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Capítulo 48

Cuando Mu Ran se despertó, todavía estaba un poco aturdido y su mente no tenía claro lo que había pasado. Estaba conectado a un respirador, su respiración nasal era débil y no podía mover el cuerpo en absoluto.

Yi Tian estaba de pie frente a la cama mirándolo, con las oscuras sombras bajo sus ojos por una larga falta de descanso. Su rostro estaba aún peor que el suyo, ya no era tan agresivo como antes.

Los ojos de Mu Ran se encontraron con los suyos e intentó hablar, pero cuando abrió la boca, se dio cuenta de que no podía emitir sonido, sólo podía mirar a Yi Tian aturdido. Sus ojos mostraban cierta impotencia y confusión.

Yi Tian se quedó quieto y su mano se apretó y se soltó varias veces. "¿Quién te pidió que me salvaras? ¿Quién te dijo que saltaras?" Cada vez que pensaba en la forma en que Mu Ran había saltado para protegerlo cuando el coche chocó, su corazón se sentía tan ansioso y doloroso que quería golpearlo con fuerza.

Mu Ran parpadeó y le miró sin comprender.

"Crees... no creas..." quiso decir, "No creas que estoy agradecido", pero su voz tembló tanto que no pudo terminar la frase.

Las lágrimas cayeron de sus ojos y golpearon la cara de Mu Ran, pero aún así frunció los labios con fuerza y miró sin pestañear a Mu Ran, como si no fuera él quien llorara.

Los ojos de Mu Ran se abrieron de par en par y lo miró casi consternado. Movió la mano y luego, con todas sus fuerzas, movió los dedos para agarrar la esquina del abrigo de Yi Tian, pero sólo duró un segundo antes de que su mano bajara débilmente.

Al sentir su movimiento, Yi Tian se apresuró a agarrar su mano.

Mu Ran jadeó suavemente y parpadeó con algo de esfuerzo, su mano se movió ligeramente y golpeó la palma de la mano de Yi Tian.

Yi Tian comprendió inmediatamente lo que quería decir y extendió la palma de la mano hacia arriba.

Mu Ran seguía la palma de su mano, deslizando los dedos poco a poco. Realmente no tenía fuerzas y a menudo tenía que hacer una larga pausa antes de poder seguir escribiendo. Pasó el tiempo y, finalmente, escribió la palabra 'tú' en la mano de Yi Tian.

Antes que la segunda palabra fuera escrita en el tercer trazo, Yi Tian se llevó la mano a la palma, bajó la cabeza contra su cara y se ahogó en su oído: "Estoy bien, estoy bien..."

Los ojos de Mu Ran parpadearon de nuevo al escuchar su respuesta, mostrando un poco de tranquilidad en sus ojos.

Acababa de despertarse, su cuerpo estaba muy dolorido y estaba confundido sobre lo que había pasado. Escuchó lo que dijo Yi Tian, pero su mente se sentía como atascada en un trozo de pasta, incapaz de reaccionar a nada y no entendía lo que significaba. No sabía por qué Yi Tian estaba llorando, pero mientras estuviera bien, se sentía aliviado.

No estaba de buen humor y estaba tan cansado que ni siquiera podía respirar. Ahora que se había tranquilizado, dejó de esforzarse, cerró los ojos y se quedó dormido.

Cuando Yi Tian levantó la cabeza y vio que tenía los ojos cerrados, su corazón entró en pánico y quiso estirar la mano para abrazarlo. Su Wenyang, que había estado de pie junto a él observándolos, se apresuró a detener a Yi Tian y dijo con voz profunda: "Está bien, sólo está dormido".

Yi Tian se quedó atónito por un momento, girando la cabeza para mirar la máquina de ECG que tenía al lado, y sólo después de ver los datos de latidos en el instrumento, retiró la mano. Era como si hubiera perdido todas sus fuerzas por un momento, y su voz ronca estaba espesa por la fatiga: "Sal y déjame quedarme con él un rato. No dejes entrar a nadie".