CAPITULO 1

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-¡No por favor!, ¡no me mates!,
Perdóname Anastasia.

- ¡CALLATE IDIOTA, EN ESTE MOMENTO NO SOY ANASTASIA, SOY CATRINA!.

- perdóname por favor, no fue mi inten...

-No lo deje terminar la frase cuando ya había pasado el cuchillo por su garganta, ese sonido tan satisfactorio, escuchar como corto su cuello y cae la sangre al suelo.

-Si Damián no se hubiese burlado de mi en el instituto, aún estuviera vivo, o tal vez no...

Estaba durmiendo cuando aquel sonido me despertó, estaban tocando la puerta de mi habitación, me levanté de la cama tan rápido que me dió un leve mareo, no le preste mucha atención ya que siempre me pasa, me dirigí hacía la puerta y la abrí para encontrarme con aquel hermoso rostro lleno de pequeñas arrugas y aquellos hermosos ojos color miel.

- hija, ya me voy al trabajo, en la cocina está tu desayuno, apúrate que se te hace tarde para el instituto

- me dió un tierno beso en la mejilla y se fue.

- Agarre mi celular para ver la hora y ¡OH POR DIOS! ya son las 8:45 y la primera clase empieza a la 9:00, pero ví algo que me dejó pensando, ¿Por qué rayos tengo una pequeña mancha de sangre en mi dedo? No le di atención, de seguro fue algún bicho que mate y dejó  un poco de sangre.

15 minutos después

¡Joder!, ¿por que me cuesta tanto colocarme unos putos pantalones?, se me va hacer tarde. Me coloque rápidamente una camisa amarilla ancha, mi favorita. Y baje rápidamente las escaleras.

Vi mi desayuno servido en la mesa, eran unos deliciosos huevos revueltos con tocino y pan, tenia tanta hambre, pero se me estaba haciendo tarde.

Vamos Anastasia, solo come rápido y ya, si no bajarás de peso, y no quieres eso.

¡Oh vocecita!, ya callete.

La voz en mi mente puede ser muy fastidiosa, pero le hice caso. Empecé a comer muy rápido, tanto que me atragante, casi muero, si lo se, soy un poco exagerada.  Termine de comer agarre mis cosas y me dirigí a mi auto...

9:25am

Iba corriendo desesperadamente por los pasillos del instituto para llegar lo más rápido posible a mi aula, cuando de repente sentí como choque con alguien.

levante mi mirada rápidamente y me encontré con un chico. -Fíjate por dónde caminas idiota- seguí mi camino hasta llegar a mi aula.

- Buen día señorita Anastasia, ¿y ahora cual es su excusa por haber llegado tarde?

- Buen día profesor Cristofer, había mucho tráfico.

- Esta bien, tomé asiento.

Al parecer el profesor de historia estaba de buen humor hoy.

Que clase tan aburrida, saquenme de aquí, me sentía tan cansada, como si no hubiese dormido nada anoche.

11:10am

Me encontraba dirigiendome al comedor, ya mi estómago rugía de hambre cuando de pronto escucho aquella voz masculina pronunciar mi nombre

- ¡Anastasia, oye Anastasia espera!.

Me di vuelta y me encontré con un apuesto chico aproximadamente como de unos 17 años, de piel blanca, con cabello castaño claro, ojos verdes y unos maravillosos labios color carmesí

-¿Hola?-Dije confundida, -Disculpa, ¿quien eres?

- en serio no me recuerdas?-dijo en un tono gracioso, soy el chico con el que chocaste está mañana.

-oh claro, disculpa, estaba un poco apresurada.

- si, me di cuenta, mucho gusto Anastasia, soy Mark.

- oye, ¿como sabes mi nombre?, Pregunté con intriga a la vez que levantaba una ceja.

- oh, bueno. Eres muy conocida en el instituto por tus buenas calificaciones y lo linda que eres, siempre hablan de ti, todos saben que eres Anastasia.

Mi estómago empezó a rugir otra vez, Dios mío, tengo tanta hambre, y este chico que no se aparta de mi camino.

- oye ya me tengo que ir, tengo mucha hambre, deseo ir a comer.

- Maravilloso, vamos juntos y así yo también almuerzo de una vez.

Y ahí me encontraba almorzando con un chico apuesto, Mark me parecía tan increíble, dice estupideces que me hacen reír.

Entre risas y más risas no me di cuenta que una chica me estaba hablando, entre la multitud y la risa de Mark no puede escuchar muy bien lo que dijo, lo único que si escuché con claridad fue,    "oye zorra", iba a dirigirle la palabra  cuando de repente sentí que una bandeja estaba en mi rostro.

Mark

Estaba riéndome con aquella chica tan maravillosa, estaba contemplado su hermosa sonrisa con dientes perfectos, sus mejillas con un leve color rosa y sus ojos, por Dios, sus ojos son tan hermosos de color miel que demuestran inocencia y ternura. Cuando de repente escuché un fuerte sonido que me sacó de mis pensamientos...

                   

Dos Caras Frente Al Espejo (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora