💘Amante De Lobos💘 [Bakugo y Tu] +18 [Historia Sencilla]

Capítulo XVI

Como era de esperar de un embarazo los síntomas se hicieron aparecer.

Los antojos casi imposibles…

—Te odio… ¿¡Por que tengo que ir a buscar fresas a media noche!?. —Se acomodaba los zapatos molesto antes de irse.

—Yo también te amo. —Le sonreíste.

También el mal dormir…

Ambos dormían juntos hasta que el primero en caerse de la cama fue Katsuki.

—Mierda… Me dolió el golpe… —Se pasaba la mano por la cabeza.

Los mal humores…

—¡Esa mujer te estaba viendo! —. Discutiste por una mujer del supermercado quien parecía muy “interesada”.

—¿Estas loca? ¿Ella? Ni la noté ¿¡que mierda te pasa!?. —

La sensibilidad emocional y sentimental…

—Katsuki sabes que yo te quiero mucho… —Dormías con el. —Y-yo no quiero que te pase algo… —Tus ojos se ponían vidriosos con eso.

—¿! Por qué demonios estás llorando!?. —

Siempre pasaban situaciones chistosas.

Por otro lado, Yuui se sentía desplazada, Katsuki casi no la miraba ya que siempre estaba en su habitación.

««La mocosa solo se la pasa en su habitación desde que llega de clase hasta que se va»». Pensó Katsuki tras no verla.

Decidió abrir la puerta para chequear que todo estuviera bien, la vio envuelta en sábanas dando la espalda.

—¡Oí mocosa!. —La niña se dio la vuelta y su rostro parecía haber estado llorando. —Al menos sal de aquí. —

—Estoy bien aquí. —

Katsuki sintió un leve remordimiento y sabía la razón de este actuar.

—Ve a ver a tu madre. —

—No, que descanse. —Siguió en lo suyo.

Katsuki no era muy bueno con los sentimientos así que salió de la habitación sin una solución.

Ya habían pasado cuatro meses y la panza se notaba.

—Yuui ha estado encerrada en su habitación —. Te dijo Katsuki cuando cocinaba.

—Por primera vez la llamas Yuui. —Katsuki no puso atención a eso y siguió.

—Talvez cree que la estamos ignorando… ¡Yo que se, igual es una mocosa!. —

—La iré a ver yo misma. —Te fuiste a verla.

Yuui seguía igual.

—Hola Yuui… —Saludaste pero no respondió, Te sentaste a su lado pero no te vio. —¿Cómo esta la pequeña Yuui?. —
Tocaste su cabello.

La niña dejó caer sus lágrimas en silencio.

—mamá… ¿M-mamá me quiere?. —

—Claro que te quiero y mucho, si tu eres mi hija, mi sol. —Yuui se mostró ante ti intranquila. —Ven dale un abrazo a tu madre. —Extendiste los brazos.

—M-mamá s-siempre me va q-querer ¿verdad?.—

—Siempre y para siempre, sin importar el que. —Sonreíste. —Yuui ven y toca aquí. —Colocaste sus manos en tu abdomen. —El es tu hermano. —Yuui estaba sorprendida jamás te había tocado el  abdomen cuando estabas embarazada. —Tu serás su hermana preciada, su hermana mayor. —