Capítulo 8🌶 "The Heartbreak prince"

10.7K 432 85
                                    

AVISO
.
🌶Clasificación Madura🌶
.
.
.

"...and now the storm is coming, but..."- Fragmento de Taylor Swift.

Capítulo 8 "The Heartbreak prince"

Elara POV

-Vas a necesitar ser peor que eso para alejarme ahora.-

Maldición, no debió decirme aquello, no cuando todos mi sentidos clamaban por él. Intente mantener la mirada firme, pero me distraje unos segundos con su labio inferior, aún tenía ganas de morderlo y sabía que tenía su guardia baja.

Levante de nuevo mi mirada hacia él, sus manos me agarraban firmemente el rostro.

-Bien- sentencie y sin pensarlo, lo besé.

Esta vez él era el sorprendido y lo aproveché. No quería un beso tierno o delicado, lo quería fuerte y decidido. Lo tomé por la camiseta, juntando más nuestros cuerpos.

Carlos tardo unos minutos en reaccionar, hasta que sentí entonces su lengua acariciar mis labios y los separé, para darle acceso.

Un calor particularmente placentero se instaló en lo bajo de mi abdomen. Cuando Carlos me alzó y me llevo a la pieza consigo, quería gritar de la alegría. Lo necesitaba y sabía que el también a mí.

Mi cuerpo aún estaba sobresaltado por el ataque de Zack, necesitaba algo que lo calmase o pusiera mis nervios a trabajar en algo más. Y sabía que el español podía darme una buena dosis de distracción.

Carlos me quedo mirando por unos segundos y entonces lo noté, ese click que aparecía en su rostro con culpabilidad, lo invadió. Cerró los ojos y sabía que si no lo detenía su máscara de perfección volvería y todo se detendría allí.

Gale un mechón de su cabello, llamando su atención.

-Ni se te ocurra- lo señalé.

No iba a permitir que de nuevo su maldita culpa y caballerosidad lo alejaran. Era egoísta, no me importaba si en la mañana se arrepentía, ahora lo quería conmigo y solo eso me importaba.

Así que con todas mis fuerzas lo tome por lo hombros y lo clave a la cama, subiéndomele encima. Sabía cuál era su debilidad y la iba a usar en su contra.

Me quité la remera y el brasier, quedando a ahorcadas de él con el busto desnudo.

No era del tipo de chica que se avergonzaba por estar desnuda frente a un hombre, mucho menos por mostrarle sus pechos, pero mi ego cruzo un nuevo nivel con su mirada.

-La madre...- se tragó el insulto.

Toda su máscara de autocontrol cayó. Aquello fue el incentivo que necesitaba. Carlos me agarró por la nuca y tiró de mí, de vuelta a sus labios hambrientos. Su otra mano bajo por mi espalda, logrando que me arquee a su paso, hasta tomar uno de mis glúteos y apretarlo. Gemí en respuesta y este lo aprovecho para atacar mi cuello, mordiendo ligeramente y luego pasando su lengua para calmar el ardor.

La presión entre mis piernas comenzaba a molestarme de nuevo, trate de encontrar un poco de alivio frotándome contra su entrepierna y lo escuche gruñir.

De repente nos dio vuelta, de modo que ahora se cernía sobre mí y entonces comenzó mi tortura. Su boca se cerró alrededor de mi pezón, mordisqueando y lamiendo. Con su mano se encargó de acunar el otro seno y apretó más de lo esperado. Me arqueé ante la intensa sensación, pero antes de soltar un gemido, mordí mi mano. Carlos levanto los ojos hacia mí hambriento.

El Gran Circo: Camino a la recuperación (Carlos Sainz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora