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•Siempre era un niño llorón que no soportaba ni el más mínimo síntoma de resfriado,más con el pasar de los años comencé a soportarlo y callar cuando los tenía, más esta vez fue diferente a todas las demás, hoy simplemente no pude soportar todo el dolor que llevaba soportando desde hace tiempo y fue la experiencia más desagradable que tuve ¿por qué? Fácil.. alguien que conozco me vio de esa manera tan patética.
Arranco la hoja con la poca fuerza que poseía de su libreta y la hizo bolita para lanzarla en alguna de las esquinas de su lugubre habitación, se dejó caer en la silla de su escritorio limpiando su nariz con un pañuelo, si...había regresado a casa pero a qué costó? Su madre lo regaño por su estado tan deplorable por el que sus amigos lo trajeron, paso la mano por su cabello, tocaron la puerta y el se levantó para abrirla un poco exhausto.
— Baja a comer algo — hablo con seriedad su madre, el miro el piso un poco incómodo y asintió.
La señora bajo las escaleras y detrás de ella iba Viktor mirando el piso, se sentía un estorbo para su madre, ambos llegaron al comedor y Viktor tomo asiento mirando un vaso de agua y un par de pastillas, la azabache dejo un plato de sopa en la mesa delante de Viktor y tomo asiento frente suyo.
Y ahí estaba otra vez ese sentimiento de vacío... Tomo la cuchara entre sus dedos y la llevo a su boca un poco de la comida, sentia la mirada incomoda de su madre quien solo bebía un café, suspiro y siguió comiendo un poco incómodo.
— Desde cuándo estás así Viktor? — hablo con seriedad posando sus labios en la taza, Viktor miro el tazón de sopa y miro a otro lado.
— Desde ayer... — murmuró algo incómodo, solo se escuchó un sonidito como respuesta.
Apretó sus piernas un poco y comenzó a sentir tan observado como si fuera un maldito monstruo que asqueaba a su propia madre, clavo sus uñas en su pierna mirando el tazón, sintiendo unas cuantas náuseas, se sentía indefenso,se sentía perdido... El sonido de las llaves lo hizo voltear y mirar con temor a la puerta.
Mirando a su padre entrar junto a su tío pero sin Vía, varios escenarios hizo su cabeza al notar eso comenzando a sentirse asfixiado, su tío lo miro y sonrió un poco para darle confianza a su sobrino.
— Viktor — lo llamo su padre pero el mencionado no logro articular una palabra solo haciendo un sonidito de duda.
— ¿Por qué tiraste tu medicamento? Debes tomarlo — dijo su padre con cierto enojo,Viktor miro el plato con seriedad.
— ¡Viktor! Contesta — dijo más serio y enojado, Viktor lo miro con enojo.
— Tranquilo Vik, solo queremos saber que te orillo a eso — acaricio su espalda dándole un poco de calma.
— No las necesito Lance — hablo serio, sin quitar sus apagados azulejos de su padre.
— No te comportes como un niño, los tomarás quieras o no — dejo un nuevo frasco en la mesa y subio las escaleras mientras se escuchaba un puertazo, su madre solo suspiro levantándose de la mesa llendo a la cocina,su tío le sonrió.
— Tranquilo vik... Solo tómalo y ya no te dirá nada — beso su frente con una sonrisa y fue detrás de su madre.
Se quedó callado escuchando a su tío y a su madre "Que se supone que debería decir? Viktor no me hará caso, nunca puedo tratar con ellos" Viktor solo suspiro tomando su medicamento para subir las escaleras e ir directo a su habitación.
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Un jodido día más
Random¿Qué pasa cuando has sufrido por varios años y sabes como controlarte y de pronto por un maldito descuido todo se acabe? Y por ese descuido su mundo se arruine y se convierta en un jodido día más. (Créditos al autor o autora o autore de la fotograf...