¿Sexo o Amor?

Capitulo 11 • Diosa sexual.

Harry Gútierrez.

— ¿Qué es lo que dejó llevar? — pregunta una Daniela curiosa.

Parece niña pequeña cuando se le entra la curiosidad.

— Te mostraré cuando lleguemos a casa.

— ¡Pero quiero saber ahora! — hace puchero.

— Princesa te lo mostraré más tarde.

Veo su intención de volver a hablar pero la interrumpo.

— Si vuelves a contradecirme no te dejaré ponerte el vestido.

— ¿Eso significa qué si me dejarás ponerme lo? — pregunta emocionada.

— Lo estoy considerando.

Está suelta un chillido y lo próximo que siento son sus brazos rodearme y sus labios encima de los míos.

Me paró en un semáforo a la hora que Daniela pase de su asiento al mío profundizando el beso.

Pongo ambas de mis manos en su trasero apretándolo mientras Daniela muerde levemente mi labio inferior.

Un sonido de un auto hace que vuelva a la realidad.

— Tráfico de mierda — contesto mientras enciendo el auto.

Escuchó la suave risa de Daniela y no puedo evitar sonreír, escucharla me provoca cierta paz.

Al llegar a casa me bajo del auto con cuidado, Daniela se durmió aún encima mío.

Entro a la casa intentando hacer el menor sonido posible pero en esta casa es imposible.

— ¡Harry hermanito! — escucho a Dakota y le hago señas para que se calle.

Subo hasta mi habitación y la acuesto dejándola descansar, más tarde la despierto para explicarle cómo serán las cosas.

Le quitó la blusa junto con el sujetador para que pueda dormir cómoda luego quito sus pantalones poniendo le una de mis camisas.

Le acuesto tapándola con las sábanas para que el aire acondicionado no le molesté y bajo a la sala.

— ¿Qué necesitas? — pregunto saliendo al patio.

— Solo vino a saber de ti, no me habías hablado en todo el día.

— Ya vez que estoy bien.

— Por lo visto si — contesta soltando una pequeña risa.

— ¿Qué te causa tanta gracia?

— Sabías que andabas medio raro con eso de salir varias veces en la madrugada pero no pensé que ya tienes novia.

— No es mi novia — contestó.

— Aún.

— ¿Qué te hace pensar que andaremos?

— Esa chica va a conquistar — hace una pausa mientras hace comillas con los dedos — al "Harry sin sentimientos"

— Nunca dije que no tengo sentimientos.

— ¡Cómo digas hermanito! — contestó entrando a la casa — Ya me voy, cuídate y también a tú chica, espero conocerla pronto.

Al salir de la casa me dirigo otra vez a mi habitación, mientras voy subiendo las escaleras voy quitando los botones de mi camisa.