HEY TEACHER ; jaywon

#23

La biblioteca de la escuela se encontraba en otro edificio dentro del recinto escolar, era una construcción bastante vieja rodeada de arbustos y pequeñas bancas donde algunos estudiantes iban a almorzar o toma aire fresco. Jungwon rodeo la entrada y caminó hacia la parte trasera con la esperanza de ver al universitario del que no había tenido señales de vida en los últimos días, su corazón latía fuerte en su pecho por la pequeña ansiedad que le producía el verlo otra vez luego de su última conversación y el cobarde escape de su parte la semana anterior. 

Fue entonces que lo encontró, Jay sonreía de manera relajada mientras parecía mantener una conversación con Sunghoon. Jungwon frunció el ceño al no saber como esos dos se conocían, pero se quedó en silencio observando sin saber si debía interrumpir en su conversación, después de todo no tenía ninguna excusa en mente para llamar a su profesor y hablar con él. El muchacho salió de sus pensamientos en el momento en que notó como Jay se llevaba el cigarrillo a sus labios para luego inclinarse hasta el pretendiente de Jake y susurrarle algo en el oído con una sonrisa en los labios, mientras que Sunghoon pareció sonrojarse y darle un ligero golpe en el hombro. El profesor pareció divertido al recibir tal respuesta, por lo que se apartó casi al instante. Pero fue entonces que la mirada del mayor se dirigió hasta la presencia de Jungwon quién se encontraba inmóvil presenciando la extraña cercanía entre ambos. 

Jungwon estaba demasiado confundido en ese momento para saber como reaccionar, en su mente solo se repetía esa extraña actitud que hubo entre ambos momentos atrás y como la expresión de Jay había cambiado repentinamente al verlo. ¿Es que acaso no quería ser descubierto coqueteando con otros estudiantes? ¿O ahora que Jungwon había finalizado las cosas entre ambos, inmediatamente buscaría pasar el tiempo con otro chico? Después de todo, su profesor había pensado exactamente eso al verlo el día antes con Sunoo... ¿Acaso se molestaba porqué él era así? 

Habían demasiado pensamientos acumulándose en la cabeza de Jungwon, y esto Jay pareció notarlo, porqué segundos después se aclaró la garganta haciendo que el pelinegro junto a él también se volteara. 

Jungwon apretó con fuerza los puños en el segundo en que vio como las mejillas de Sunghoon permanecían enrojecidas por el desconocido comentario que le había murmurado el profesor. 

¡Oh, no! ¡Con mi hombre no!  Pensó el de lindos hoyuelos sin importarle mucho que ambos notaran su molestia. 

-Oh, Jungwon, hola. ¿Qué haces aquí?- Preguntó Sunghoon sin saber que en la mente de Jungwon, él ya estaba siendo golpeado brutalmente. Ya que si bien le dolía la actitud del mayor, más le molestaba la idea de que su amigo Jake pudiera ser lastimado. Por otro lado, Jay parecía no querer quedarse inmóvil en aquella extraña situación, decidió acercarse al muchacho que parecía estar a punto de estallar de rabia pero se sorprendió cuando el menor pasó por su lado sin siquiera dirigirle una pequeña mirada. 

-Sunghoon- Respondió Jungwon con un tono de voz bastante amable, el cual desapareció casi al instante. Se colocó de puntillas y tomó el cuello de la camisa del pelinegro para acercar su rostro al suyo y poder mirarlo directamente a los ojos- Escucha atentamente mis palabras. Espero estar malentendiendo la situación en estos momentos, porqué tu lastimas a Jake de alguna forma, te encontraré y te asesinaré con mis propias manos. ¿Has entendido? 

Sunghoon confundido por todo aquello prefirió asentir rápidamente por el drástico cambio en la actitud del muchacho de lindos hoyuelos.

El mayor, quien se mantuvo en silencio durante esos segundos observando la situación, estuvo a punto de soltar una risita. Ese estudiante definitivamente era una caja de sorpresas.

-No tengo idea de que está ocurriendo aquí, pero es mejor que me vaya... Adiós Profesor- Dijo el chico antes de escabullirse rápidamente lejos de aquél lugar escondido detrás del enorme y viejo edificio perteneciente a la biblioteca de la escuela. Jungwon soltó un suspiro y deslizó la palma de su mano por sus cabellos castaños, lo que menos le importaba en esos instantes eran sus sentimientos. Estaba mucho más preocupado por Jake... realmente haría pagar a ese playboy.