Tiago volvió a casa con un par de chupones en el cuello y el vestido roto, inmediatamente fue a cambiarse y volvió para escuchar el plan y lo que íbamos a hacer.- L: Tomás va a ir al gimnasio a la vuelta de su casa a eso de las dos de la tardé -dije mostrando fotos del gimnasio y varias de Tomás entrando ahí siempre el mismo día, a la misma hora- seguí vos duko
- D: esta convencido de que lo amas, de que darías tu vida por él y lo más importante, esta convencido de que jamás le harías ningún tipo de daño -dijo y soltó una risita- aunque le apuntes directamente a la cabeza no va a tener miedo
- Tiago: resumiendo, pelotudo, pito chico con complejo de Dios -dijo y le dijo la razón-
- T: yo voy a preparar el equipo -dijo Mateo-
Cada uno se fue a trabajar, menos Tiago, él estaba sonriendo y no paraba de suspirar enamorado.
- L: siento que me queres contar -dije y gritó emocionado- dale veni
Corrió y se sentó en un sillón que estaba cerca de mi mesa, no paraba de sonreír y me daba ternura.
- Tiago: cogimos en la camioneta -dijo- y antes de que empieces no manchamos nada, usé forro y no lo hipnotice para que diga que me ama
- L: ¿dijo que te ama? -pregunté y negó- ¿y vos pensas que te ama?
- Tiago: obvio me ama -sonrió- este si es mi hombre, gracias por escuchar
Se fue corriendo y pegando saltitos, Dios, le van a romper el corazón.