Capítulo 1

830 81 29
                                    

No More Masks

By KouriArashi

By KouriArashi

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Capítulo 1

Meng Yao aprendió temprano que el mundo era un lugar brutalmente cruel y arbitrario.

Lo aprendió mientras jugaba en el piso de tierra de la choza donde vivía con su madre, viéndola llegar a casa con moretones. Lo aprendió mientras ella servía con cuidado la sopa que había hecho y él comía obedientemente cada bocado y lamía el cuenco y luego trataba de ignorar las punzadas de hambre en su estómago. Lo aprendió cuando jugaba con otros niños en la calle y escuchó a los padres chismorrear sobre cómo era el hijo bastardo de una prostituta, cómo tenía un hermano que vivía una vida de lujo y mimado, cómo su padre había engendrado a decenas de hijos para que se pudrieran ellos en la pobreza con sus madres.

Lo aprendió cuando trató de defender a su madre de las palabras desagradables y se encontró con risas o violencia. Lo aprendió cuando trató de ganar algo de dinero extra para ayudar a comprar comida solo para ser intimidado y estafado. Lo aprendió cuando decidió ir a la escuela para aprender a leer y escribir y se burlaron de su ambición y arrogancia.

Sobre todo, lo aprendió al pie de los escalones de la Torre Koi.

Se volteo y se inclinó ante el hombre que lo había engendrado y juró en ese momento que le iba a enseñar a Jin Guangyshan el significado del dolor.

Tenía catorce años.

Pasaron los años y el odio en el pecho de Meng Yao se convirtió en un jardín de amargura y resentimiento que cuidaba cuidadosamente todos los días, regado con el desdén de los hombres de Nie Mingjyue, fertilizado con los chismes en las calles de Q...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Pasaron los años y el odio en el pecho de Meng Yao se convirtió en un jardín de amargura y resentimiento que cuidaba cuidadosamente todos los días, regado con el desdén de los hombres de Nie Mingjyue, fertilizado con los chismes en las calles de Qinghe.

Aprendió a sonreír a pesar de todo, a volverse tímido e inofensivo, a hablar con elocuencia y ocultar su rabia. Aprendió que el desprecio de los demás podía usarse como arma contra ellos, que podía escudarse con sus opiniones equivocadas sobre él, que si lo despreciaban, nunca lo verían venir.

No More Masks [TRADUCCIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora