thirteen

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BeomGyu había terminado su clase de matemáticas, y se sentí animado porque podía irse una hora antes gracias a la ausencia de la señorita Joy. Gracias, gripe.

Él iría a casa solo, porque YeonJun estaba ocupado entrenando al equipo por la ausencia de SooBin y sus amigos en sus clases correspondientes. BeomGyu esperaría a JeongIn y HyunJin, pero sabía que tardarían demasiado y ambos eran los primeros en decirle que no era necesario que los esperara.

BeomGyu cerró su taquilla, suspirando tranquilo y pensando en la de cosas que haría aquella tarde. Probablemente adelantaría algún que otro proyecto, o se distraería con algo cuando fuera a hacerlo. Siempre pasaba lo mismo.

Sin embargo, alguien lo paró.

"BeomGyu, necesito que vengas conmigo ahora" HeeSeung estaba de repente al lado de su casillero, después de correr a gran velocidad hacia él. Apoyó su gran mano en la puerta de la taquilla de BeomGyu, el ojiazul brincó y chilló del susto.

"¿Qué?" logró murmurar confundido, parpadeando incrédulo.

"Es una urgencia, por favor, eres el único al que escucha" jadeaba el alto jugador en defensa de fútbol americano. Sus cabellos que siempre estaban perfectamente peinados hacia atrás ahora estaban desordenados y alocados.

"¿A qué te refieres?" BeomGyu balbuceó, y todo aquello lo estaba asustando.

"Es sobre SooBin, está en descontrol"

🥀

BeomGyu y HeeSeung corrían por el aparcamiento de la Universidad, BeomGyu sentía que su corazón iba a explotar por correr tanto y que sus pobres y cortas piernas no estuvieran acostumbradas le daban calambres.

SooBin.

SooBin estaba en descontrol, según le había dicho HeeSeung. BeomGyu estaba nervioso y preocupado.

"¿Qué está pasando, HeeSeung?" logró preguntar, jadeando agotado y sintiendo que el aire abandonaba sus pulmones.

"SooBin, eso es lo que pasa." contestó el mayor, y BeomGyu sintió envidia porque no jadeaba y su voz sonaba tan tranquila y normal como si estuviera caminando sobre nubes "Está peleando con TaeHyun, de último año"

"Mierda, SooBin" masculló entre dientes el menor.

BeomGyu no se esperaba encontrar a SooBin agarrando al chico del cuello de la sudadera, con sus nudillo salpicados de lo que era la sangre del chico, y con un feo labio partido. Se veía desordenado, respiraba agitado y furioso, y sus nudillos eran blancos de la presión.

La cara de ese tal SooBin estaba hecha un completo desastre, su nariz estaba jodida y sangraba. SooBin alzó su puño de nuevo con el fin de golpearlo de nuevo, con su mandíbula tensa y sus dientes chirriando por la ira.

"¡SooBin, basta, por favor!" BeomGyu exclamó, corriendo hacia SooBin sin dudar. Los ojos verdes lo miraron al instante, casi desesperados al oír la voz de BeomGyu.

"¿BeomGyu?" balbuceó SooBin, y su labio estaba sangrando con un hilo carmesí cayendo hasta su barbilla.

"SooBin, deja al chico en el suelo. Por favor." pidió BeomGyu, poniendo sus manos en su brazo. SooBin lo miraba aún muy sorprendido, casi sin creer que el chico de baja estatura estaba a su lado "SooBin, por favor"

SooBin iba a hablar, pero TaeHyun tosió y escupió algo de sangre, farfullando un 'Maricón mamón' que hizo gruñir a SooBin de nuevo. BeomGyu habría dejado que SooBin golpease a ese tal TaeHyun, porque sabía que SooBin golpearía a todo el que BeomGyu le dijera. Pero BeomGyu era así, y no le gustaba y mucho menos disfrutaba de los golpes y las peleas.

Vio que SooBin alzaba aún más su puño, esta vez con mucha seguridad y claridad. BeomGyu lo paró de nuevo "Déjalo SooBin, por favor. No merece la pena, por favor, no lo hagas"

Los amigos de SooBin miraban sorprendidos como el pequeño ojiazul era capaz de dominar a ese salvaje y territorial león llamado SooBin. Las manos de BeomGyu acariciaban su brazo, porque sabía que eso relajaba y calmaba la ira de SooBin un poco más.

Poco a poco, los puños de SooBin se relajaron y TaeHyun se liberó finalmente. Tosió ahora con libertad, y se marchó de allí avergonzado y apaleado, murmurando entre dientes algo que BeomGyu escuchó como 'Jodido loco'.

"Está bien SooBin, tranquilo. Ya se ha ido, relájate" murmuró suave BeomGyu, viendo que SooBin limpiaba la herida en su labio pasándose la mano por la boca "¿Por qué hiciste eso, SooBin? ¿Acaso no ves que podrías salir aún más herido?"

"Estoy bien" masculló SooBin, y su voz sonaba tan ronca y rasposa, tan malditamente sexy y bonita como siempre "No tienes por qué preocuparte"

"SooBin, hermano, ¿estás bien?" preguntó HeeSeung, que ahora se aproximaba por primera vez.

"He dicho que estoy bien" gruñó irritado.

"¿Se puede saber por qué hiciste eso?" BeomGyu presionó, y ahora corría al trote para alcanzar los pasos de gigante que SooBin daba "Te estoy hablando, ¿no me vas a responder?"

Solo parecía ignorar el hecho de que su labio había vuelto a sangrar, porque caminaba hacia su coche con las llaves en la mano. Levantó su gorra con el logo del equipo de futbol americano de la Universidad y peinó sus rizos hacia atrás.

"¿Podrías dejar de correr, SooBin?" gruñó BeomGyu "Deberías ir al hospital, o a la enfermería. Y decirme por qué has golpeado a TaeHyun."

"Agradezco que te preocupes, pero no lo haré" contestó SooBin y BeomGyu sabía que estaba evitando el tema "Tengo cosas que hacer"

"¿Qué es lo que te ha dicho TaeHyun, que te ha afectado tanto que lo has golpeado hasta romperle la nariz?" inquirió BeomGyu, cruzándose de brazos y frunciendo el ceño.

SooBin abrió la puerta de su coche rojo, y quedó estático. Se giró hacia BeomGyu, y sus ojos chocaron.

"Algo que ese pedazo de mierda no debería de haber soltado"

agresivo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora