Moonfairy [Minimoni]

3. Hada + Humano inhumano

—¿Que demonios?

Susurró incrédulo y se frotó los ojos con la mano libre para traer de vuelta a sí la lucidez porque lo que veía no podía ser real.

—¡Eres un maleducado! ¡Un irrespetuoso! ¿No te han enseñado valores en tu casa?

Insultaba el diminuto ser, con una voz excesivamente aguda, que pudo irritar a Namjoon, pero éste estaba en completo shock. Un ser viviente y más impresionante aún, un ser pensante, ridículamente pequeño, vestido con ropas ligeras blancas a juego con su piel y aunque era incapaz de detallar sus rasgos, era obvio que era bonito.

Namjoon examinaba su pequeño cuerpo sin poderlo creer, algo tuvo sentido cuando se dio cuenta de las alas plateadas que sobresalían de su espalda, jadeo sorprendido.

—¿Que demonios eres?

Preguntó el castaño haciéndole saber a aquel ser que no estaba escuchando sus quejas en lo más mínimo.

—¿Es en serio? —Se cruzó de brazos el ser mágico —Soy un hada y tu eres un humano, inhumano y con pésima vista

El hada comenzó a hablar sin parar de nuevo pero para Namjoon era solo ruido blanco, con el aliento fuera de su cuerpo pero con una emocionante curiosidad se acercó a su propia mano donde permanecía el hada gesticulando inquieto y enojado, nunca había visto algo tan maravilloso y único como ese ser y sus preciosas alas.

Llevó su dedo hasta una de sus alas y al instante en que su piel hizo contacto con ella, una fuerte descarga eléctrica descendió por todo su cuerpo haciéndolo gritar y caer al suelo por la intensidad de la carga.

—Eso te pasa por andarme tocando, muy muy mal

Reprochó el hada volando justo encima de su rostro, Namjoon negó rápidamente recuperándose del pequeño incidente y se sentó cruzado de piernas, seguía fascinado a pesar de todo.

—¿Como llegaste aquí?

Preguntó Namjoon sin quitarle la vista al diminuto rubio que seguía con el ceño fruncido.

—¡Reventaste mi burbuja, bueno para nada!

Namjoon asintió entendiendo los puntos pero enseguida le miró con desconfianza

—¿No se supone que las hadas sean buenas y puras? —El hada asintió sin dudas —¿Entonces porque me insultas?

—Somos buenas y puras, no perfectas. Y yo, en particular, poco tolerante con los malos

—No soy malo. —Namjoon negó firmemente.

—¿Entonces porque destruiste mi casa, malhechor?

—¿Ahí vivías? ¿De dónde vienes? ¿Que se supone que haces aquí? ¿Las hadas no deberían vivir en un mundo mágico o algo parecido?

Atosigo Namjoon, pero no tenía la culpa, estaba ansioso, curioso y con un millón de preguntas naciendo en su mente, también un poco de malestar general pero se lo podía atribuir al cansancio y la descarga eléctrica que le proporcionó el otro.

El ser se tiró en el pasto también, haciendo que Namjoon tuviera que acostarse boca abajo y a escasos centímetros de él para poderle escuchar.

—Según el tipo de hada, esta vivirá en rincones ocultos de este mundo para hacer su trabajo, porqué tenemos propósito y ese es hacer de este mundo de humanos, un lugar más bonito.

Dijo con orgullo y Namjoon miró a su alrededor en busca de lo que sea que representara un buen escondite de hadas.

—No las vas a ver, están ocultas ante el ojo humano

—¿Y porque te puedo ver a ti?

—Porque no estoy en mi hogar —Se cruzó de brazos con el enojo renovado —¡Y es tu culpa!

—Necesitas darme más explicaciones que esa... —Bufo Namjoon haciendo que el Hada suspirara cansada

—Yo soy un Hada de la Luna y... honestamente no se que hago aquí, debería estar ayudando a iluminar la Tierra de noche pero me perdí —Dijo con tristeza y miro a Namjoon acusativamente —Y ya que no tengo mi burbuja tampoco puedo regresar.

—Gran historia —Asintió Namjoon ganándose una mirada ofendida del más pequeño, miró la pantalla de su teléfono y se dio cuenta lo tarde que era —Suerte con eso, debo volver a mi casa antes del amanecer para, con suerte, dormir algo antes de mi turno.

—¡Espera! No me vas a dejar aquí —Gritó el Hada indignado siguiendo sus pasos

—¿Que esperas que haga? —Preguntó Namjoon estresado, efecto de haberse acordado de su vida diaria y sus deberes.

—Espero... No ¡Exijo! Que me proporciones un nuevo hogar.

A Namjoon se le cayó la quijada, no podía cargar adecuadamente con su vida, definitivamente no podría con otra.