Hirano Kohta... ¿O no?

2 - Bebé

Luego de haber seleccionado todo como debería el "Anfitrión" se desmayo y al despertarse fue por qué un doctor le dió una nalgada tras otra.

Sin más que hacer simplemente comenzó a llorar y el doctor dejo de golpear sus nalgas.

Una vez llorando lo llevaron con su madre, quién era una mujer rellenita y con una mirada apacible que lo tomo entre sus brazos con una sonrisa que emitía un cariño asombroso... Cosa que realmente no le llegó al corazón del nuevo Hirano Kohta.

Viendo que ya estaba en brazos de su nueva madre dejo de llorar y se acurrucó más en su abrazo ya que se sentía extrañamente bien.

Media hora había pasado más o menos y ya comenzó a darle hambre. Sabiendo perfectamente que era lo que debía hacer simplemente comenzó a gritar (o eso fue lo que intento pero comenzó a llorar ya que al ser el cuerpo de un bebé no podía controlarse bien... Aún). Su madre al ver que lloraba se sacó un pecho de la bata y comenzó a amamantarlo.

Pensé que tendría un mejor sabor. Esto es decepcionante y ligeramente repulsivo. No me gusta la leche materna aunque ya que es lo único que puedo comer me alimetare de ella, por ahora.

Mientras su mente comenzaba a maquinar en lo que haría a futuro sus ojos comenzaron a cerrarse y en unos momentos se había quedado dormido.

Mientras el pequeño Hirano dormía en brazos de su cariñosa madre que solo lo miraba con mucho cariño un hombre pequeño y gordo llegó a la habitación.

Hacia dos horas el hombre había llegado al saber que su esposa estaba a punto de tener a su bebé y al llegar y ver cómo cortaban la vagina de la mujer para facilitar la salida del niño de gran tamaño que tendría su esposa él simplemente se desmayo, su esposa se molestó por eso y el parto se complicó más pero luego de una pequeña charla del doctor que le decía que debía calmarse su ira paso y luego poco importaba ya que los asistentes se llevaron al esposo de la mujer que estaba en pleno parto a otra habitación para facilitar la relajación (aunque ella seguía pujando) y luego de una hora y media de pujar y pujar al fin el niño pudo salir.

Sin embargo los médicos estaban algo preocupados ya que por un leve momento el niño no respiro pero de un momento a otro parecía que simplemente parecía tener un sueño profundo, cosa rara, considerando la presión que debió ejercer el lugar por donde salió sobre él.

Ignorando las extrañes del parto y el pequeño niño (que era bastante más grande que el promedio en su país) simplemente siguieron los procedimientos estándar y comenzaron a nalguear al niño. Sin embargo, luego de que 3 enfermeras y un asistente lo nalguaran sin conseguir que siquiera despertara todos comenzaron a poner caras tanto de sorpresa como de intriga ya que parecía que al niño no le dolía para nada. El doctor mismo se quitó sus guantes y con toda la fuerza que tenía nalgueo al pequeño infante hasta que esté despertó y comenzó a llorar. Lo raro fue que el pequeño infante se le había quedando viendo mientras lloraba pero por un momento, aunque muy pequeño, había dejado de llorar y se le quedó viendo muy seriamente antes de continuar llorando con más fuerza. El doctor se sintió extrañado por aquel pequeño momento pero luego de simplemente recordar que llevaba más de 3 días sin dormir simplemente lo ignoro y luego de darle el niño a una enfermera se fue hacia afuera de la habitación para poder tomar una ligera siesta en una habitación vacía.

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-Se llamará Hirano Kohta. –La mujer le dijo a su esposo y él, a pesar de querer decir algo al ver la seriedad de la madre de su hijo solo sonrió con naturalidad y asintió, fingiendo que le gustaba ese feo nombre.

Los días pasaron rápidamente y la familia al fin había vuelto a su casa. El pequeño Kohta siempre era muy feliz y sonriente ante todo, mostrando querer ver y saber que había detrás de cada puerta y cosa, ya que cuando su madre estaba en su habitación y ella le leía un libro el pequeño Kohta empezó a moverse en su cuna, sin mostrar signos de sueño sino que quería ver qué era eso que sostenía su madre en sus manos.