pastel boy!

#²

Takemichi despertó en el sofá dónde había sido dejado ayer, se sorprendió al notar que un saco caro(precio equivalente a un diamante a su parecer) era lo cálido que lo abrigaba ,lo tomo entre sus manos, haciendo una mueca al ver que tenía gotitas de sangre en este. Soltando un suspiro se levanto, sorprendiendose al ver que estaba todo limpio a su alrededor, no había ni un rastro de sangre en el lugar, lo único con sangre ahí era su ropa. haciendo otra mueca ante eso, no podía ir a su casa con su ropa llena de sangre, además la gente ya trascendia en la calle , se sentía sorprendido, no pensaba que esos mafiosos tuvieran consideración con ese tipo de cosas, incluso hasta los sillones no tenían sangre, estaba fascinado, sin duda le gustaría agradecerle a ese cuarteto.

Se encamino a buscar entre los cajones que habían en la habitación, sonriendo cuando encontró ropa de repuesto, pero era la ropa que hina le compro esa vez que se acostaron y hubo roleplay, aún así le servía, así que sin más la tomo y fue al baño.
Ya cambiado salió de este , su vestimenta consistía en un peto blanco apegado al pecho, una falda tableada cuadrilles con tonos rosas y Burdeos, también traía consigo un sweater rosa palo que combinaba con la falda, se sentía avergonzado por el motivo por el cual tenía ese outfit ahí, pero era justo lo que había ,no podía quejarse, soltando un suspiro abrió el local, recibiendo a sus clientes, alguno que otro eran frecuentes , estos lo saludaban y halagaban su vestimenta, sin duda el chico pastel se veía lindo.

Eran pasado las seis de la tarde, se sentía cansado, hoy extrañamente fue un día muy ajetreado, soltó un suspiro mientras comía uno de sus pasteles, ni siquiera tuvo tiempo para descansar o para comer. Se habia ensimismado en sus pensamientos siendo ajeno al mundo exterior, ni siquiera noto esas tres presencias que lo miraban como si fuera un caramelo. Soltó un saltito junto a un chillido bajo cuando sintió una mano tocar su hombro, era grande y pesada, sacándole de sus pensamientos, dándose cuenta de las tres presencias, sonrojandose en el momento.

-hola! Disculpen, bienvenidos a mi pastelería ¿Que desean?-les ofreció una sonrisa cálida, que llegó directo a los corazones de los hombres, sonrisa que se borró cuando uno de ellos le mostró su placa policial, sabía que ayudar a esos tipos le iban a traer problemas, pero tampoco quería ser desagradecido con ellos (ademas podrian perfectamente meterle una linda bala entre sus cejas), así que tal vez para mal, le mentiría a la policía.

-soy Naoto Tachibana ellos son...- se interrumpió cuando escucho al joven decir su apellido en un susurro bajo -Disculpe ¿Nos conocemos?- dijo con un poco de recelo y duda, no le gustaría que un chico lindo fuera problematico.

-No disculpe, pero usted ¿Conoce a una chica llamada Tachibana Hinata?- y ahí fue cuándo naoto reconoció a ese outfit, recuerda a su hermana saltando y chillando de que se había conseguido una noche con un lindo chico , y que le había comprado una vestimenta para jugar a un roleplay en su pastelería, se sintió desfallecer, no podría creer que hina tuviera a tal sol escondido en las sombras , de seguro el chico se vería precioso gimiendo y retorciendose bajo de el, salio de sus pensamientos al notar que el menor le quedaba mirando esperando una respuesta, así que asintio rápidamente, sonriendo en sus adentros al ver como el más bajo de estatura se sonrojaba y buscaba mirar para cualquier lado menos su mirada , se escuchó una tos falsa, sacando de su burbuja a ese par, generando que le chico bonito soltará un "lo siento" mientras se sonrojaban más.

-yo soy chifuyu matsuno y el es mi compañero kisaki tetta, estamos aquí para investigar un caso, dónde creemos que usted tiene participación- le dijo con una sonrisa amable y un tono tranquilizante , generando que el ojiazul se tensara, no quería problemas y mucho menos con la policía, aún así cerró el local y los llevo hasta el cuarto detrás de este, dónde se descansaba, dónde mismo estaba el saco con leves gotitas de sangre de uno de esos chicos, lamentablemente para las tres personas presentes ese saco no paso desapercibido.

-Nuestro caso trata sobre una mafia que le hace competencia a la yakusa, se llama "bonten" cuenta con un líder enfermizo y retorcido, también sabemos hasta ahora que cuenta con nueve ejecutivos aunque no está confirmada esa información, así que iremos al grano, creemos que usted conoce alguno de ellos- le sonrió de una manera escalofriante kisaki, la simple presencia de este generaba escalofríos en nuestro protagonista, ademas esta seguro de que habia escuxhado esa voz antes.
Asintió ante todas sus palabras, demostrando que estaba escuchando , aún se comía su pastel , así que trago lo que estaba masticando para luego murmurar una respuesta tímidamente.

-lo lamento no ser de ayuda pero yo no sé nada con respecto a ese tema, lo máximo que se es lo que veo en la televisión, me disculpo por hacer que perdieran su tiempo- dijo mientras jugaba con sus dedos por los nervios , se sentía pésimo mintiendo , no le gustaba, el simple echo de hacerlo le generaba ganas de llorar.

-disculpe mi imprudencia , pero...¿De quién ese el saco que está encima del sofá?- dijo chifuyu con una sonrisa de superioridad, se sentía como un lobo casando a un conejito y el chico bonito lastimosamente era el acechado.

Takemichi se tensó ante la respuesta del pelinegro, no esperaba eso, maldición ahora se quería golpear por olvidar algo tan importante como el saco que está en el sofá, sintio sus ojos lagrimar, más no iba a llorar , el no quería problemas, solo quería descansar, inconscientemente apreto sus manos en puño, cautivando a los policías ante su reaccion de malestar.

-Ayer vino un cliente, vestia de manera elegante y fina, se le quedo el saco en una mesa, lo guarde en caso de que el volviera por el- Sintio el aire tenso por un momento, pues considero que los policias no le creian en lo más minimo, estos soltando suspiros se resignaron con conseguir información, tal vez lo más cercano que podrian obtener seria el numero del chico bonito.

-disculpe nuestro atrevimiento, no debimos aver venido a interrogarlo hoy, se nota que está cansado y que no tuvo una buena noche así que sin más nos marcharemos, pero antes me gustaria tener su numero telefonico en caso de, bueno si no le molest, lindo- lo último kisaki lo dijo susurrando, sonriendo en sus adentros mientras ideaba un plan para tener a ese chico solo a su merced, los otros dos policias se levantaron e hicieron una reverencia de despedida, mientras el hanagaki le entregaba una targeta al tercer policia con el numero del local, sintiendose aliviadl cuando este salio segundos despues por la puerta.
Espero unos minutos sentados, sintiendo la fatiga atacarlo, causando que soltara algunas lagrimas y sollozos.

Holaa!¡ cualquier cosita comenten.

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