"Jamás te lo perdonaré" Exclamó SooBin, sus manos hechas puños. Sus brazos tatuados y tonificados se encontraban tensos, brazos en las que habían cicatrices que contaban más de mil castigos diferentes.
"Lo hice para protegerte" Se limitó a contestar HyeJin, su espalda recta y sin perder la compostura. Guardando esa imagen suya de mujer correcta e inquebrantable, una mujer de fuerte temperamento y sin un solo defecto "¿Es que no lo ves? Habría ido peor si le llevaba la contraria a tu padre, Steve, él-"
"¡Tú me rehuías, mamá!" Gritó frustrado, llevándose las manos a la cabeza para tirar de sus rizos. Su voz tortuosa y temblorosa hizo sentir en el pecho de HyeJin una presión indescriptible "Tú... Tú siempre preferías mirar hacia otro lado cada vez que él me pegaba. Cada vez que él me hacía caminar sobre cristales, cada vez que él me quemaba el hombro con su cigarrillo-"
"¡BASTA!" Exclamó HyeJin, visiblemente afectada. SooBin tensó su mandíbula, viendo microscópicas lágrimas bañar los ojos verdes de su madre, que se mantenía rígida y perfectamente sentada en la mesa. Tan falsa y sobreactuada, pensó con irritación "¡Basta, jamás te di la espalda!"
Tan hipócrita.
"¿¡Cómo has podido hacer una nueva vida, sin nosotros!?" Vociferó furioso SooBin, lágrimas barriendo sus mejillas. Su rostro furioso y dolido hacía que el corazón de HyeJin se rompiese poco a poco "¡Casarte con otro hombre que ya tiene hijos, como si nosotros jamás hubiésemos existido!" Reprochó "¡Como si YeWon y yo no hubiéramos importado nada nunca!"
"¡Tengo derecho a otra vida! ¡Ahora soy la madre de esos chicos!" Se excusó, su voz quebrándose agudamente, rompiendo al llanto.
"¡También eras mi madre!" Gritó fuertemente SooBin, con todo pulmón, señalándose exasperado con ambas manos mientras las lágrimas simplemente caían por sus ojos y rodaban por sus mejillas.
HyeJin sollozó desconsolada. Ninguna de esas lágrimas que ahora caían por el rostro de HyeJin pintado por caro maquillaje valdrían para rellenar el hueco vacío de la vida de SooBin, ese hueco que debería de haber sido una infancia normal y feliz, con padres juntos y sin tantos problemas.
Ningún niño merece una vida así.
"Nunca has hecho el esfuerzo por ser una buena madre. Ni por YeWon, ni por mí.." Murmuró SooBin, visiblemente dolido. Sacudió su cabeza, también furioso "Y ahora sales con esta mierda, sólo estás para jodernos la vida aún más. Y espero que estés feliz, HyeJin,"
Se acercó a su progenitora, la clara diferencia de altura no hizo a HyeJin inmutarse. SooBin estaba tenso, y si lo quería podía golpear a HyeJin por todo lo que le hizo, o más bien, qué no hizo. Eso, sin embargo, no le traería nada de nuevo y podría arriesgarse a perder a BeomGyu.
Se inclinó hacia ella, desafiante. Los ojos cristalinos y verdes, llorosos, de HyeJin lo miraron "Porque tú eres la autora de todo lo que soy"
HyeJin abrió los ojos, sorprendida y afectada por esas palabras que golpearon su cabeza duramente. Sus labios rojos temblaron "Steve, yo.."
"Ni si te ocurra nombrarme" Siseó furioso SooBin, asqueado e irritado por el intento de HyeJin de ser cariñosa "No así, sólo los que me quieren me pueden llamar así." Escupió con veneno, HyeJin bajó la mirada "Si tanto te jodí la vida, ¿por qué no me abandonaste cuando me tuviste, simplemente? Podrías haberte marchado, de todas maneras la cosa no habría cambiado mucho. O tal vez no me avergonzaría porque mi madre es una maldita hija de puta mentirosa"
"No soy eso, SooBin" Demandó HyeJin.
"Cierto," Retrocedió dos pasos, alejándose lentamente "no eres mi madre"
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agresivo.
Fanfic»Él últimamente ha cambiado« Todos en la Universidad conocen a Choi Soobin, el capitán de fútbol americano. Su novio es Kang Beomgyu y ellos son la pareja más famosa de ahí. Todos saben que Choi Soobin es posesivo con Beomgyu, él es posesivo. • Auto...