Capitulo 12

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Harry Gútierrez.

— Son las iniciales de tú nombre.

— Así es — contestó tomando de mi jugo.

— ¿Por qué debo llevarla?

— Para demostrar que eres mía — respondo cómo algo obvio.

— ¿No crees que es muy posesivo?

— Un poco realmente, pero no te vas a juntar con personas cualquieras y sería eso o cortarle las manos a un par de hombres.

— Harry me asustas.

— Deberías temer de mi, pero por más que quieras no lo haces — contestó viendo la hora — y lo sabes.

— ¿Dónde vas ahora? — pregunta viendo mis intenciones de levantarme.

— Tengo que ir a tú empresa viendo que todo esté bien y luego resolveré algunas cosas.

— ¡Harry! — habla en protesta — ¡Ese es mi trabajo, no tienes que meterte en el!

— Tomarás este día para prepararte con todo tú tiempo y relajarte un poco.

— ¡Me aburro aquí, estoy sola! — hace puchero.

— No lo estarás.

— ¿Quién más estará aquí?

— Hablé con mi hermana, ella vendrá a ayudarte con el peinado y maquillaje, de eso se gana la vida.

— ¿Cuál es su nombre?

— Dakota.

— Me recuerda a Anastacia.

(...)

— Señor lo estábamos esperando — me habla mi secretaria.

— ¿Qué pasa?

— Tuvimos problemas con una transportación.

— ¿Por qué razón?

— Un equipo diferente al nuestro nos atacó, matando a cinco de nuestros hombres.

— ¿Qué pasó con los demás? — preguntó.

— Dos solo tuvieron algunos rasguños, nada grave pero los otros tres están en urgencias en el hospital.

Entró a mi oficina y tomó el teléfono, se quién es el responsable de todo esto.

— Sabías que ibas a llamar — contesta Dylan al otro lado del teléfono — Uno mío, cinto tuyos.

De mi garganta sale una gran carcajada.

— ¿Miraste bien quiénes eran los hombres que asesinaste? — pregunto aún riendo.

La llamada queda en silencio por algunos minutos hasta que escuché nuevamente la voz de Dylan.

— ¡Eres un hijo de perra! — escupe a través del teléfono — voy a matarte.

— Quiero verte intentándolo — contestó antes de colgar.

Me divierte ver cómo intentan engañarme, no saben que crecí en esto.

Escuchó tocar mi puerta y respondí con un; Adelante.

— La señorita Morgan lo quiere ver.

— Dile que no me encuentro — contestó fastidiado.

Nicole no había terminado de cerrar bien la puerta cuando Morgan ya estaba en mi oficina.

— No me vas a hechar cómo haces cómo las demás mujeres.

¿Sexo o Amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora