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Esa no era la manera en la que esperaba que terminará su noche, mucho menos volver a ese lugar, sin embargo, ahí estaba, sentado en una pequeña sala de espera con un vasito de papel con café humeante en su interior a punto de terminar.

La estación parecía más movida que la última vez que estuvo allí, solo veía oficiales ir y venir cada cinco minutos, teléfonos sonaban junto a las teclas de los teclados de los computadores que probablemente no habían tenido descanso y el sonido de fondo de la impresora le daba el último toque, movió sus pies y soplo poquito su café para tomar el último sorbo.

- ¿Ya estás más tranquilo?

Jimin giró levemente y asintió, no sabía con exactitud cuanto tiempo había pasado desde que habían llegado, pero sabía que era suficiente como para sentirse un poco mejor, o eso creía.

- Bien, entonces te llevaré a tu casa.

- Pero mis cosas ...

- Te dije que mi compañero lo atrapará confía en lo que digo, además ya hiciste la denuncia déjalo todo en mano de nosotros - señalo el escudo de la estación pintado en una pared cerca - somos la justicia.

- Entonces ya debería dar mis cosas por perdidas ¿verdad?

El oficial llevó su mano a su pecho y le miro ofendido, quiso reír, pero contrario a eso solo elevo sus cejas esperando respuesta por Min.

- ¿Dudas de nuestro trabajo?

- ¿Me llevará a mi casa entonces o me dará para el taxi?, preferiría la segunda opción no sé si sea adecuado enseñarle a un extraño la ubicación de mi casa.

- ¿Tengo cara de beneficencia?

- Tiene cara de muchas cosas oficial - se puso de pie frente él, a simple vista se podía notar que la diferencia de estaturas entre ellos era mínima, sin embargo, Jimin seguía viéndose pequeño comparado con el corpulento cuerpo del oficial que se dejaba ver a través de su camisa cuello de tortuga negro que se pegaba estratégicamente a su cuerpo muy bien formado, hombros anchos, una cintura pequeña y brazos considerablemente fornidos ganados por su duro entrenamiento diario, Jimin aún llevaba sobre sus hombros su blazer que en algún punto entre el parque y la estación le fue puesto - ¿entonces?

- Vamos, ¿Qué podría hacer con esa información? ¿Ir a tu casa a hacer rata asada?, aunque bueno, eso en realidad es una buena idea - chasqueo sus dedos y sus labios dibujaron una sonrisa leve - he oído que son ricos, me da curiosidad, ¿a ti no?

Jimin abrió sus ojos horrorizados ante la mera idea, su pobre bebé ahora tenía un depredador.

- aléjese de Justin - hizo su mejor cara amenazante, pero a Yoongi solo le causaba risa ver lo fácil que era molestarlo, así que continuo.

- Ok la rata queda descartada, pero ¿Qué hay del dueño?




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El recorrido fue silencioso desde el momento en el que se subió a la patrulla procuró no decir nada, menos luego de lo dicho por ese grosero y mal educado policía, por otro lado, Yoongi mantenía su cabeza ocupada en un asunto muy alejado a lo que Jimin pensaba.

El silencio se estaba volviendo incómodo por lo menos para uno de ellos que deseaba llegar rápido a casa, tras un leve carraspeo hablo.

- emmm ..., gire por aquí.

El día que Jungkook nació ♡ Namjin ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora