Luna

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Ese día estaba entrenando. Kankuro me había prestado una marioneta para mejorar y pulir la técnica, estaba intentando hacer que la marioneta se moviera de la misma forma en la que un shinobi con experiencia lo haría, y lo estaba logrando.

No estaba sola, ya llevaba horas sabiendo que Neji me estaba observando por encima de un muro, y él sabía que lo había visto, sin embargo ambos habíamos decidido simplemente ignorar eso.

Poco a poco sabía mover la marioneta con más velocidad, podría ya poder usarla en una batalla considerablemente fácil, o tal vez retar a Kankuro de nuevo y darle un poco más de batalla.

Podía observar a Neji de reojo, él tenía entre sus dientes un shuriken, sus ojos estaban puestos en mi y de vez en cuando los llevaba a la aldea de la arena, se había levantado, sus movimientos eran sospechosos, en cuanto noté cómo prácticamente escupió el shuriken en mi dirección, moví la marioneta haciendo que bloqueara el arma y se incrustara en uno de sus brazos de madera.

El Hyuga saltó del muro y se puso frente a mi, su vista estaba ligeramente seria.

- me sorprende lo rápido que has avanzado con eso, ¿gustas practicar? - preguntó poniéndose en una posición de pelea.

—¿hablas enserio? - pregunté mientras lo veía.

- si, enserio, yo también quiero entrenar -

Asentí se forma suave mientras tomaba mi distancia, era increíble cómo ambos podíamos ignorar lo que había pasado el día anterior.

Aunque eso era algo ligeramente bueno, poco a poco el rencor que parecía haberme agarrado estaba desapareciendo.

Estaba haciendo lo posible por mover la marioneta a la misma velocidad con la que yo lo haría, era difícil, sin embargo estaba haciendo lo posible para poder atacarlo e intentar defender los golpes. Cada que Neji acertaba uno, la madera sonaba, estaba usando toda su fuerza de seguro.

— ¿Has usado toda esa fuerza contra mi sin que yo me dé cuenta? — pregunté moviendo los hilos, también tenía que tener cuidado, Neji podía cortarlos con únicamente pasar la mano.

El castaño estaba evitando los golpes que yo dirigía con la marioneta, sonrió de forma leve al escuchar mi pregunta.

- no realmente, no sería capaz... Creo - dijo golpeando el pecho de la marioneta - tus brazos son muy delgados para que la piel retenga toda la fuerza y no llegue a tus huesos, en los entrenamientos procuro no golpearte el pecho porque sé que puedo lastimarte más de lo que debería, tenía cuidado con tu cara, en tu estómago no querría hacerte vomitar, eres muy delgada... Pero no te ves mal, al contrario —

Eso me hizo sonreír de forma suave, podíamos tener una conversación normal mientras hacíamos esto.

Cada que Neji cortaba un hilo de chakra, yo rápidamente hacia salir otro y conectarlo a la extremidad que se había soltado.

— me gustaría luchar contra ti, pero que usaras toda tu fuerza, así sentiría que me estas tomando en serio — dije saltando por sobre él, pues se estaba acercando mucho a mi.

— no querrías eso, no sería tan duro contigo —

Eso me hizo sonreír.

— recuerdo que hace algunos meses me habías dicho lo contrario — dije haciendo que la marioneta lo golpeara y lo tirara al suelo.

Neji se levantó de inmediato, golpeó la marioneta tan fuerte que si no hubiera sido gracias a que jalé los hilos de chakra, seguro se hubiera perdido por ahí.

— ya sé de qué hablas... Eso era distinto, no sería duro contigo en batalla, pero en la cama claro que si — dijo sonriendo de forma juguetona - ¿por qué? ¿Acaso quieres que se repita? Aunque luego me pides que pare -

Mi Luz | Neji Hyuga Donde viven las historias. Descúbrelo ahora