Capítulo 13

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"Tu padre estuvo más agradable de lo habitual" dijo Alba "Realmente parecía que le gustaba la idea del Kidz Kamp" "Especialmente cuando se enteró que estaba pagando por ello" respondió Natalia con una sonrisa. "¿Cómo iba a saber que no se lo habías dicho?" "No hay problema. Él ya no se mantiene al día con los libros. Y he dejado de decirle todo lo que hacemos en las operaciones. Él sólo se preocupa por eso y sin necesidad. Tenemos todo bajo control" 

Natalia se dirigía a su casa en Bel Air, donde Alba había dejado su coche después de venir directamente del trabajo. "En serio, parecía muy interesado en escuchar acerca de este programa" dijo Alba "Y se emocionó cuando Diego se ofreció a llevar a algunos de los chicos en el barco. Incluso dijo que podría acompañarlos" "Me gustó la parte en la que le dijiste que los niños estarían menos propensos a robar BMWs, si tenían una imagen positiva de los propietarios" "Esa fue una escandalosa mentira que inventé ¿No crees que en realidad me creyó, verdad?" 

 Cuando fue invitada a sentarse junto a la piscina con Mikel y Martina, Alba se sintió atrapada rápidamente y pensó que estaba en una especie de silla caliente. Ella hizo lo suyo, decidida a ganarse al padre de Natalia, si no con su agradable personalidad, entonces con su sardónico sentido del humor. Este último parecía haber tenido un mejor efecto. "Antes de irnos, les dije que regresaría una noche de esta semana para hablar" "Eso significa mañana por la noche ¿no? ¿No te vas el miércoles a Carolina del Sur" "Sí, supongo que sí" "Y no vas a volver hasta el domingo" dijo Alba con tristeza. Su cerebro ya había almacenado el hecho de que Natalia no estaría el sábado, en su trigésimo cumpleaños. "Mi avión llega a las seis. Si me recoges en el aeropuerto, me comprometo a compensártelo" "No lo sé. Estaré muy vieja para entonces. Probablemente no debería estar conduciendo por mí misma" a Alba no le gustaba escucharse de mal humor, pero estaba decepcionada de que Natalia se perdiera la comida al aire libre que María y Susana habían planeado para el sábado en la tarde. Hubiese sido una gran oportunidad para que Natalia conociera a sus amigas "Todavía no entiendo por qué te vas" "Estarán presentando los próximos modelos del año siguiente" "Creí que a eso habías ido a Alemania" "Eso fue diferente. El centro de diseño en Múnich, nos mostró cómo se verían la próxima generación de coches, pero eso será dentro de tres o cuatro años. Ya he visto estos coches en Carolina del Sur, pero hay que echarles una última mirada a los cambios, antes de sacarlos a la venta" Alba amaba la entonación de orgullo en la voz de Natalia cuando hablaba de sus coches. Siempre le hacía sonreír recordar que una ingeniería mecánica nerd residía en esa hermosa caparazón "¿Segura que no quieres esperar hasta que regreses para hablar con ellos?" Natalia suspiró "No lo sé. Hay algo atractivo en dejarles caer la bomba y salir corriendo fuera de la ciudad durante cuatro días" "Puedo verlo" y cuando regresara de su viaje, no habría más barreras "¿Qué vas a decirles?" "Que te amo...que tengo la intención de estar contigo, les guste o no..." ella resopló "...y que no he perdido la razón" "Y luego ¿qué?" "Y luego hablaremos del bebé de Elena y de Diego. Eso debería dejarlos de buen humor"





Una esquina completa de la oficina de Natalia en Premier Motors, estaba dedicada para poner en orden los registros de la Cámara de Comercio, después de dos mandatos consecutivos, estaba feliz de pasar el cargo al tesorero entrante. Había sido un año muy ocupado para la Cámara, especialmente mientras las empresas continuaban recuperándose del terremoto. Natalia sabía que había dado una buena impresión en los miembros, con quienes tuvo trato directo. Varios estaban presionando para que se postulara por la vicepresidencia el próximo año, lo que supondría un ascenso automático para ser presidente el año siguiente. 

 "Natalia, ¿tienes un minuto para tu viejo?" su padre asomó la cabeza por la puerta de su oficina. "¿Tienes una cita?" le preguntó medio en broma. Miró su reloj, ya se sentía abrumada por las cosas que necesitaba terminar esta tarde, antes de salir mañana por la mañana. Había decidido postergar la conversación con sus padres acerca de Alba hasta regresar, ya que Elena le había llamado para ver la casa perfectadespués del trabajo. "Puedo volver más tarde si lo deseas" fue casi cómico verlo hacer un puchero. "No, tonto. Siempre tendré tiempo para tí" 

Shaken- AlbaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora