HEY TEACHER ; jaywon

#29

Jungwon había sido depositado sobre su cama con delicadeza, para luego comenzar a ser desnudado por el mayor. Todo el ambiente silencioso, la mirada concentrada en su cuerpo por parte de Jay y las caricias que este dejaba de vez en cuando por la piel que ya había sido descubierta, lo hacían sentir completamente excitado... y aterrado. Porqué justo delante de sus ojos, se encontraba el pantalón de su profesor desabrochado y con el cierre abajo, dejando ver la enorme y dura erección que permanecía escondida bajo sus boxers apretados.

Tragó saliva siendo consciente de lo que vendría minutos después, lo había fantaseado múltiples veces, se había dado el tiempo de investigar todas las precauciones que debía tener para no salir lastimado en su primera vez, pero aún así sentía que el corazón se le saldría por la boca en cualquier momento por culpa del nerviosismo.

Sintió un escalofrío recorrer su espina dorsal cuando su camisa fue completamente retirada y suaves besos comenzaron a ser repartidos por cada parte de su cuello y torso. Las manos de su profesor se posicionaron sobre sus hombros y fue empujado para caer completamente recostado sobre el colchón de su cama. Jungwon se mordió con fuerza el labio inferior al sentir como sus rosados botones habían sido atrapados por la boca y dedos juguetones del mayor, quién no tardó en morderlos y chuparlos con dedicación por un par de segundos, para continuar deslizando su boca hasta alcanzar los pantalones del menor. Los deslizó con facilidad, dejando solo sus adorables calzoncillos con azules con pequeñas lunas cubriendo la parte inferior que necesitaba ser estimulada con desesperación.

-¡COMPASIÓN!- Gritó Jungwon retorciéndose aterrado, cuando su ropa interior comenzó a ser retirada por los fríos dedos de su profesor quien solo le dirigió una mirada de confusión. El muchacho tragó saliva asustado, no quería quedar en silla de ruedas, ni mucho menos ser partido en dos por semejante barbaridad que escondía el universitario. Y estaba claro de que si se dejaba llevar por el momento, una de las dos anteriores situaciones sería su destino- ¡Compasión por mi joven e inexperto cuerpo!

Jay dejó escapar al menor solo para poder comenzar a reír. Jungwon lo observó molesto mientras volvía a colocar sus calzoncillos en su lugar. Debía admitir que amaba sentir las manos de su profesor recorriendo los rincones más sensibles de su cuerpo, pero también amaba poder caminar y sentarse sin dolor. No quería que su columna se rompiera por el salvajismo del mayor, cuando vio la mirada cegada por el deseo de Jay se sintió como si estuviera a punto de ser cazado por un enorme león. Tragó saliva cuando vio a su profesor recostarse a su lado, para luego rodear con sus brazos su espalda desnuda.

El calor inundó su pecho y miles de sensaciones se apoderaron de él al sentir su cercanía. Jay se deslizó sobre la cama, logrando acurrucarse entre su cuello y hombro, rozando su suave piel con los labios.

-Siento mucho que hayas temido por tu joven e inexperto cuerpo, no quería que te sintieras asustado ni mucho menos presionado- Jungwon se estremeció al sentir cada palabra del mayor rozar su cuello. Y su corazón se disparó cuando sus brazos lo atrajeron aún más a su cuerpo- No es necesario llegar hasta el final hoy. Podemos recostarnos aquí y relajarnos... Solo quiero que sepas que no es necesario apresurarnos, quiero que sea un momento que podamos compartir juntos y que puedas disfrutarlo.

Jungwon apretó sus labios intentando contener sus lágrimas. ¿Estaba bien sentirse tan querido en ese momento? ¿Tanto le gustaba a su profesor?

-Tu... ¿Tuviste muchas parejas? ¿Alguna vez te sentiste enamorado?- Preguntó el menor, alzando las manos para poder acariciar los cabellos de su profesor. Quería saber tantas cosas de él, conocer su pasado, sus pensamientos, hobbies, gustos musicales, número de mascotas, sueños, metas... ¿Pero estaba bien entrometerse en su vida de esa forma? ¿Tenía derecho a preguntarle o su profesor se molestaría?- No es necesario que respondas si no quieres.