Capitulo 3

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Viktor, cerro la puerta de su habitación deslizándose por la puerta y tapando sus oídos con el ceño fruncido, odiaba su vida, pero no se iba a permitir llorar, no era un niñito para dejarse manipular por sus jodidos sentimientos negativos, pero ¿por qué todo lo agotó?.

Rodó los ojos al percatarse que iba a dejarse guiar por el "cariño" que intentaron darle, golpeó su cabeza con la puerta y cerro los ojos, dicen que lo soluciona los problemas era dormir y lo iba a probar.

Abrió los ojos y con disgusto escucho la pelea, gruño por lo bajo y saco su celular eran las 5:40,no se cansaban de gritarse?, Saco sus audífonos y vio algo golpear su ventana, alzó una ceja confundido acaso..?, Otra roca golpeó su ventana,se levantó escuchando sus huesos crujir por la incómoda posición que se encontraba, camino hasta la ventana y la abrió para encontrarse con sus compañeros y escuchando la linda charla de sus padres,se recargo en la ventana y los miro.

— Son ustedes, ¿Que quieren? — comento con indiferencia,mientras soplaba su mechón de cabello, la chica sonrió y lo saludo.

— Vinimos a preguntarte si querías pasear con nosotros... — Se escuchó un grito — Tal vez estés un poco ocupado — río con nervios, el azabache negó.

Miro adentro de su habitación, ya estaba grande para poder irse y estaba jodido de los malditos problemas con sus padres.

— Voy con ustedes — grito para entrar a su habitación y tomar su billetera, su chaqueta, al diablo estar ahí escuchándolos, se subió a la ventana y comenzó a bajar por unas enredaderas que estaban debajo de su ventana, para así caminar con sus compañeros raros.

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La tensión reinaba en esas cuatro paredes y los gritos inundaban lo que una vez fue un bello hogar, ambos adultos tenían razones para gritarse y ambas eran válidas pero no controlaban ese maldito impulso de gritarle y meter a su hijo a una pelea que ni siquiera tenía nada que ver, su relación no funcionaba, pero dañaria su imagen y su hijo lo odiaba,con cada día que pasaba todo se salía de control.

— ¡¿Tú nunca haces nada por nosotros Lance como quieres que todo esté bien?!— contrataco su esposa apretando sus puños, harta de todo eso,su esposo frunso el ceño.

— Yo hago todo por está familia, que tú no quieras verlo es tu culpa Miranda — contesto con enojo, solo olvidaron a su hijo y la discusión continuo sin saber que si hijo huyó de la casa.

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El silencio le gustaba a Viktor pero ese silencio que emanaban esos 2 le causaba incomodidad, solo quería estar lejos de casan, miro de reojo a la chica, aquel porte lindo, inocente y tierno le gustaba, miro aún lado aquel chico de actitud tímida y tierna también le atraía por alguna razón.

— Bien ¿qué haremos? — dijo el azabache cortando el molesto silencio, la chica sonrió radiante y lo miro.

— Helios propuso ir al arcade, ¿Te parece? — volvió a sonreír con aquella sonrisa que podía dejarlo ciego y le daría diabetes, asintió y giro su mirada a Helios estaba callado, sonrió con sorna.

— ¿Vas a decir algo Helios? No muerdo~ — comento con una sonrisa burlona, el chico se puso rojo por la vergüenza.

La chica río un poco mientras cubría sus labios, el castaño jugaba con sus manos evitando chillar de los nervios.

— Yo.... Bueno... — trago saliva y miro a otro lado, le causaba cierto temor el hablar con Viktor, le parecia muy genial, pero le causaba pena hablarle, Viktor also la ceja y miro a la de iris oliva quien contenía una risita.

— ¿Siempre es así? — le pregunto a la única chica que iba con ellos, soltó una risita.

— Solo cuando conoce a alguien nuevo — ambos rieron mientras Helios solo se encojio avergonzado.

Llegaron al arcade,olía a pizza y se escuchaba varias risas, era el ambiente perfecto para una tarde de adolescentes enloquecidos y junto eso eran ellos tres.

Los tres iban de juego en juegos, en un juego de armas y zombies la ganadora fue la señorita, en un duelo de Pacman Viktor fue el ganador y en un duelo de baile sorprendentemente Helios fue el ganador, ambos chicos estaban impresionados Helios había ganado y con el puntaje más alto de todos, pero que importaba, siguieron jugando varios juegos más.

Tras varias horas de jugar al fin se sentaron a comer, Viktor podía decir que por primera vez se había divertido con personas de su edad, estaba feliz y satisfecho, tomo una rebana de pizza junto con Helios,ambos comían y Amm solo miraba a otro lado con una sonrisa, se le hacía extraño ¿Por qué no comía?.

— ¿No comerás Amm? — comento Helios, Viktor volte a mirarla ella solo río con nervios.

— No tengo hambre, pero ustedes coman — sonrió pero Helios no parecía feliz con eso, Viktor trago el pedazo de pizza y río un poco.

— Si no comes, recurriremos a hacer berrinche — río, Amm río un poco, ellos no harían eso.

— No se atreverían — dijo entre risas, ambos chicos la miraron con una ceja alzada lo harían si era necesario. Amm sintió sus mejillas sonrojarse.

— Está bien, comeré — dijo con una sonrisa y tomo una rebana comenzando a comerla.

Helios miro a Viktor y le sonrió como agradecimiento, Viktor solo sonrió de lado y le guiño el ojo.

La demás siguieron conversando y riendo de tonterías, era una linda tarde todo marchaba muy bien, ¿Que podría arruinarla?.

Después de una hora los tres se separon y estaba feliz, Viktor camino a su hogar su cabeza está llena de pensamientos felices, ¿hace cuánto no estaba feliz? No lo recordaba, faltaba poco para llegar a su hogar y eso le desanimaba.

Llegó a aquella gran casa que lucía desolada y muy callada, frunso los labios y toco la perilla y comenzó a llenar su cabeza de ideas, ¿De verdad quería entrar?

— Muérete...

Sus ojos se abrieron, no quería entrar, sus labios temblaron y se abrió la puerta de golpe mirando a su madre.

—¡¡Viktor!! — grito mi madre, el azabache la miro atónito.

— ¿Dónde mierda estabas Viktor? — comento su progenitor con aquella molesta y gruesa voz, sostuvo su brazo.

— ¿Acaso te importa Lance? — escupió con molestia y soltó su agarre para entrar a su casa, su padre gruño.

Estaba harto de su padre ¿pero que más podia hacer?

— ¡Viktor Bloch! — el mencionado se volteo molesto y sintió como su mundo se detuvo al sentir el puñetazo de su padre en su cara.

Lo miro desde el piso con rabia mientras sujetaba su mejilla, la rabia que acumulaba desde hace mucho,todo el estrés sus ganas de llorar,apretó sus labios y sintió su vista nublarse otra vez no...

¿Ya había dicho que odiaba mi vida?

Hola ¿Cómo están?Espero que bien, espero que sigan leyendo esta historia rara pero muy rara, espero que disfruten está historia bay bay :3

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Hola ¿Cómo están?
Espero que bien, espero que sigan leyendo esta historia rara pero muy rara, espero que disfruten está historia bay bay :3

Un jodido día más Donde viven las historias. Descúbrelo ahora