Silence (Justin Bieber)

Capítulo 4. SPA.

Me encontraba sentada en un sofá, un pequeño sofá situado delante de un gran ventanal. Desde allí podía ver toda la ciudad, todo eran luces, altos edificios y arquitectura moderna. Ashley y Brandon vivían en una casa enorme, prácticamente una mansión.

No se oía nada, me encontraba totalmente a oscuras en silencio, necesitaba reflexionar sobre mi nuevo rumbo de vida.

Me había marchado a unos días de terminar el instituto y había dejado todo de lado: mis amigos, mi casa, mi familia. Había dejado todo y ahora me encontraba en la otra punta del mundo.

Al llegar a casa estuve hablando con Ashley y Brandon, ahora quien llevaba las riendas de mi vida era yo. Acordamos que al día siguiente tendría una pequeña reunión con Ashley y Brandon para hablar sobre mi futuro y mis ideas.

Mis tíos me dejaron en claro que yo decidiría mi futuro, tenía mucho que pensar. Quería seguir el instituto? Quería trabajar? Quería ir a la universidad? Quería vivir sola? Estaba muy indecisa, pero las decisiones tenían que ser decididas esa noche.

*

A la mañana siguiente desperté, la noche anterior había sido agotadora para mi subconsciente.

Durante la noche rondaron en mi cabeza extraños sucesos que desconocía, todo era oscuro y misterioso. A la vez los recuerdos me invadían. Tuve una pesadilla, una larga y extraña pesadilla.

Entré al baño y volví a mi rutina diaria.

Me aseé y me introduje en la ducha dejando que el agua fría cayera sobre mí. Me enjaboné con mi nuevo gel de baño, tenía un agradable olor a rosas.

Terminé lavando mi cabello y cerré la llave del agua.

Entré dentro de mi habitación cubierta por una rosada toalla y empecé a retirar toda la ropa y objetos del interior de mi maleta.  

Coloqué dentro de mi armario mis camisas y pantalones en perchas y a continuación mi ropa interior, calcetines y demás en los cajones.

Los zapatos los coloqué en un pequeño zapatero que se encontraba a la esquina de la habitación y procedí a entrar al baño.

Hice un moño en lo alto de mi cabeza y organicé mi maquillaje en el baño.

Apliqué base en todo mi rostro y cuello, apliqué corrector y lo sellé todo con polvo, a continuación aplique mi máscara de pestañas y para terminar pinté mis labios de un color rosado perla.

Salí del baño para dirigirme a mi habitación y procedí a escoger mi ropa para hoy.

En Sidney al contrario de Nueva York en esta temporada hacía un calor abundante y ahora era bastante notorio.

Abrí el armario nuevamente y saqué un short high waisted de color marino ajustado y un crop top de encaje blanco que cubría mi pecho. Me miré al espejo, todo perfecto.

Salí al pequeño balcón que se encontraba en mi habitación y sentí un escalofrío en mi cuerpo, estaba empezando a hacer un poco de fresco.

Entré y volví a abrir mi armario, me puse un cárdigan crema de seda para cubrirme un poco para la brisa del exterior y me dirigí al salón.

- Buenos días, cariño.- dijo tía Ashley.

- Buenos días!- dije animada posando un beso en su mejilla.

- Siéntate, cielo. Enseguida traerán tu desayuno. Margaret!

- Dígame señora.- respondió una mujer mayor asomándose por el marco de la cocina.