Founding the real color ♡̶ WoMin

08

Pisadas apresauradas se escuchaban por el pasillo que daba a la salida de la empresa. Ya casi eran las tres de la tarde y Jimin debía llegar rápido a su auto para cambiarse de ropa y transformarse en Hye Jin, su versión femenina.

TaeHyung lo había invitado a comer, pero le había platicado todo el asunto de la comida con WonHo, por lo que no podía quedarse porque... debía estar en otro lugar luciendo como mujer.

"De allí saldrán dos corazones rotos Jimin, no solo uno." Fueron las palabras de su mejor amigo, suspiró, sabía que era verdad pero solo quería disfrutar un rato de la vida, del amor, de salir sin problemas con un chico.

Entró a su auto y revisó que la bolsa de ropa estuviera en el asiento trasero, cuando divisó esta sonrió suave y metió la llave en la ranura para prender el auto.

El lugar donde comerían no estaba tan lejos, estaba a una perfecta distancia para llegar a tiempo, eso si no tuviera que cambiarse de ropa.

ㅡBien Jimin, tendrás que cambiarte en tiempo récord, quedan solo diez minutos para las tres. ㅡdijo estacionandose y pasando a la parte trasera del auto.

Agradecía haber traído ropa de más, pues usó estas prendas para ponerlas en la ventana y que la gente no pudiera ver de afuera hacia adentro.

Se quitó el saco, la camisa y el pantalón, sonriendo un poco al ver su blanquecina piel la cual lucía muy suave.

Agarró un vestido azul marino de seda que había traído, este se amoldaba perfectamente a su cuerpo pero sin lucir ajustado, se puso un abrigo algo afelpado y de color blanco.

Le encantaba lucir bonito, elegante pero sentirse cómodo.

Por último se puso unas zapatillas de color blanco, el tacón no estaba tan alto ni puntiagudo, por lo que sus pies no dolerían mucho después.

ㅡAhora viene la parte difícil... el maquillaje y la peluca. ㅡdijo mientras metía toda la ropa sobrante en la bolsa que había llevado y sacaba su largo pelaje rubio.

Sacó todo lo que necesitaba y comenzó a ponerlo en su rostro, aunque realmente no era tanto, pues le gustaba lucir natural, eso sí, sus labios siempre debían llevar un bálsamo rojo con brillo, sabía que estos se veían realmente bien.

Puso la peluca con un poco de dificultad por el espacio tan reducido que tenía para moverse, pero eso no le impidió conseguir su cometido.

Después de algunos minutos miró el reloj, se apresuró al ver que eran las tres en punto. Guardó todo y se pasó con cuidado a la parte de adelante, apagó el aire acondicionado y se miró nuevamente por el pequeño espejo del retrovisor.

ㅡBien, estoy listo... lista. ㅡsonrió un poco, dándole algo de humor a la situación.

Bajó del auto siendo ahora Hye Jin, cerró la puerta de este y caminó hasta la entrada, entró y miró hacia los lados para ver si podía encontrar al apuesto hombre con el que se vería.

Sonrió en grande al verlo sentado en una de las mesas, con el traje que ya sabía que llevaba, pues minutos antes lo había visto en el trabajo.

WonHo sonrió aún más al ver a la preciosa dama frente a él, se levantó de su asiento e hizo una pequeña reverencia.

ㅡMe da mucho gusto verte de nuevo, Hye Jin, luces preciosa. ㅡdijo agarrando su mano y dejando un pequeño y casto beso en esta.

Jimin sonrió, sonrojandose sin poder evitarloㅡ. Usted no se queda atrás, señor Lee, es muy apuesto.

Hoseok sonrió alagado y jaló una de las sillas para que Jimin se sentara, el contrario agradeció y ambos se miraron sonrientes.

ㅡ¿Cómo ha estado su día? ㅡpreguntó Lee.

ㅡAlgo cansado a decir verdad, he tenido mucho trabajo. ㅡdijo sincero mientras sentía como su cuerpo se destensaba un poco.

ㅡOhh, pero el lado bueno es que hay trabajo, ¿no? Que por cierto, perdone si sueno muy impertinente pero, ¿a qué se dedica?

Jimin pensó por unos segundos, no sabía si decir diseñadora gráfica, y ahora que recordaba, tampoco podía hacerle saber al muchacho que era daltónico, daltónica, je.

ㅡTrabajo en una empresa como contadora. ㅡdijo sonriendo y queriéndose reír un poco, pues ese era el trabajo que sus padres habían querido para él.

ㅡOhh, interesante. ㅡsonrió.

En ese momento llegó el mesero, Jimin pidió un plato de ensalada y un jugo de carambola, mientras Hoseok pidió un corte de carne con una copa de vino.

ㅡ¿Y usted a qué se dedica?

ㅡ¿Yo? Bueno, como tal no vivo aquí en Corea, vivo en China.

Jimin se sorprendió, eso no lo sabía.

ㅡ¿Pero... entonces usted no es coreano? Debo decir que estoy sorprendido, sorprendida, estoy muy sorprendida, su coreano es muy bueno. ㅡdijo sonriendo con un toque de nerviosismo.

«Es su primer encuentro formal y casi la riegas, tonto», pensó.

WonHo rió suave y Jimin sonrió, Dios, hasta riendo se veía tan jodidamente bien.

ㅡSí soy de aquí, pero mi familia se fue a China después de la posguerra por lo que crecí en China, pero he venido a Corea debido al convenio con una empresa. ㅡexplicó.

ㅡOhh, ya entiendo, entonces ¿por cuánto tiempo planea quedarse? sería una pena que se fuera tan rápido. ㅡdijo con un deje de desilusión, tanto de parte de Hye Jin como de Jimin.

Lee sonrió suave, sinceramente él tampoco sabía con exactitud, porque por el convenio sería aproximadamente un mes, tal vez dos, pero si las cosas resultaban bien con la dama que tenía frente a sus ojos, ¿sería capaz de dejarlo todo y quedarse en Corea?

ㅡNo puedo asegurarle nada, señorita Hye Jin, pero... ㅡacomodó su saco y agarró la mano del menorㅡ. Lo que sí le puedo asegurar, es que estoy bajo sus encantos y me gustaría seguir frecuentandonos, conocernos más. ㅡdijo con una linda y sincera sonrisa.

Jimin sonrió, sintiendo sus mejillas calientes y su estómago lleno de mariposas.

ㅡA mi tambien me encantaría eso, señor Lee. ㅡdijo sonriendo con una pizca de timidez.

WonHo sonrió, feliz de haber encontrado a tan hermosa alma.

Después de eso y de algunos minutos más, el mesero llegó con los platos que habían pedido, ambos agradecieron y se dispusieron a comer.

Compartían algunas palabras y sonrisas cómplices. Ambos se sentían como adolescentes enamorados, sin embargo, en la cabecita de uno seguía rondando una pregunta.

«¿Qué pasará cuando la verdad salga a la luz?»