Mamá

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Candy despertó pensó que todo era un hermoso sueño, ver a su madre cerca acariciando su mano cuánto había soñado de que ella no esté muerta, de que todo fuera un error y ahora la tenía sentada en el gran sofá acariciando su mano, Terry la tenía en sus brazos su Pecosa cayó inconsciente en sus brazos sabía que tenía un nido de emociones y él sería su apoyo en todo así como ella fue su apoyo el día que vio a su madre, para Candy parecía todo una dulce tortura hasta que su mamá hablo

- Mi niña ¿te encuentras bien?- le pregunto Aurora con un tono muy preocupado

- Si mamá....me encuentro de maravilla, siento como si estuviera completa, me siento feliz de tenerte conmigo mamá...- Candy se abalanzó a su madre la abrazo con tanta fuerza, las rubias lloraban de felicidad al fin estaba juntas, cuánto se habían extrañado, Aurora pensando que no tenía familia, pero quién diría que encontraría a sus padres y hermanos y no solo eso era felizmente casada y con una hija, en cambio Candy pensaba que solo tenía a su padre y que nunca volvería a ver a su mamá, que equivocada estaba su mamá estaba vivía, pero por un accidente fueron separadas o al menos eso era lo que ella pensaba...

En el estudio todos miraban enternecidos la escena de mamá e hija, Albert se unió al abrazo al fin tenía a sus dos amores juntos su esposa que por el destino les robaron muchos años de felicidad y su hija aquello fruto del amor su niña su posesión más valioso, su ángel esa pequeña que emanaba alegría por dónde quiera, al fin la tan anhelada familia que les fue arrebatada hoy el destino los volvió a unir

Primero a los Grandchester el destino los lleno de dolor, lágrimas y sufrimiento y después les llegó la felicidad, ahora eran los Ardley quienes también sufrieron mucho con la muerte de Aurora, pero el destino tenía otros planes tenerla con vida y hacerla regresar a su hogar, pero aún había cosas por descubrir, acaso el accidente de Aurora fue accidente o fue un plan macabro en el que acabaría con la vida de ella, tanto para los Ardley como para los Grandchester tenían en mente a una persona, la única que sería capaz de hacer tanto daño solo por envidia y dinero y esa persona era la momia viviente perdón Sara Leagan, o podría ser aquel hombre que odiaba a Albert no solo por ser apuesto, tener las mejores notas desde pequeño, sino por tener a la mujer más hermosa que los ojos podrían ver Aurora, no sabían quién de los dos sería tan descabellado para intentar acabar con la vida de una noble mujer, Albert y Richard sabían que no era el momento indicado para hablar de esto por el momento dejarían la fiesta en paz, ahora solo quería disfrutar de sus familias.

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Salieron del estudió, los primos de Candy ya los esperaban en el gran comedor, ellos ya sabían que la madre de Candy estaba viva, pero no dijeron nada ya que no querían que su prima se sintiera mal, a decir verdad les costó mucho trabajo guardar ese secreto ya que podrían por decirle que su mama estaba viva, que se encontraba en la mansión, pero a la final se dieron cuenta que fue lo mejor, estaban felices porque su prima tenía un nuevo brillo uno mucho más alegre, Terry miraba extasiado a su Pecosa se sentía feliz de que ella fuera feliz solo un ciego no podría ver la felicidad que tenían las rubias dede que salieron del estudió Candy no se despegó de su mamá, ella a pesar de su corta edad sabía que el pasado no se podía recuperar, el futuro era incierto, quien saba que les depararía el destino a ambas familias.

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La cena paso solo con risas, paz y armonía se podía respirar en esa casa, pero así también llegaba la hora de la despedida los Ardley se despidieron de los Grandchester, si bien a los niños no les gustaba separarse pero en esta ocasión parecía que no les importará ya que ambos estaba pegados como chicles a sus mamas no querían separarse ni un centímetro de ellas, a Albert y Richard les cuaso gracia nunca pensaron ver a sus hijos de esa forma ya que los rebeldes eran muy unidos

-Bueno Williams es hora de irnos, sabes no quiero comentar esto aquí tú sabes a lo me refiero- Dijo esto mirando a Aurora

- Lo se Richard, tenemos que averiguar todo lo posible sobre eso-

De la amistad al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora