente, yo no visto mal --- duerme, ¿sí?
-¿Y perderme el verte desnuda? Paso.
-No me cambiaría frente a ti ni que te murieras - camine en dirección al baño.
-Y muchas lo quisieran. Las mujeres son raras, lo tienen y lo rechazan.
-Ni que te murieras - le repito.
-¿Sabes que? Solo vete, apestas hasta aquí - cojí lo primero que vi encima del gavetero, que cabe destacar fue mi cepillo, y se lo tiré en la cabeza.
---Auch --- dice frotándose la frente --- me va a salir una montañita por tu culpa.
---Y cabe destacar que será más grande que tus miserias --- Arblet abrió los ojos y la boca a la par mientras yo le guiñaba un ojo y hacía mi salida triunfal hasta el baño.
Una palabra.
Gané.
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La quiero en mi cama {+18} ©™ {✓}
Teen FictionLa observé con cuidado y detenimiento, iba de aquí para allá buscando que ponerse y yo solo podía ver la incomodidad con la que caminaba. «No digas nada, no digas nada» Me encantaba pensar que yo fui el que la dejó así, después de tanto sexo, que f...