Fairy Tail- The return of a Fairy

CAPÍTULO VI

Ya en el departamento, Nashi fue a la pequeña cocina de este y sacó los ingredientes necesarios para hacer la cena, antes de llegar a la casa fueron a comprar algunas cosas que hacían falta. Igneel entró detrás de ella y se sentó en uno de los bancos de la isla.

La cocina era pequeña, al igual que el departamento, una estufa de 4 parrillas con horno incluido; un refrigerador mediano; un grifo para lavar los trastes y una pequeña isla en medio que hacía de comedor.

-Así que tu hiciste que se fueran.- Nashi puso aceite y cebolla picada en el sartén.

-Algo así.- Igneel recargo su cabeza en la palma de su mano- Los encontré en una ida al pueblo cerca de la montaña.

Nashi no despegaba la mirada de lo que estaba haciendo, pero hacía sonidos de afirmación para que su hermano supiera que si le estaba haciendo caso.

>>Cuando llegamos Chang-sensei y yo vimos como devastaban al pueblo, entre los dos derrotamos a los soldados, estábamos ayudando a los heridos cuando el capitán llegó- Nashi dejo un plato con arroz frente a su hermano y otro junto a ella, en el medio puso la sartén con carne y verduras.- Los aldeanos huyeron a las montañas, Chang-sensei y yo peleamos contra él, la pelea duró un día o un poco más, cuando al fin logramos derrotarlo otro venía en camino. Mi poder mágico estaba casi agotado y en un descuido me hirieron, después de eso quede inconsciente. Chang-sensei me dijo que los hirió lo suficiente para llevarme al reino de los espíritus, me desperté unas horas después y ellos me curaron, cuando regresamos ya habían pasado casi el mes. Fue cuando decidí regresar a casa.

Igneel con los palillos tomó un trozo de carne y algunas verduras y las puso sobre el arroz.

>>¿Y con qué me encontré al llegar?- Igneel tomó un trozo de verdura y un poco de arroz y se lo comió- Con que mi hermana no estaba. Al principio creí que habías salido al pueblo a comprar comida ya que la alacena estaba vacía- Igneel no dejo de mirar a Nashi.- Después de unas cuantas horas me preocupé así que decidí irte a buscar al pueblo, cuando llegué me aterre al ver que este estaba completamente destruido. Te busque por todos lados, estaba a punto de entrar en pánico cuando Chang-sensei apareció y me contó que te habías ido a Fairy Tail. Estaba tan cabreado que no lo pensé y vine para acá, y cuando llegue, tampoco estabas; el destino parecía estar burlándose de mí, y mi humor no era el mejor, así que cuando me dijeron que te habías ido de misión los encerré en la lacrima y me senté a esperarte, sabía que en cualquier momento ibas a llegar.

Nashi movió de un lado a otro lo que le quedaba de arroz, estaba arrepentida de haber asustado a tal grado a su hermano, aunque no se arrepentía de haberse unido a Fairy Tail, si todo se volviera a repetir, lo volvería a hacer.

-Lamento el haberte preocupado ni-san- Nashi volteó a ver a Igneel.

-Cuando mamá se fue prometimos que siempre estaríamos juntos- Igneel bajo la mirada y apretó con fuerza los palillos entre su mano.- Pero tú te fuiste, me dejaste solo. De no haber sido por Chang-sempai yo estaría vuelto loco buscándote por todos lados.

Nashi miraba a su hermano con lágrimas en sus ojos. A Igneel le fallaba, de vez en cuando, la voz; se negaba a llorar, no había una razón, su hermana estaba sana y salva frente a él.

-Esa nunca fue mi intención ni-san- Nashi estiró su mano para tomar la de Igneel y relajara su agarre sobre los palillos.

-Eso ya no importa- Igneel alzó la cabeza y sonrió para que Nashi se relajara.- Lo que ahora me preocupa es todo lo que deben de entrenar los del gremio para no morir en el intento.

-No quieras hacerte el desinteresado Igneel-ni-san- Nashi soltó una risita- No son tan débiles, acéptalo y vive con eso.

-Aun así Nashi- Igneel volvió a tener su tono serio.- Su nivel es muy bajo a comparación al enemigo que nos vamos a enfrentar, tiene que subir de nivel y rápido, no sabemos cuando vayan a regresar.