Esta vez no les dije nada a mis amigas, no es que no les tenga confianza solo es que ese momento era mío, solo era él y yo y quise guardarlo para mí.
***
Estoy en la cafetería, es medio día y el día es tranquilo, un par de mesas llenas pero nadie en mi barra así que me recargo en ella mirando hacia la pared, cuando tomo mi celular y miro mi instagram un momento y no puedo creer lo que veo.*Sebastián Stan le ha dado me gusta a tu foto*
Mis ojos se abren con asombro al igual que no puedo cerrar mi boca por tremenda noticia, e instantes después otra notificación.
*Sebastián Stan ha comenzado a seguirte*
Oh por Dios, no lo puedo creer, en serio no se cómo puedo expresar tal emoción y solo escucho la campana sonar al abrir la puerta de la cafetería y ruego a Dios que no sea él... Bueno si, en el fondo si quiero que sea él pero también estoy aterrorizada y solo escucho una voz que me hace girar.
-Fue algo difícil encontrarte ¿Sabes?- Dice Sebastián moviendo su teléfono con su mano y después lo guarda en su bolsillo del pantalón- Pero no tanto.
Yo solo lo puedo mirar perpleja, ¿Qué, cómo es esto posible? Me encontró, él me buscó a mi, era mi primera vez porque yo siempre he sido la que tiene que buscar, siempre he sido la agente del FBI por encontrar lo que buscaba.
-¿Qué?- Solo puedo decir eso.
-Si espero que no te moleste que te haya buscado- Contesta Sebastián con una sonrisa y en ningún momento sus ojos azules se apartaron de mi.
-Ah no, de hecho yo también te estaba buscando haha- Suelto una risa algo nerviosa y obviamente estoy mintiendo, carajo en serio no se me ocurrió buscarlo, me ganó esta vez.
-Si, ¿oye estás ocupada?- Pregunta recargandose en la barra. Y eso me mató, me miraba fijamente y se miraba tan seguro de sí mismo, con tanta confianza.
-Ammm, no de hecho no.
-Bien ¿Te parece si platicamos un poco? - Gira su cabeza un poco y me sonríe.
-¿Y que estamos haciendo entonces? - Me río un poco y el sólo agacha su mirada y ríe.
-Cierto... ¿Te puedo decir algo? - Sebastián me mira fijamente y algo serio.
-Si, dime- Lo miro y no puede ser, si, si ya se me va a declarar, si o sea que otra cosa y trato de contener mi emoción.
-¿Estás bien? - Me mira y yo solo giro mi cabeza mirándolo confundida.
-Si, ¿Por qué lo preguntas?- Digo desconcertada
-Si lo digo, por qué un día.... En el parque... Una mañana que estabas con Nina y su correa...- Sebastián me ve y se le forma una ligera sonría pero no una de burla.
-Noo- Lo miro esperando que no sea lo que estoy pensando- No me digas que...- Creo que si es lo que estoy pensando y el solo asiente sonríendo- ¿Me viste?- Pregunto cómo en un susurro mirando a otro lado pero el me escuchó y giro hacia él- No puede ser, no, no me viste- Solo puedo sentir la mayor vergüenza de mi vida, el hombre que me gusta me vio tropezarme porque mi perra me tiró, me llevo las manos a mi cara.
El solo ríe, pero de una manera linda y comprensiva.
-Oye, oye- Dice de una manera dulce tratando de calmarme, pone sus manos en las mías, tratando de hacer que las quite de mi cara.
Me quejo un poco, mirando hacia abajo con una sonrisa, lo volteo a ver y me está sonríendo y eso me hace sentir mejor. Pero no tanto por qué puedo sentir y se que estoy roja como un jitomate.
-Si, te vi tropezarte, quise ir ayudarte pero ya te habías ido- Responde y eso me mata de ternura.
-¿En serio?- Pregunto y el asiente- Bueno gracias, supongo- Sonrió por vergüenza y siento mi cara arder.
-Te ves linda cuando te sonrojas- Me mira y me sonríe.
-Por favor no hagas esto- Le digo negando con mi cabeza, me agachó sujetando mi cara con mi mano y solo le sonrió- Gracias- El asiente y me sonríe.- ¿Yo también puedo decirte algo?.
-Si, claro lo que tú quieras.
-Tienes unos ojos muy bonitos- Al decirlo se me forma una sonrisa de tonta enamorada y es que pensándolo bien, tiene los ojos azules más hermosos, tan hermosos que te pierdes en ellos.
-Ah, gracias, tu tienes unos hermosos ojos- Me mira atentamente y eso ocasiona que yo sonría-¡ Y Oh... Mira! también tienes unos hermosos hoyuelos en tus mejillas cuando sonríes- Sebastian dijo con una fascinación y ternura, señaló mis hoyuelos y tocó mis mejillas mirando atentamente a mi boca.
Eso ocasionó un silenció, donde el miraba mis labios y yo lo miraba atentamente, cambiaron nuestras sonrisas por seriedad, después miro mis ojos y yo los de él, miro mis labios y yo los de él.... Y creo que va a pasar lo que estoy pensando... Joder es el momento de nuestro beso y estoy segura que hubiera pasado si no fuera por qué Violeta me llamo y ocasionó que yo me separará prontamente de él.
-Mara necesito tu ayu... -Violeta no terminó porque se dio cuenta de la situación pero fue tarde porque ya lo había arruinado.
-Si ya voy- Giro hacia Sebastián mirándolo- Tengo que... Ir- Señaló hacia Violeta.
-Emmmm... Si, supongo que te veré pronto hoyuelos....- Sebastián se levanta sin dejar de mirarme con una sonrisa.
-Si te veré pronto ojos bonitos- Le respondo su cumplido y el se retira, camina hacia la puerta y se gira a verme y yo le despido con mi mano, el sonríe y se sale de la cafetería.
Violeta se acerca a mí y con una cara de pena me abraza.
-Lo siento tanto Mara... Arruine todo.
-Esta bien, supongo que habrá otra ocasión- Le respondo con una sonrisa desanimada y seguimos con nuestras labores
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Admiradora- Sebastian Stan Y Tú
RomanceMara es una chica que trabaja en una cafetería, una joven de 25 años apasionada y una romántica empedernida que cambia su vida al ver al hombre de sus sueños Sebastian stan y tú, sumérgete en un universo alterno donde te enamoras de este hombre