Fairy Tail- The return of a Fairy

CAPÍTULO X

-Touya-kun, Nat-chan y yo vamos a ir a una misión. - Nashi le tendió el cartel con la misión de ayudar a unos aldeanos a proteger un barco de bandidos y piratas.

-¿Cuanto tiempo? - Igneel le regreso el cartel a su hermana.

-Máximo una semana. - Nashi guardo el cartel en uno de sus bolsillo. - La misión es de 4, y queríamos saber si quisieras ir.

-Por aproximadamente una semana no voy a tener que ver el rostro del bodoque de Touya. No gracias. - Igneel tomó su baso de malteada y le dio un trago.

-Pero Ni-San... - Nashi miraba a Igneel con ojitos de cachorro- Falta una persona para poder ir.

-Pregúntale a alguno de tus otros amigos, más de alguno va a querer ir con ustedes.

Nashi resignada, corrió hacia la mesa donde sus amigos estaban y preguntó acerca de la misión; casi sin pensarlo, Simón se ofreció para ir, Nashi asintió emocionada y fue a buscar a Touya y a Natsuki.

Mientras en la barra, Igneel movía el popote de un lado a otro pensativo. La misión que Nashi iba a tomar iba a tomar casi toda la recompensa pagar el alquiler del departamento, él también tendría que ir a una para comprar las cosas que aún faltaban en él.

De un trago se terminó el licuado y se acercó al tablero de misiones decidiendo que escoger. Una a una las misiones quedaban descartadas, ya sea porque eran misiones muy largas, o por el hecho de que eran aburridas.

- Que te parece esta - Gavy apareció frente a Igneel sosteniendo un cartel de misión.

Sus ojos se fijaron en una misión sobre rescatar unos niños en un pueblo a las afueras de Fiore, en el cartel decía que los niños estaban desapareciendo poco a poco y eso tenía preocupado a los aldeanos.

Entre más leía más le llamaba la atención la misión a Igneel.

-Si quieres puedo llevarte conmigo en esta misión- Gavy apartó el cartel del rostro de Igneel y volvió a guardarlo en una pequeña mochila verde en su espalda - Ayer la tomé antes de que alguien me la ganara, ahora iba a avisarle a Mira-san, pero si quieres puedes venir tu también.

Igneel miró a Gavy dudoso, cuando se conocieron hace unas cuantas semanas atrás ella se comportaba muy al margen con él, sólo le hablaba lo justo y lo necesario, y ahora lo invitaba a unirse con ella a una misión, algo no parecía encajar dentro de eso.

-Pero si no quieres ir, puedes seguir buscando una misión. - Gavy agarro las correas de su mochila y se acercó a donde estaba Mira. - Buenos días Mira-san, iré a esta misión.

-Muy bien Gavy. - Mira saco el libro de las misiones y empezó a anotar. - Muy bien. Ya pueden ir.

-Muchas gracias Mira-san- Dijo Igneel desde la espalda de Gavy sorprendiéndola ya que no lo había escuchado llegar. - Primero debemos de ir a mi casa por algunas cosas que voy a necesitar, aun queda tiempo.

Igneel tomo a Gavy por la mochila y la jalo para salir del gremio. Rápidamente, Gavy se repuso de la sorpresa y empezó a caminar al lado de Igneel. Diez minutos de caminata silenciosa fue lo que les tomó llegar a la casa de Igneel y Nashi, era un departamento en el segundo piso de un pequeño edificio.

-Si quieres pasar o quedaré aquí y esperar, haz lo que quieras, no tardo- Igneel abrió la puerta y fue corriendo hasta la puerta del fondo en la cual por el segundo y medio que permaneció abierta Gavy pudo ver una cama, esa en definitiva era la habitación de los hermanos.

Dando un vistazo rápido Gavy se dio cuenta de lo cuidado y ordenado que se encontraba el lugar, no pareciese que dos adolescentes vivieran solos ahí.